"Riesgo de no ponerse de acuerdo es retroceder hacia modelo mercantilista"
— Paula NarváezMinistra vocera de Gobierno
"No elegiré el camino fácil de irme a retiro sin resolver este problema"
— General Bruno VillalobosGeneral director de Carabineros
El buque "Valparaíso" que viene de la zona sur a este puerto todavía no aparece. Se cree que haya sufrido algún atraso o avería a causa de las contingencias meteorológicas; el gran temporal que se ha experimentado en Concepción ha debido afectar al "Valparaíso" navegando desde Ancud para Puerto Montt.
El rumor de que el nivel de agua en el lago Peñuelas es muy bajo, fue desmentido ayer por el gerente de la Empresa de Agua Potable, don Jorge S. Lyon, quien dijo que la provisión de agua del lago alcanzaba para un año más de servicio de abastecimiento. Agregó que aun si no volviesen a caer lluvias en este invierno, aun así, no habría problemas.
Sir Francis Chichester, el navegante solitario inglés de 65 años, hizo una entrada triunfal en la bahía de Plymouth (Inglaterra), al culminar un viaje de 28.500 millas alrededor del mundo en el yate "Gipsy Moth IV". Chichester, delgado, bronceado y eufórico de alegría, pisó tierra al anochecer, sin que se le notaran huellas de cansancio del largo viaje.
Van siete, sí, por ahora, contando el del 22 de mayo en la Ciudad Jardín, son siete los tiroteos ocurridos en nuestra región los últimos días. Siete y tres muertos.
Este último episodio, aconteció en la avenida Los Castaños de Viña del Mar, dejando a un menor de 13 años herido, quien al salir de su casa a ver lo que ocurría, recibió un balazo, que gracias a Dios no tuvo consecuencias fatales, pero sí contribuye a aumentar el grado de temor e inseguridad en los habitantes de nuestra zona, quienes como la gran mayoría del país debe vivir tras las rejas de sus casas, mientras los delincuentes se adueñan cada día más de los espacios públicos.
Van siete tiroteos, sí, pero vendrá el ocho, el nueve y seguirán viniendo porque nadie -entre los que están obligados a cuidar nuestras vidas desde el gobierno- tiene la capacidad de enfrentarse a la violencia como corresponde: con agallas. La pregunta, entonces, parece obvia: ¿en qué clase de país estamos viviendo? Déjeme responder: según la Presidenta y sus adláteres debe ser el país de "esto no es más que un hecho aislado", como el terrorismo en La Araucanía, que acaba de dejar otro saldo de camiones quemados y baleados en Ercilla; como los portonazos, como los robos a los comerciantes. Puros hechos aislados, seguro.
El 20 de diciembre último, Fedequinta, la Federación de Dueños de Camiones de la V Región, la cual presido, junto al comercio detallista de Valparaíso, hicieron otra manifestación en contra de la delincuencia. No fue la primera ni será la última, porque el espiral violento aumenta sin control y es la gente quien paga las consecuencias.
Por cierto, difícil quedarse callado cuando la calle hierve de indignación por los tiroteos indiscriminados, por los asaltos que a diario sufren nuestros transportistas en la Región de Valparaíso, por los actos terroristas en el sur de nuestro país. Eso no lo podemos permitir, no lo debemos permitir. Si un grupo de fascinerosos o una banda de terroristas nos agrede una y otra y otra vez y las autoridades miran para otra parte, ¿qué quieren que hagamos?; ¿qué agachemos el moño como corderos y esperemos mansitos nuestro turno para que nos roben, incendien y maten?
Este gobierno se llenó la boca -y lo sigue haciendo- discurseando sobre los abusos y la injusticia. Miren la consecuencia de tanto blablá ideológico: qué mayor abuso y qué mayor injusticia que las que sufren a diario los comerciantes, los transportistas, la gente inocente, cuando carecen de la protección de un Estado cada día más ideologizado y más ausente, incapaz de garantizar las condiciones mínimas de seguridad de las personas y sin la menor voluntad política para dar respuesta a cuestiones de vida o muerte.
Si el Estado no tiene ni la voluntad ni la decencia de asumir sus obligaciones, ¿qué le queda la gente de trabajo que no sea levantar la voz y defenderse?
José Egido
Presidente Federación Regional de Dueños de Camiones
En un congreso sobre trenes y metro realizado en la capital se dieron a conocer diversos avances y proyectos en el desarrollo del transporte ferroviario. El más reciente es la puesta en marcha de un tren expreso entre Santiago y la localidad de Nos, tramo de 22 kilómetros que el servicio cubre en 24 minutos y que en otros medios de transporte, tardaba una hora y media.
Los convoyes se desplazan a 120 kilómetros por hora con una tarifa de entre $610 y $740. El pasaje en buses rurales tiene un costo promedio de $ 1.000. El servicio opera desde las 06.30 hasta las 23:00 con frecuencias que van entre los 6 y los 8 minutos y desde la semana pasada transporta casi 30 mil personas diarias.
En la misma reunión se dieron a conocer detalles de la proyectada extensión de Merval hasta La Calera, que tendría un costo de US$ 400 millones, tramo de 26 kilómetros por una faja de terreno ya existente y que contaría con las estaciones, a partir de Limache, de San Pedro, Quillota Sur, Quillota Centro, La Cruz y La Calera. Con esta extensión el viaje entre La Calera y Puerto demoraría una hora 23 minutos. El bus hace ese recorrido en un lapso de dos horas y 52 minutos.
Se trata de la recuperación de toda la extensión del servicio ferroviario que operaba casi desde del Siglo XIX y que permitió el crecimiento en torno a su eje de comunas como Quilpué y Villa Alemana, fortaleciendo el desarrollo de otras, como Quillota.
La mala noticia es que esta extensión demoraría cinco años, si es que los estudios afinados se inician ahora mismo. El tramo estaría en servicio el año 2022. Dentro de las posibilidades y digamos, de los sueños, un estudio a nivel de perfil considera un ramal del Metro Regional desde Viña del Mar hasta Concón.
Los tiempos y las inversiones en estas iniciativas y otras en el resto del país contrastan con la acometidas en Santiago, como el tren a Nos o el recorrido hasta Rancagua, que estará en régimen en 2019 con trenes a 140 k/h en un recorrido total de 55 minutos.
El repetido discurso proclama el mejoramiento del transporte público, pero en terreno la mejoría no alcanza a todos los sectores.
Pero seamos optimistas y confiemos que con nuevas miradas económicas, políticas y técnicas la velocidad que se muestra en los proyectos pase del tablero de dibujo a los hechos concretos en beneficio de la calidad de vida de la población.