Si las últimas semanas de enero se caracterizaron por los días nublados, lo que no permitió a los turistas disfrutar de las playas de la región; los veraneantes que hicieron el recambio vivirán su periodo de descanso de manera distinta, pues para esta semana se esperan entre 29 y 30 grados Celsius para Viña del Mar y Valparaíso debido a la ola de calor pronosticada por la Dirección Meteorológica de Chile.
Las altas temperaturas se extenderían hasta mañana y se sentirán entre la cuarta y séptima región. En la zona, las ciudades que se verán mayormente afectadas serán las que se encuentran en la pre cordillera. San Felipe, Los Andes, Tal-Tal, Lliu Lliu, entre otras, podrían alcanzar máximas hasta de 37 grados.
En este sentido, expertos advierten que entre las tres y las cinco de la tarde no es recomendable exponerse al sol, debido a que es cuando se registrarán las temperaturas más altas.
Cristóbal Torres, meteorólogo de la Dirección de Meteorología de Chile, explica que esto se debe a que en verano entra una masa de aire cálido, proveniente del anticiclón subtropical del Pacífico, que hace subir las temperaturas.
Respecto a las últimas semanas de enero, donde los días estuvieron nublados, incluso presentaron lloviznas, Torres acota que estos cambios bruscos se deben a la circulación ciclónica en altura, es decir, el flujo del Este, que es cálido y seco, que baja y hace cambiar las temperaturas.
El meteorólogo advierte la importancia de usar bloqueador solar y mantenerse hidratado durante todo el día, ya que las altas temperaturas disminuyen la humedad relativa del ambiente y esto podría producir descompensaciones.
Asimismo, aconsejó mantener regadas las plantas y pastizales, porque al disminuir la humedad hay mayores probabilidades de producirse incendios forestales o de otro tipo.
Los que no disfrutan del verano, tendrán que esperar para poder caminar tranquilos y no verse aquejados por el calor, ya que, según lo indicado por el profesional, es muy probable volver a tener varios ciclos de calor como el vivido esta semana.
'Es un fenómeno de escala sinóptica, igual que los frentes de mal tiempo, se puede predecir pero hasta solamente cinco días; pero aún queda bastante verano por lo que se volverán a repetir', indicó.