Frente a las últimas críticas al proyecto de construcción de una planta de transferencia de basuras en Quilpué, el alcalde Mauricio Viñambres, salió a defender la iniciativa, a la que calificó como necesaria y estratégica para mejorar la gestión de los desechos domiciliarios, y ambientalmente viable.
La estación de transferencia, recalca el jefe comunal quilpueíno, no es un vertedero ni un relleno sanitario, sino un punto de tránsito de la basura que generan las casas de la comuna, y que servirá para mejorar la administración de los desechos, y reducir el número de envíos hasta el relleno de El Molle en Valparaíso. De los cerca de 10 camiones diarios que hoy se movilizan hasta la parte alta de la Ciudad Puerto con basuras de Quilpué, se espera que se reduzcan a tres, con el consiguiente ahorro.
Respecto de las aprensiones de algunos vecinos sobre las cercanías del proyecto con la población Villa Olímpica el alcalde Viñambres expuso que la actual distancia, teniendo como barrera el actual camino Troncal Sur, permite desarrollar allí un proyecto seguro.
"QUE SE INFORME"
Viñambres criticó al consejero regional por Marga Marga, Percy Marín, quien calificó de inviable el proyecto de Planta de Transferencia, puesto que a su juicio vulneraría lo dispuesto en el plan regulador denominado Premval, y que no permite construir una estación de este tipo a menos de 100 metros de una casa en un sector considerado de ampliación urbana.
"Lo primero que yo le diría al consejero es que se acerque a la jefa de Medioambiente de la Municipalidad y conozca bien el proyecto, porque me da la impresión que comete varios errores. Por ejemplo, él dice que a 100 metros va a haber una casa, pero una extensión urbana no significa necesariamente que se urbanice, de hecho, esa zona no tiene factibilidad de agua potable por Esval y por lo mismo es difícil que vaya a haber ahí en los próximos años un proyecto habitacional. Yo me lo imagino sí como un sector más para proyectos de carácter empresarial, que requiere menor cantidad de agua, en fin", manifestó.
Mauricio Viñambres sostuvo que a su juicio, el concejal Percy Marín ayuda a generar una polémica que no es efectiva en la comuna. Sostuvo que en términos de decisiones la palabra la tiene en estos minutos el SEA que está evaluando ambientalmente el proyecto, al punto que si se establece que la iniciativa no es viable desde el punto de vista medioambiental, el proyecto de planta de transferencia simplemente no se desarrollará.
"Lo otro -prosiguió el jefe comunal- es que este proyecto no tiene financiamiento regional, porque nosotros estuvimos por mucho tiempo intentando tener una planta de transferencia y nunca tuvimos la acogida ni del Gobierno Regional ni de la Subsecretaría de Desarrollo Regional. Este es un proyecto de privados con el municipio y eso significa que los fondos son generados por el propio municipio, y es por eso que este proyecto tuvo comisiones de trabajo con los concejales, quienes aprobaron esta iniciativa que sin duda es una solución para Quilpué".
En relación a la reticencia de vecinos por un creciente paso de camiones hacia el sector de Las Calicheras por las inmediaciones de Villa Olímpica, Viñambres manifestó que no se debe temer pues el proyecto contempla precisamente ese factor para no generar inconvenientes a la población. "Eso no va a ser así. Y creo que hoy hay un mayor número de camiones que pasa por ahí y que viene a botar escombros y basuras de varias comunas. Hoy hay un tráfico de camiones impresionante y una vez que esté la planta va a transitar el mismo número de camiones que circulan todos los días por la ciudad, los mismos que hoy nos sacan la basura".
INTERESES
A su juicio, detrás de las críticas al proyecto hay voces interesadas en mantener los vertederos ilegales existentes en Las Calicheras y que lucran cobrando ilegalmente una suerte de derecho por botar escombros y basuras. Sostuvo que con la presencia de esta planta de transferencia podrían ver anulado su negocio ilícito y que como efecto colateral, con el proyecto, se busca limpiar esa zona de Quilpué que hoy es un punto negro.
Cabe recordar que el citado proyecto, presentado a la comunidad en enero pasado, se encuentra en fase de evaluación ambiental ante el Servicio de Evaluación Ambiental (SEA). De 1 millón 70 mil dólares de inversión, la iniciativa es producto de un trabajo conjunto entre el municipio y la empresa Gestión Integral de Residuos S.A., la que financiará la construcción y operará la planta por seis años. La Estación de Transferencia de Residuos Sólidos Urbanos Comuna de Quilpué estará ubicada en terrenos municipales en el sector Las Calicheras, a un costado de la autopista Troncal Sur.
Ricardo Cortés