La patinadora nacional María José Moya sumó este fin de semana un importante título a su ya exitoso currículum.

Y es que la "Pepa" se coronó campeona del mundo en la modalidad de patín carrera 300 metros, en el certamen cumbre de la disciplina celebrado en la ciudad china de Nanjing.

La chilena consiguió el primer puesto de la carrera final tras completar el recorrido en un tiempo de 26,135 segundos. De esta manera, Moya logró superar a la surcoreana Yi Seul An, quien logró la plata con un tiempo de 26,188, y a la colombiana Jercy Puello, que se quedó con el bronce con 26,198.

Con esto, la chilena sumó su quinto título mundial en la disciplina. Su primera medalla de oro en campeonatos mundiales la consiguió siendo aún una juvenil en 2006.

Luego, dio el salto a nivel adulto. Primero, se hizo con el oro mundial en 2012 en Italia, cuando completó el mejor registro de la prueba de 200 metros contrarreloj. Posteriormente, consiguió el mísmo título en la ciudad argentina de Rosario en 2014, mientras que el año pasado obtuvo su cuarto campeonato mundial en Taiwán en los 100 metros.

En China también participó Emanuelle Silva, que se quedó con la plata en 300 metros.

campeonatos mundiales ha ganado María José Moya en su carrera: 2006, 2012, 2014, 2015 y 2016. 5

Su tercer título de Grand Slam, en igual número de finales, consiguió ayer en el US Open el suizo Stanislas Wawrinka (3°) al superar en una intensa definición al número uno del mundo, el serbio Novak Djokovic en cuatro sets con parciales de 6-7(1), 6-4, 7-5 y 6-3.

De esta forma al tenista helvético sólo le queda agregar a su palmarés el título de Wimbledon para completar éxitos en los cuatro torneos más importantes del circuito, tras sus triunfos en el Abierto de Australia 2014, Roland Garros en 2015 y ayer en el Abierto de Estados Unidos.

Como se esperaba, el duelo fue equilibrado en el inicio y sólo una definición en el tiebreak le permitió al balcánico tomar una pequeña ventaja. Pero esa luz de distancia se desvanecería pronto, pues a contar del segundo set, el suizo comenzó a mostrar superioridad y en particular gracias a su notable revés que causó estragos en Djokovic. Así, el número tres del mundo emparejó el marcador.

Episodio clave

"Nole" reaccionó y el tercer episodio se transformó en el más dramático de la jornada y fue allí que Wawrinka logró en el duodécimo juego un quiebre que resultaría clave, pues físicamente se veía más entero que su rival, que estaba obligado a ganar los dos últimos para defender su corona.

Pero el helvético no dejó lugar a dudas e inició la cuarta manga con un quiebre lo cual terminó por derrumbar la resistencia de un Djokovic abrumado por heridas en los dedos de sus pies que obligaron a su atención.

Pero el suizo no perdió la concentración y con solidez puso la rúbrica a su buen juego y se quedó con la gloria, concretando así su undécima victoria seguida en una final.

"Esto es fantástico y si hoy jugué mi mejor tenis es gracias a Novak...jugar de esta manera me hace ser mejor en la cancha y no quiero irme sin recordar lo que pasó aquí hace 15 años", concluyó en referencia al atentado al World Trade Center.