"De los candidatos que hay, soy al que
El último en sumarse a la ola de precandidatos presidenciales y remeciendo al laguismo profundo, el exministro y ex secretario general de la OEA, José Miguel Insulza -quien confiesa que le gusta que le reconozcan en la calle donde ha comprobado que no genera anticuerpos- piensa que mientras más cartas a la mesa, mejor. "Creo ser una opción válida y distinta a otras, porque de los candidatos que hay, soy al que menos vergüenza le da decir que es político", precisa, recalcando que "ofrezco ser alguien conocido que sabe hacer las cosas, que sabe dirigir, que sabe organizar y, sobre todo, que sabe tomar decisiones".
- El rector de la UDP, Carlos Peña, criticó que hubiera dejado su cargo en La Haya, sosteniendo en este Diario que "al parecer Insulza cree que los puestos públicos están a su disposición".
- Ojalá estuvieran a mi disposición porque me habría elegido uno mucho mejor, siempre en la política. Pero la verdad es que a don Carlos no lo conozco, nos hemos saludado un par de veces, y él no me conoce a mí tampoco y no veo por qué tengo que responderle sobre mi carácter personal a una persona con la cual no he conversado nunca en mi vida. Que converse conmigo y vea lo que pienso y siento y con gusto aceptaré sus críticas, pero referirse así de una persona es muy ligero y no es digno de un rector de una universidad.
- Su comentario iba en el sentido de la importancia estratégica del cargo que se deja en medio del juicio con Bolivia…
- Es que no lo hubiera dejado de manera alguna si no hubiera entendido que había un reemplazo más que adecuado, nadie es indispensable y, segundo, porque espero desde otro lugar seguir defendiendo los intereses del país con tanto entusiasmo como lo he hecho siempre. Porque creo que lo hice bien. Miro las encuestas de cómo estaba la cosa con Bolivia hace un año y veo que la actitud de los chilenos frente al tema hoy es mucho más tranquila y reflexiva.
- ¿Qué lo diferencia con el resto de los candidatos?
- Cuando hay primarias todos los candidatos de un sector tenemos algo parecido. Dentro de eso cada uno aporta su experiencia. Yo he estado muy cerca del gobierno, pero nunca he tenido un cargo electo. Y para la gente que busca a alguien con experiencia, pero que no haya gobernado, yo soy una opción y tengo una inclinación un poquito más hacia la izquierda que los otros, pero al mismo tiempo estoy disponible para dar confianza al mundo empresarial.
- ¿Con la desafección que tiene la gente por la política y usted, que se reconoce como 100% político, es necesario relevar la actividad a un lugar más justo?
- Sí. La gente extraña una política más franca, más realista y más sincera. Lo que a la gente le cae mal de los políticos es que le cuenten cuentos con anuncios como "voy a cambiar este país en pocos días" o yo "voy a crear un sistema social como los nórdicos", en circunstancias que tenemos la tercera parte del PGB de los nórdicos y pagamos menos de la mitad de los impuestos que los nórdicos. Entonces, les ofrecemos Suecia con el sexto de los ingresos que tiene Suecia para hacer las cosas que estamos prometiendo. Y la gente ya se dio cuenta que esas cosas son bluf. La mala imagen del político es asociada más que con alguien corrupto, que también es injusto, con alguien que cuenta cuentos. Yo me he caracterizado siempre por decir la verdad.
- ¿Qué ofrece Insulza?
- Yo creo en los cuerpos de ideas y acciones que la gente debe tener acerca del futuro del país. Esas cosas están, pero cuando uno aspira a gobernar por cuatro años tiene que decir qué hará en esos cuatro años y hacerlo a partir de la realidad que vive Chile hoy. Entonces lo primero es recuperar el crecimiento porque no se puede hacer nada si no están los recursos. Eso implica recuperar confianzas y se logra dando certezas respecto a su inversión. Podemos mejorar las cosas y pasar del 2% al 3,5% o 4% de crecimiento. En algunas partes se extrema el discurso negativo sobre el empresariado. Entonces, hay que mejorar el clima. Y eso implica una actitud que cambie el criterio de la gente que entienda que se necesita inversión y esa confianza también la da el mundo de la política.
- ¿La reformas de Bachelet la profundizará o las cambiará?
- Las reformas están ahí. No creo que se puedan emprender reformas cada tres años. Ahora, he escuchado a economistas señalando que se puede obtener la misma recaudación cambiando algunas cosas de las reformas y si la herramienta va a cumplir igual ese objetivo de generar una recaudación equis, pero generando más confianza, estoy disponible.
- ¿Qué lo desmarca de Lagos?
- Tenemos experiencias distintas. Yo no he gobernado, yo fui su ministro y he tenido experiencia en terreno y él quizás tiene menos de eso. Tenemos diferencias que dan distinto carácter y en función de eso la gente elegirá lo que le parezca mejor.
- ¿Hay opción para la Nueva Mayoría de mantenerse en el gobierno?
- Yo creo que hay chance. Este es un país que carga hacia la centroizquierda y es probable que quienes lo han estado expresando, no lo han hecho del todo bien.
- Le pregunto porque Marco Enríquez-Ominami abogó por unir todas las opciones para enfrentar a Sebastián Piñera.
- Tengo una conversación pendiente con él. Tengo que llamarlo, pero él tiene que entender que esto es en ambas direcciones. Si él quiere entrar a la primaria de la Nueva Mayoría, estaría dispuesto a considerarlo en la medida que va a respetar los resultados y después no se va a lanzar por fuera, porque si no, no tiene gracia.
- ¿Con el caso de Bancard en Perú se le complica a Piñera la candidatura?
- Yo tengo una buena relación con él y él conoce mi opinión porque se la entregué cuando yo era ministro del Interior y él presidente de RN. Y le dije que yo era mucho más tajante en la separación entre el dinero y la política y que no creía que una persona que manejaba la cantidad de empresas que él manejaba pudiera tener un cargo público y hacerlo como alguien que sólo estuviera dedicado a eso. Él conoce mi posición y no es un motivo de nueva discrepancia. Yo no me he metido en el tema específico del juicio con Perú -además que creo que Chile ganó ese juicio- y mi opinión, muchas veces dada, es que no es bueno que el Presidente de Chile tenga intereses económicos en el extranjero. Entonces, hay que poner más reglas. Me dio gusto que la parte extranjera de sus inversiones se iba a poner en un fideicomiso, pero yo creo que eso no es suficiente.
- Alejandro Guillier encabeza las encuestas. ¿Cómo lo ve?
- Yo lo veo como un activo de la Nueva Mayoría y gran parte de la buena imagen que tiene es porque es una persona que salió de otra actividad pública para dedicarse a la política. Porque él se dedica a la política. Él dice que es independiente, que no es político, pero él se está dedicando a la política y la política es y será siempre igual: hay algunos que la practican bien y otros que la practican mal. Mi única objeción que le hago es que no siga diciendo que no es político, porque no se conoce un no político que haya sido Presidente de la República.
- ¿Le ve viabilidad a la Nueva Mayoría?
- Creo que sí, pero con los deterioros de las distintas fuerzas a veces los partidos tienen la conducta del "sálvese quien pueda" y esa no es una buena receta para formar coaliciones. Las coaliciones se forman cuando todos se dan cuenta que nadie se salva solo.
- ¿El camino propio de la DC es un suicidio político?
- Creo que sería un error, pero eso lo decidirán ellos. Uno no puede llevar a la gente de la mano porque cada uno decide lo que más le conviene. Sería lamentable. Espero que lo analicen bien y que se les den todas las garantías del caso porque también es cierto que se han empujado algunas cosas que a la DC no le han gustado.
- El falangismo se siente pasado a llevar. ¿Lo ve así?
- Cuando uno ve a economistas DC tan distinguidos, como José de Gregorio y Hugo Lavados, comentando la conducción económica, me doy cuenta de que no los hemos consultado lo suficiente sobre la conducción económica y eso es lo que tendríamos que hacer. La gente, cuando tiene capacidades le gusta que le pregunten cómo debieran hacerse las cosas.
menos vergüenza le da decir que es político"
"La gente está cansada de que le cuenten cuentos. Les ofrecemos Suecia con el sexto de los ingresos que tiene Suecia para hacer las cosas que estamos prometiendo. La gente se dio cuenta que esas cosas son bluf " "A veces los partidos tienen la conducta del 'sálvese quien pueda' y esa no es una buena receta para formar coaliciones. Las coaliciones se forman cuando todos se dan cuenta que nadie se salva solo""