De milagro el ciudadano de nacionalidad polaca Stanislaw Kaldunski (53) logró salir del mar tras ser arrastrado por un tren de olas durante las marejadas ocurridas la madrugada del martes en Viña del Mar.
Según un testigo que se encontraba a esa hora de la noche en un departamento de la avenida Perú, un hombre adulto cayó al mar tras ser golpeado por las constantes olas que azotaban el sector.
Lo cierto es que efectivamente un hombre cayó al mayor durante la madrugada, pero a los minutos logró salir y durante todo el día martes -mientras la Armada y el GOPE desplegaban un intenso operativo de búsqueda para encontrarlo-, él se encontraba en su hogar ubicado en Quilpué, sin darse cuenta de lo que ocurría en el borde costero.
"feliz de estar vivo"
En escuetas declaraciones, el hombre, de profesión marino mercante, dijo que la primera ola que lo alcanzó lo mojó por completo. Cuando intentó escapar, otra ola lo botó al suelo y lo arrastró al mar.
Fue una tercera ola, en tanto, la que le permitió volver hasta un sector aledaño a los roqueríos del paseo viñamarino. "De repente estoy (en el mar) con la cabeza abajo y con los pies arriba. Sentí mucho dolor en mi cabeza y en todo el cuerpo, pero intenté salir de inmediato. Yo pensaba que el mar estaba tranquilo, pero el oleaje salió de inmediato. Estoy feliz de estar vivo, eso es lo más importante. Tengo unas heridas en la cabeza. No estaba en el agua, estaba solamente a cuatro metros de la orilla. Y fue mi esposa la que llamó porque supo de este gran procedimiento y que muchas personas me estaban buscando", dijo Stanislaw durante la madrugada de ayer.
Justamente, tras recomponerse y volver a su hogar en Quilpué, fue su propia esposa quien tras ver las informaciones que circulaban por los distintos medios de prensa se comunicó con la Capitanía de Puerto y dijo que la situación que se describía era muy similar a la que había vivido su pareja. De inmediato la Capitanía de Puerto se contactó con el testigo y se dirigieron hasta el domicilio del hombre.
"tuvo mucha suerte"
A cargo del operativo estuvo el capitán de puerto de Valparaíso, capitán de fragata Nelson Saavedra, quien debió comprobar que el hombre que había caído al mar efectivamente se trataba de Stanislaw Kaldunski.
El oficial de la Armada explicó que el hombre se encontraba cenando en un restaurant cercano a la avenida Perú junto con su señora, y que -pese a haber sido advertido por ella de que había fuertes marejadas en el borde costero- decidió acercarse hasta el roquerío, a la altura de 6 Norte.
Para el capitán de puerto se trató de un milagro: "La verdad es que tuvo mucha suerte. Le dije: bienvenido a la vida. Y me dijo que nunca más lo iba a hacer y que no iba a tener una segunda oportunidad como la que tuvo. Él se acercó al oleaje sin medir el riesgo que estaba corriendo", comentó Nelson Saavedra.
Agregó que el ciudadano polaco le confesó que "fue un momento de mucho apremio, pero que logró salir por sus propios medios por un sector aledaño a los roqueríos. Tiene su parte derecha de la cara rasmillada producto de los golpes, un ojo con lesiones, y también rasguños en su espalda y en una de sus piernas".
El capitán de puerto reiteró el llamado a no acercarse al borde costero hasta que disminuyan las marejadas, que se proyectan hasta la noche de este viernes.
"Por el aviso de marejadas todas las playas están con bandera roja, inclusive las cinco que están aptas para el baño. Y las personas también deben hacerle caso a los salvavidas, que conocen donde están las corrientes", dijo Saavedra.
Familiares dicen estar "shockeados"
La esposa del marino mercante, Dayana Robles Bello, quien llamó a la Capitanía de Puerto, dijo en una breve conversación con este Diario que tras la situación que vivió su pareja preferían no emitir más declaraciones porque "después de lo que pasó quedamos bastante shockeados como familia". La mujer -visiblemente afectada con lo sucedido- agregó que su pareja "no está dispuesto a hablar más allá de lo que dijo hoy (ayer) en la madrugada. Imagínate que en esta fecha pasara algo como esto".
"Yo pensaba que el mar estaba tranquilo, pero el oleaje salió de inmediato. Estoy feliz de estar vivo, eso es lo más importante"
Stanislaw Kaldunski, Ciudadano polaco