Una investigación que propone reevaluar el Plan Metropolitano Valparaíso (Premval) en torno a las normas permisivas para construir en el Gran Valparaíso y la falta de soluciones en temas como los incendios de Valparaíso, y los humedales desprotegidos de Concón y Ritoque, está realizando el Departamento de Arquitectura de la Universidad Viña del Mar (UVM) en conjunto con la Cepal de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y el Politécnico de Milán.
La iniciativa busca poner a prueba el actual plan regulador de la zona, mediante la aplicación de un "Modelo de Evaluación de Escenarios Metropolitanos de Desarrollo Urbano del Gran Valparaíso". Sumado a variables específicas del territorio (locales y de riesgo), y otras establecidas por un innovador estudio de uso de suelos realizado con anterioridad por la UVM, el prototipo permitirá responder preguntas como la relación existente entre las actividades básicas, de servicios y residenciales en las dinámicas de crecimiento y desarrollo urbano.
De acuerdo al arquitecto Lisandro Silva, magíster en Urbanismo y quien lidera la investigación, "es un modelo estratégico que permite que las autoridades y quienes planifican desarrollo urbano y del territorio tomen decisiones suficientemente informadas... por ejemplo, si se autoriza crecer aún más en Curauma, saber qué sucedería con el transporte, qué medidas en relación a los servicios se deben tomar, cuál es el costo social y medioambiental, entre otras variables. Es mostrar claramente las posibles interacciones con determinados escenarios de crecimiento".
El académico dijo que "en Chile se ha dejado de planificar en el ámbito urbano. El país ha adoptado un modelo de desarrollo donde la planificación fue desplazada por decisiones de mercado, y la gestión pública es cortoplacista, con falta de voluntad y limitadas posibilidades de intervenir anticipadamente en problemas de mediano y largo plazo".
Para Silva, el Premval no es la excepción. "Ha levantado también una ola de críticas por sus planteamientos de expansión urbana exacerbados y sin contemplar variables claves, como el crecimiento demográfico, la distribución de los ingresos en los hogares, y el comportamiento de oferta y valores del suelo urbano".
Uno de los principales motivos por los que se impulsó este modelo de evaluación tiene que ver con las experiencias en las comunas más grandes de la Región. El profesor Silva advierte que el Premval "ha dejado en evidencia que no funciona ante los distintos desastres naturales que nos han afectado. Recién después de estos eventos y del mega incendio de Valparaíso, ha cobrado interés el tema de los riesgos ambientales y antrópicos en los instrumentos de planificación urbana, demostrando una suerte de improvisación y una baja calidad en el diseño e implementación de estos".
Por ejemplo, expuso que "en nuestra Región no se presentan respuestas concretas a problemas de contaminación (Quintero-Puchuncaví), de degradación del patrimonio mundial y natural (zona UNESCO de Valparaíso y degradación de humedales en Concón - Puchuncaví y campos dunares de Ritoque, por nombrar algunos, y de infraestructura para el desarrollo regional, como la expansión del Puerto de Valparaíso y el sistema portuario central, que integre y permita el desarrollo de redes de ciudades, del frente portuario central y del turismo de valles centrales y borde costero".
"Después del mega incendio de Valparaíso, han cobrado interés los riesgos ambientales y antrópicos en los instrumentos de planificación urbana"
Lisandro Silva, Arquitecto UVM