A nadie sorprende ya la gran modernización inmobiliaria que vive la comuna de La Cruz desde los últimos años. Nuevos conjuntos habitacionales, de diferentes características, son la tónica de esta comuna. Pero lo que bien puede ser descrito como progreso también ha significado uno que otro problema en la congestión vehicular de la principal ruta estructurante local como es el camino Troncal (avenida 21 de Mayo).
De ese modo surgió en el municipio crucino, que dirige la alcaldesa Maite Larrondo, la necesidad de ampliar y mejorar la avenida Santa Cruz, que corre hacia el oriente paralela entre el Troncal Urbano y el Camino Internacional, a un costado de la vía ferroviaria. Junto a este tema pendiente se mantiene vigente una vieja aspiración crucina: mejorar la conectividad hacia Lo Rojas del otro lado del río Aconcagua.
Tal como explica Andrés Leiva, titular de la Secretaría Comunal de Planificación (Secpla), ambos puntos se han convertido en las grandes espiraciones viales. 'La Cruz es una muy buena comuna desde el punto de vista de la tranquilidad, del clima. Muchas personas vienen a la comuna buscando eso, sobre todo quienes son jubilados y para los profesionales está cerca de toda conectividad', aseveró Leiva.
Respecto de Lo Rojas, en la actualidad hay un puente colgante peatonal que claramente es insuficiente para atender las necesidades de unas mil personas que viven en el lugar. Para llegar con locomoción, actualmente los crucinos de ese sector deben ir hasta la vecina Quillota y a través del sector Boco acceder a Lo Rojas. Conclusión: más de 30 minutos perdidos en cada viaje, para una vuelta que no debería demorar más de 5 a 10 minutos.
Andrés Leiva explicó a 'El Mercurio de Valparaíso' que desde el año 2010 el Ministerio de Obras Públicas cuenta con el diseño de un puente vehicular sobre el río Aconcagua, cuya construcción demandará la no despreciable suma de $ 12.258 millones.
En relación al mejoramiento de avenida Santa Cruz, el proyecto, aunque más acotado, es igualmente estratégico. Y aunque la vía tiene una longitud cercana a los 2 kilómetros para conectar con Quillota, lo que el municipio crucino solo necesita es el mejoramiento de 845 metros lineales ente calles Eleuterio Ramírez y Calama, el tramo que se encuentra en mal estado. Luego irán por el restante, que necesita una expropiación de terrenos de Ferrocarriles entre otras propiedades.
El Servicio de la Vivienda y Urbanización aprobó técnicamente la obra, la cual se encuentra en dependencias del Ministerio de Desarrollo Social para su priorización. El equipo técnico del municipio crucino espera que ello ocurra en las próximas semanas para poder ingresar el proyecto al banco de iniciativas del Gobierno Regional para su evaluación cuando, con Fondos Regionales, se realice una nueva priorización de iniciativas en septiembre próximo.
El arquitecto y asesor del municipio Matías Planas, explicó que en 2007 se contrató el diseño del tramo completo desde Eleuterio Ramírez hasta calle Lorca Prieto en el límite con Quillota, por $ 7.900.000. Sin embargo, en 2009 y 2010, el municipio invirtió $ 3.600.000 para la actualización final del diseño del tramo actual entre las calles Eleuterio Ramírez y Calama.
Además de ello, respecto a obras de compensación para asegurar el ancho necesario (faja) de la estratégica arteria, que incluyeron la cesión gratuita de parte de los terrenos que colindan con avenida Santa Cruz, se consigna la construcción de panderetas por un monto de $9.341.500, entre 2012 y 2013.
$ 20
$ 12.258
