El Brasil de Neymar está obligado a ganar hoy para apuntalar su rumbo hacia el Mundial de Rusia de 2018 ante un Uruguay que recupera a Luis Suárez tras dos años de sanción y que juega sin presión por estar en una posición cómoda en la tabla.

El equipo de Dunga se ha enderezado después de un mal comienzo en las eliminatorias sudamericanas y aspira ahora a dar una demostración de fuerza en casa para escalar hasta la segunda posición de la clasificación.

Una victoria le permitiría superar a Uruguay en la tabla, puesto que la Celeste es segunda con nueve puntos y Brasil camina tercero, con siete.

El conjunto dirigido por Óscar Washington Tabárez sabe que Brasil no suele dejar escapar puntos como anfitrión, pero esto no significa que renuncie a la victoria, sino que le sirve para trasladar toda la presión a su adversario.

Sabedores de que los choques entre ambas selecciones suelen brindar partidos muy reñidos y con la convicción de que un gol puede desempolvar el eterno fantasma del Maracanazo, Uruguay hará todo lo posible para prolongar su fama de verdugo de gigantes.

Al margen de los puntos en juego, el partido vale una hamburguesa: el premio de la apuesta personal que hizo la pareja de delanteros del Barcelona, Neymar y Luis Suárez, y que tendrá que pagar el perdedor del duelo.

"La selección brasileña tomará la iniciativa en el partido como viene haciendo siempre. Esperamos que Uruguay busque el triunfo porque tiene calidad, pero esperamos en la mayor parte del tiempo a un adversario retraído", dijo el entrenador del Scratch, Dunga.

9 puntos tiene Uruguay en la tabla de posiciones de las eliminatorias, dos más que Brasil.

Era cosa de segundos. Parecía que el invicto de Ecuador en las clasificatorias sudamericanas rumbo al Mundial de Rusia llegaba a su fin. Sin embargo, Ángel Mena apareció para poner el 2-2 definitivo ante Paraguay para evitar la primera caída del Tri y mantenerlo en lo más alto de la competencia.

El local salió desde el arranque a intentar imponer su juego para así mantenerse firme en el liderato de las eliminatorias. El bloque ofensivo de la escuadra dirigida por Gustavo Quinteros salió con todo desde el minuto uno. De hecho, Christian Noboa inquietó al meta Justo Villar pasados los primeros treinta segundos de compromiso, anunciando que sería una jornada compleja para el portero de Colo Colo.

Fue así como, tras varias llegadas de peligro, a los 20 minutos Ecuador abrió la cuenta en el Olímpico de Atahualpa. Un bombazo de Noboa dio en el travesaño y el rebote fue capturado por Enner Valencia, quien se acomodó en el área y remató cruzado para poner el 1-0 transitorio en el marcador.

Los locales eran dominadores absolutos del compromiso, pero un error en la zaga les costó el empate antes del descanso. Un pase profundo de Néstor Ortigoza terminó en los pies de Edgar Benítez, quien llegó a línea de fondo y cedió atrás para que Darío Lezcano anotara tras una mala salida del meta Domínguez.

En el complemento la tónica fue similar. Paraguay apostó al contragolpe y le funcionó. Se puso en ventaja. Tras un rechazo largo desde el área visitante, Lezcano recibió la pelota cerca de la portería rival, aguantó la marca y sacó un disparo cruzado que significó el 2-1 transitorio. Pero los locales no querían rendirse. Así, el volante Ángel Mena se metió al área y con un globito batió a Villar y puso el 2-2 definitivo, cuando ya se jugaba el tiempo adicional.

Víctima de un cáncer de pulmón, falleció ayer en Barcelona uno de los más grandes jugadores en la historia del fútbol mundial, el holandés Johan Cruyff.

El ex jugador de Ajax y Barcelona, entre otros equipos, venía luchando desde octubre pasado contra la enfermedad, y pese a que hace algún tiempo se había mostrado optimista en torno a su recuperación, finalmente murió a los 68 años de edad.

Formado en la cantera del Ajax, Cruyff debutó en el profesionalismo a fines de 1964, iniciando una carrera que estaría marcada por el éxito y un estilo de juego nunca antes visto.

Con el conjunto de Ámsterdam, consiguió, en sus dos etapas, ocho ligas locales, cuatro copas de los Países Bajos, tres Liga de Campeones de Europa, una Supercopa de Europa y también la ahora extinta Copa Intercontinental.

En la temporada 1973-1974, Cruyff fichó por el Barcelona, donde destacó con su clase y habilidad que le permitió conquistar una liga y una Copa del Rey.

Tras militar en el fútbol estadounidense por un breve periodo, el holandés volvió a su país para defender al club de sus amores, y luego sorprender fichando en el archirrival Feyenoord, donde se retiró en 1984, luego de ganar la liga y dos Copas de Holanda.

En la Selección de su país también tuvo una destacada trayectoria, siendo parte de la generación del "fútbol total" llevado a cabo por la "Naranja Mecánica" en el Mundial de 1974, perdiendo, eso sí, la final con Alemania.

Como entrenador también tuvo una exitosa carrera en Ajax y Barcelona, aunque fue en los blaugrana donde dejó una huella imborrable, que para muchos fue la base de la actual identidad futbolística de los catalanes. Allí ganó, entre otros títulos, la primera Liga de Campeones del club en 1992.

"Él y la selección holandesa se adelantaron al fútbol moderno y tenían un fútbol fantástico, que siempre fue bien reconocido", comentó Elías Figueroa una vez conocida la muerte del ex jugador.

En tanto, Pelé también se refirió a la partida de Cruyff, destacando su "importante legado", y señalando que "hemos perdido a un gran hombre. Sigamos su ejemplo de excelencia".

"El y la selección holandesa se adelantaron al fútbol moderno y tenían un fútbol fantástico".

Elías Figueroa, Exfutbolista chileno

"Hemos perdido a un gran hombre. Sigamos su ejemplo de excelencia".

Pelé, Exfutbolista brasileño

Era cosa de segundos. Parecía que el invicto de Ecuador en las clasificatorias sudamericanas rumbo al Mundial de Rusia llegaba a su fin. Sin embargo, Ángel Mena apareció para poner el 2-2 definitivo ante Paraguay para evitar la primera caída del Tri y mantenerlo en lo más alto de la competencia.

El local salió desde el arranque a intentar imponer su juego para así mantenerse firme en el liderato de las eliminatorias. El bloque ofensivo de la escuadra dirigida por Gustavo Quinteros salió con todo desde el minuto uno. De hecho, Christian Noboa inquietó al meta Justo Villar pasados los primeros treinta segundos de compromiso, anunciando que sería una jornada compleja para el portero de Colo Colo.

Fue así como, tras varias llegadas de peligro, a los 20 minutos Ecuador abrió la cuenta en el Olímpico de Atahualpa. Un bombazo de Noboa dio en el travesaño y el rebote fue capturado por Enner Valencia, quien se acomodó en el área y remató cruzado para poner el 1-0 transitorio en el marcador.

Los locales eran dominadores absolutos del compromiso, pero un error en la zaga les costó el empate antes del descanso. Un pase profundo de Néstor Ortigoza terminó en los pies de Edgar Benítez, quien llegó a línea de fondo y cedió atrás para que Darío Lezcano anotara tras una mala salida del meta Domínguez.

En el complemento la tónica fue similar. Paraguay apostó al contragolpe y le funcionó. Se puso en ventaja. Tras un rechazo largo desde el área visitante, Lezcano recibió la pelota cerca de la portería rival, aguantó la marca y sacó un disparo cruzado que significó el 2-1 transitorio. Pero los locales no querían rendirse. Así, el volante Ángel Mena se metió al área y con un globito batió a Villar y puso el 2-2 definitivo, cuando ya se jugaba el tiempo adicional.

Víctima de un cáncer de pulmón, falleció ayer en Barcelona uno de los más grandes jugadores en la historia del fútbol mundial, el holandés Johan Cruyff.

El ex jugador de Ajax y Barcelona, entre otros equipos, venía luchando desde octubre pasado contra la enfermedad, y pese a que hace algún tiempo se había mostrado optimista en torno a su recuperación, finalmente murió a los 68 años de edad.

Formado en la cantera del Ajax, Cruyff debutó en el profesionalismo a fines de 1964, iniciando una carrera que estaría marcada por el éxito y un estilo de juego nunca antes visto.

Con el conjunto de Ámsterdam, consiguió, en sus dos etapas, ocho ligas locales, cuatro copas de los Países Bajos, tres Liga de Campeones de Europa, una Supercopa de Europa y también la ahora extinta Copa Intercontinental.

En la temporada 1973-1974, Cruyff fichó por el Barcelona, donde destacó con su clase y habilidad que le permitió conquistar una liga y una Copa del Rey.

Tras militar en el fútbol estadounidense por un breve periodo, el holandés volvió a su país para defender al club de sus amores, y luego sorprender fichando en el archirrival Feyenoord, donde se retiró en 1984, luego de ganar la liga y dos Copas de Holanda.

En la Selección de su país también tuvo una destacada trayectoria, siendo parte de la generación del "fútbol total" llevado a cabo por la "Naranja Mecánica" en el Mundial de 1974, perdiendo, eso sí, la final con Alemania.

Como entrenador también tuvo una exitosa carrera en Ajax y Barcelona, aunque fue en los blaugrana donde dejó una huella imborrable, que para muchos fue la base de la actual identidad futbolística de los catalanes. Allí ganó, entre otros títulos, la primera Liga de Campeones del club en 1992.

"Él y la selección holandesa se adelantaron al fútbol moderno y tenían un fútbol fantástico, que siempre fue bien reconocido", comentó Elías Figueroa una vez conocida la muerte del ex jugador.

En tanto, Pelé también se refirió a la partida de Cruyff, destacando su "importante legado", y señalando que "hemos perdido a un gran hombre. Sigamos su ejemplo de excelencia".

"El y la selección holandesa se adelantaron al fútbol moderno y tenían un fútbol fantástico".

Elías Figueroa, Exfutbolista chileno

"Hemos perdido a un gran hombre. Sigamos su ejemplo de excelencia".

Pelé, Exfutbolista brasileño

El Brasil de Neymar está obligado a ganar hoy para apuntalar su rumbo hacia el Mundial de Rusia de 2018 ante un Uruguay que recupera a Luis Suárez tras dos años de sanción y que juega sin presión por estar en una posición cómoda en la tabla.

El equipo de Dunga se ha enderezado después de un mal comienzo en las eliminatorias sudamericanas y aspira ahora a dar una demostración de fuerza en casa para escalar hasta la segunda posición de la clasificación.

Una victoria le permitiría superar a Uruguay en la tabla, puesto que la Celeste es segunda con nueve puntos y Brasil camina tercero, con siete.

El conjunto dirigido por Óscar Washington Tabárez sabe que Brasil no suele dejar escapar puntos como anfitrión, pero esto no significa que renuncie a la victoria, sino que le sirve para trasladar toda la presión a su adversario.

Sabedores de que los choques entre ambas selecciones suelen brindar partidos muy reñidos y con la convicción de que un gol puede desempolvar el eterno fantasma del Maracanazo, Uruguay hará todo lo posible para prolongar su fama de verdugo de gigantes.

Al margen de los puntos en juego, el partido vale una hamburguesa: el premio de la apuesta personal que hizo la pareja de delanteros del Barcelona, Neymar y Luis Suárez, y que tendrá que pagar el perdedor del duelo.

"La selección brasileña tomará la iniciativa en el partido como viene haciendo siempre. Esperamos que Uruguay busque el triunfo porque tiene calidad, pero esperamos en la mayor parte del tiempo a un adversario retraído", dijo el entrenador del Scratch, Dunga.

9 puntos tiene Uruguay en la tabla de posiciones de las eliminatorias, dos más que Brasil.