Seven de Viña busca ponerse en campaña para traer a los All Blacks
RUGBY. El presidente de Old Mack's realizó un balance de la última edición del torneo y adelantó algunos aspectos con miras a futuras versiones del tradicional certamen de la ovalada.
En su cumpleaños número 30, el tradicional Seven de Viña del Mar celebró a lo grande con la participación de Sudáfrica y otras importantes selecciones a nivel mundial como Argentina, Estados Unidos y Canadá. Un factor que sin duda consolida a este certamen como uno de los más relevantes del rugby sudamericano.
Desde sus inicios, el campeonato ha ido creciendo en forma insospechada hasta el día de hoy. Todo surgió a partir de una idea en un tercer tiempo, que se fue fraguando para hacerse realidad el verano de 1986, donde el cuadro principal de 16 equipos tuvo que ser completado con conjuntos conformados por argentinos que se encontraban vacacionando en la playa de Reñaca.
"Poco a poco fue tomando auge este torneo y ya posteriormente se empezó a competir como clubes y así fue sucesivamente hasta que el 2008 teníamos equipos de bastante importancia, y nos empezamos a apoyar con la productora de Pablo De María para ir mejorando e incrementando capacidades de gente y auspicio, lo que hizo crecer de forma exponencial al campeonato", cuenta Tomás Dagnino, presidente de Old Mack's y uno de los organizadores del evento.
Teniendo en cuenta los orígenes del Seven de Viña del Mar, el timonel del conjunto anfitrión no duda en reconocer que nunca pensaron llegar a tener a los Springboks en los pastos de Reñaca.
"Nunca nos imaginamos tener a un equipo de selecciones de ese nivel porque obviamente no es algo fácil de conseguir. Afortunadamente, basándonos un poco en las competencias de otros clubes que hay en Argentina, se aprovechó la venida de ellos porque así es más fácil que traerlos directamente de Sudáfrica", afirma el timonel de los dueños de casa.
Desde la organización quedaron absolutamente conformes con el nivel de rugby del evento y con el buen recibimiento del público. "Para nosotros este Seven fue muy especial, logramos contar con la participación de equipos de alto nivel competitivo, lo que implicó ver un excelente rugby y un nivel de competencia altísimo, tanto a nivel de selecciones como de clubes, por lo que consideramos que este torneo fue de excelencia técnica", asegura Dagnino.
Proyecciones
En gran medida, son factores como estos los que le permiten al mandamás de Old Mack's sostener que probablemente haya sido el mejor campeonato realizado hasta la fecha.
"Cada año hemos ido mejorando la calidad tanto en la parte de organización como deportiva, lo que ya nos pone como meta que en el próximo campeonato deberíamos superar a éste. Es difícil, pero siempre está esa meta de ir superando el torneo anterior y hasta el momento lo hemos cumplido", confiesa el directivo, agregando que "ahora tenemos que ponernos en campaña para ver si podemos traer a los All Blacks a jugar alguna competencia en Argentina y Chile para tenerlos ojalá el próximo año, pero esas son palabras mayores".
En este sentido, tampoco se descarta la opción de traer a Fiji, actuál número uno del ranking de esta modalidad de rugby, ya que la idea es poder contar con las mejores selecciones del mundo.
Por otra parte, un aspecto a mejorar es el nivel del torneo de clubes, donde se espera traer a equipos de mayor jerarquía. "Hay que empezar a ver cómo podemos ir invitando a clubes más competitivos, de manera tal que la qualy sea un poco más competitiva. Y con las selecciones igual, esperamos contar de nuevo con el apoyo para que este torneo sea clasificatorio para Hong Kong, porque obviamente las selecciones sudamericanas vienen con el máximo nivel de estrellas en busca de los cupos".
Y pensando a largo plazo, las metas son todavía mayores para los organizadores, ya que ilusiona la opción de transformarse en una fecha del Sevens World Series, pero con la condición de no llevarse el torneo a un estadio como para no perder la mística que han alcanzado en Reñaca.
"Nunca nos imaginamos tener a un equipo de selecciones de ese nivel (como Sudáfrica), porque no es fácil de conseguir"
Tomás Dagnino, Presidente de Old Mack's
Ser campeón: la deuda del local
A lo largo de las 30 ediciones, Old Mack's no ha podido alzar el título de la copa de clubes, una gran deuda para los anfitriones. "Lamentablemente nunca hemos podido, pero este año, al igual que el pasado, hemos estado quedando dentro de los cuatros mejores. Nos falta la pizca de suerte para poder llegar a jugar una final y ser campeón, esa es otra meta que tenemos para el próximo año para poder tener esa estrella que nos falta", sostiene Tomás Davagnino, presidente del cuadro local, que este año perdió en semifinales ante el campeón Córdoba Athletic de Argentina.
30 ediciones cumplió el campeonato de rugby que se realiza en el colegio Mackay, y cuyo inicio se remonta al verano de 1986.
20 clubes participaron en la última edición. Se espera mejorar el nivel de los equipos pensando en futuros campeonatos.
8 selecciones jugaron el reciente torneo: Sudáfrica, Argentina, Estados Unidos, Canadá, Chile, Brasil, Uruguay y Perú.