"Los representantes de la nueva administración solicitaron aclarar el monto de lo adeudado"
Iván Vuskovic
Concejal (PC) de Valparaíso y presidente de la Comisión de Finanzas
"Una de las cosas virtuosas de este movimiento había sido el carácter festivo"
Marcelo Díaz
Vocero de Gobierno por trastornos provocados por marchas de No+AFP
Grande es la ansiedad con que se prepara el público para asistir al gran concierto del destacado músico Gottschalk, un espectáculo hasta ahora desconocido en Valparaíso. El director de este gigantesco concierto, el señor Gottschalk, logró atraer a estos espectáculos en Santiago, al Ilustrísimo Arzobispo, hecho inusitado.
El activo industrial de esta ciudad, don Juan Matas, ha enviado una nota al alcalde en la cual incluye un cheque, el número 53 del Banco Español de Chile, por $ 400 pesos, a beneficio del camino al cementerio. Esta generosa donación la ha hecho espontáneamente, sin haber recibido ninguna insinuación siquiera.
Después de 12 años de realizar constantes experimentos para un mejor aprovechamiento de la energía solar, un ex capitán mercante, José Ávalos Calcagno, ha logrado construir un calentador que le permite mantener permanentemente en su hogar, y sin ningún costo, agua potable a alta temperatura.
El título de este artículo lo he parafraseado de un libro de Fernando Reyes Matta, publicado el año 2009, pues representa -a mi juicio- de manera más precisa las experiencias de cuatro empresas innovadoras de nuestra Región de Valparaíso en el Foro Empresarial Japón-América Latina y el Caribe denominado "Progresar juntos, liderar juntos e inspirar juntos", que ha tenido lugar entre el 31 de octubre y el 2 de noviembre en Tokio, Japón.
En primer lugar, destaco un hecho paradigmático. El Banco Interamericano de Desarrollo, BID, convocó a través de las direcciones regionales de ProChile a participar en dicho Foro a pequeñas o medianas empresas de Chile con un fuerte componente de innovación y vinculadas a actividades tales como desarrollo de software, inteligencia artificial, robótica, la internet de las cosas, impresión 3D, nanotecnología, biotecnología, energías renovables, almacenamiento de energías u otras.
En segundo término, relevar que en Chile postularon más de ciento sesenta empresas y el BID seleccionó de ellas sólo cinco, otorgándole un apoyo financiero para su participación. Sin embargo, el hecho más destacado es que cuatro empresas de las cinco seleccionadas son de nuestra Región de Valparaíso. Las empresas de la zona escogidas por el BID corresponden a: Aparatos Fisiológicos Durán (Proveedores servicios para la Industria de la Salud); Inmersivo (Publicidad, Desarrollo de contenido audiovisual); Innervycs (Servicios, Robótica, Inteligencia artificial, Investigación y Desarrollo); y Savtec (Servicios Tecnológicos).
Sin duda, la participación de nuestras empresas regionales en dicho Foro podría marcar un antes y un después, potenciando los vínculos de su actividad con Japón y oportunidades de aprendizaje, intercambio de experiencias y generación de vínculos comerciales a las que podrían acceder en sus actividades de innovación de ellas y en sus principales logros en la materia.
Para nuestra Región de Valparaíso es un honor contar con estas empresas regionales participando en un evento tan relevante como el Foro Empresarial Japón-América Latina y el Caribe, pues reafirma nuestra impronta innovadora y abierta al mundo. Somos pequeños, en el sentido literal, como dice un reciente libro titulado "En vez del pesimismo. Una mirada estratégica de Chile al 2040", pero somos más grande de lo que somos. Valparaíso fue la primera ciudad globalizada de Chile en el siglo XIX y nuestras exportaciones regionales representan al 2015 el 27,2% de nuestro PIB regionalizado y llegamos a 127 mercados de destinos.
La región tiene y tendrá en la internacionalización de sus empresas y sus universidades una vocación estratégica.
Alejandro Corvalán Quiroz
Director regional de ProChile
La polémica no es nueva. Está instalada hace tiempo y ahora cobra mayor fuerza con la llegada de una nueva administración a la Municipalidad de Valparaíso, encabezada por el abogado Jorge Sharp, con evidente inspiración renovadora, rectificadora y, usando una palabra de moda, refundacional. Y la discusión aparece ahora renovada con las declaraciones del concejal del grupo de Sharp, Claudio Reyes, voz autorizada, pues se trata de un arquitecto con experiencia en la ciudad. Con el fin de tener las manos libres, Reyes renunció a la presidencia de su colegio profesional, debido a las posiciones divergentes sobre los temas urbanos en general y sobre Valparaíso en particular.
Libremente, entonces, pero con las jinetas de concejal elegido con alta votación, Reyes reitera su rechazo al Terminal 2 del frente portuario y al proyecto Puerto Barón. "Es sumamente dañino", es parte de su juicio sobre el T2. En cuanto a Puerto Barón, afirma que faltó participación ciudadana y que "estos proyectos de retail son sumamente negativos para el urbanismo… verdaderos hoyos negros que generan la desaparición de un importante número de locales comerciales de menor escala".
Reacciona el concejal UDI Luis Soto, quien recuerda que ante esas iniciativas no ha faltado participación ciudadana y que generan seis mil empleos. En tanto, el senador Francisco Chahuán (RN) recuerda un hecho de la causa: Valparaíso "esencialmente es puerto" y agrega que frustrar el desarrollo del T2 "es hipotecar el futuro de Valparaíso".
Con realismo, Raúl Urzúa, presidente de la estatal Empresa Puerto Valparaíso, propietaria de los terrenos en discusión, en columna en este Diario abre las puertas al diálogo ante el nuevo escenario municipal. Defiende los proyectos y postula que "una buena relación ciudad-puerto será fundamental de cara al futuro de Valparaíso y el bienestar de la mayor parte de sus habitantes… vemos perfectamente posible encontrar puntos de acuerdo y sostener un diálogo fructífero con la nueva fuerza política que lidera los destinos de nuestra ciudad".
Buenas palabras, pero otro hecho de la causa es que los proyectos están en marcha y hay altas inversiones comprometidas incluso con empresas internacionales.
El llamado al diálogo no puede caer en el vacío, pues en la relación ciudad-puerto no hay sólo dos partes ya que también es una cuestión de interés nacional.
Por lo mismo, será inevitable en los próximos meses la "presidencialización" del tema, con los consecuentes anuncios, compromisos y riesgos de perder inversiones y presencia en el competitivo escenario del comercio marítimo internacional.