La actual temporada de Emiliano Romero en Everton no ha sido de las mejores. Y es que el volante argentino ha sufrido una serie de lesiones que no le permiten tomar la continuidad necesaria para mostrar su mejor nivel. Hoy en día, el mediocampista se recupera de una sinovitis en el tendón peroneo, dolencia que no lo deja entrenar con normalidad y probablemente lo marginará del encuentro de este fin de semana ante San Luis de Quillota.
Pese a su ausencia y la de otros compañeros, el trasandino confía en que todavía se puede dar pelea para conseguir el ascenso. "Es un partido importante, aunque sabemos que está difícil. Si queremos seguir con una mínima chance hay que ganar. Ojalá que las cosas salgan bien para quedarnos con los tres puntos", sostuvo el volante.
Siguiendo con la misma tónica que ha manifestado el plantel a lo largo de la semana, Romero agregó que "no hay que bajar los brazos hasta que matemáticamente no tengamos más opciones porque en el fútbol nunca se sabe lo que puede pasar. Mientras tanto, tenemos que seguir haciendo nuestro trabajo porque defendemos una camiseta e institución importante".
Con respecto a la enorme expectativa que se había hecho la hinchada con el ascenso, y la desazón que actualmente reina en algunos seguidores, el mediocampista señaló que "la gente estaba muy ilusionada, y aunque la situación es complicada porque estamos un poco lejos, siempre nos han acompañado y apoyado. Hasta el final trataremos de cumplir el objetivo. Esperemos que la gente tampoco baje los brazos".
La posibilidad de mantenerse en Primera B está latente y eso bien lo sabe Romero. "No cumplir el objetivo sería una desilusión y una frustración muy grande porque muchos de nosotros vinimos con las ganas de llevar a Everton a Primera. Si bien las chances están, sabemos que es difícil", confesó.
Continuidad
A final de temporada, Emiliano Romero finaliza su préstamo y deberá volver a Defensa y Justicia en Argentina, aunque él tiene ganas de quedarse en Viña del Mar. "Todavía no pienso en eso porque queda campeonato y una vez que termine veré la decisión que tomaré. Estoy cómodo y contento acá, por algo volví para jugar en la B. Este es un club del que estoy agradecido, pero mi continuidad no es algo que dependa solamente de mí", aclaró.
El nuevo Estadio Sausalito y el flamante complejo deportivo son dos factores que también tientan al volante trasandino. "Eso es algo pendiente que tengo. El club va a cambiar mucho y sería lindo ser parte de eso", manifestó Romero.
Por último, aprovechó la ocasión para realizar un balance de lo que ha sido su rendimiento con los oro y cielo en este certamen. "No estoy conforme. Me siento en deuda porque durante toda esta temporada nunca me pude poner bien en lo físico. Tuve muchas lesiones y no pude agarrar continuidad, y eso me jugó en contra. Siento que no pude dar lo que esperaban de mí y que en otros torneos sí lo hice. Vine con otra expectativa e ilusión, pero el fútbol tiene estas cosas y a veces te agarra una racha negativa de lesiones que uno no puede manejar", sentenció.