Cristián Rojas M.
Si bien la determinación que tomó el rector junto al Consejo Superior de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso (PUCV) al plantear su disposición a incorporarse al sistema de gratuidad en 2016 era la que esperaban los alumnos, el presidente de la Federación de Estudiantes del plantel (FEPUCV), Jorge Rauld, manifestó sus reparos porque la decisión no consideró la participación de estudiantes y profesores, y porque a su juicio, se está pasando por alto el debate de fondo.
En tal sentido, el dirigente detalló que "la discusión aún no la damos oficialmente en el pleno de la Federación, que va a ser el viernes, pero de acuerdo a las posiciones que hemos tenido y que hemos ido adoptando como estudiantes de la Católica, vemos en primer lugar que una de nuestras intenciones frente al debate era poder pasar de esta discusión entre adscribirse o no a la gratuidad y centrarse en el problema de fondo, que en realidad es cómo el proyecto de gratuidad que se está presentando en este momento tiene que ver o no con lo que el movimiento ha planteado".
- ¿Qué esperan en ese sentido?
- Teníamos una crítica frente a lo que ha planteado la universidad, no en términos de la decisión que adoptó, pero sí en cómo ha enfrentado el debate, es decir, lo ha visto desde un punto de vista financiero, cómo afecta económicamente las arcas de la universidad, pero sin comprometerse con la discusión de fondo. A pesar de la decisión, tenemos una crítica muy grande por las formas en las cuales se resuelve hoy en la universidad. La decisión se adoptó entre el rector y el Consejo Superior, en un consejo extraordinario que no permitió la participación de los estudiantes ni los trabajadores, y más allá de que la decisión tiene que ver mucho con lo que los estudiantes pensábamos y estábamos de acuerdo, creemos que hoy día en universidades que dicen tener un rol público, hay que erradicar este tipo de prácticas.
- Pero la decisión era la que ustedes esperaban...
- Claro, nosotros creíamos que no podíamos mantenernos al margen de esta política, había que decidir, pero lo que criticamos a la universidad es que decidimos adscribirnos, pero no establecemos un cuestionamiento a lo que hoy día se está presentando como glosa presupuestaria, que no son las transformaciones que el movimiento estudiantil había planteado. Tenemos, por ejemplo, que en universidades como la nuestra, el poder adscribirse a la gratuidad no está asociado a mayores criterios de democratización, y eso es algo que nos parece negativo.
- ¿Tenían pensada alguna medida de presión en caso que la universidad no se hubiera sumado?
- Exacto, y en el Consejo General de Estudiantes, que tuvimos la semana pasada, asumimos la idea de no marginarnos de la glosa presupuestaria, pero con una serie de críticas a lo que hoy se está planteando. Por ejemplo, el proyecto sigue manteniendo el tema de la duración de las carreras y la efectiva gratuidad para los estudiantes, y en una universidad como la nuestra es muy poco el porcentaje de estudiantes que sale en el tiempo correspondiente.
- ¿Qué otro aspecto les inquieta en torno al escenario que habrá a partir de 2016?
- En conversaciones que hemos tenido en la mesa ejecutiva con los trabajadores, hoy día también nos preocupa que al final pueda haber un déficit, que según lo que estima la universidad, sería de alrededor de 250 a 300 millones de pesos, que si al final no se adscribía habría sido mayor. Si es que llegara a existir ese déficit, nosotros no vamos a aceptar un alza en los aranceles de los estudiantes, más aún cuando no hemos sido parte de esta decisión, lo mismo con los trabajadores y eventuales descuentos o limitaciones en el proceso de negociación colectiva que habrá el próximo año.
"Nos parece un error por parte de la universidad el haber tomado esta decisión tan importante al interior de un Consejo Superior y con el rector, sin la participación de los demás profesores, los estudiantes y los trabajadores"
"Hay una incertidumbre frente a lo que va a pasar con el proyecto, lo que habla de lo mal que lo ha hecho el Gobierno" "Las decisiones no pueden pasar por una elite de profesores, sino que tienen que ser debatidas en un espacio amplio, participativo y democrático"
entrevista. Jorge Rauld, presidente de la FEPUCV, sobre la gratuidad: