Un informe de la Contraloría Regional de Valparaíso advirtió que la Secretaría Regional Ministerial (Seremi) de Educación y la de Salud no realizaron las medidas solicitadas en un oficio de 2011 emitido por la Subsecretaría de Salud, que pedía "establecer un plan regular y permanente tanto de limpieza industrial como de vigilancia epidemiológica en la totalidad de los establecimientos evaluados" y "mejorar colegios con deficiencias en infraestructura".

En octubre de 2011 la Subsecretaría de Salud recibió los resultados sobre la situación sanitaria y presencia de metales en polvo y suelos de los 14 colegios de Puchuncaví.

Dicho estudio comparó los establecimientos con los niveles registrados en la antigua escuela La Greda, que en ese entonces aún no era trasladada. El colegio conocido por los graves síntomas de sus alumnos ese año ocupó el primer lugar de los colegios afectados, seguido por La Laguna, Escuela Básica Campiche, Colegio Maitencillo, Escuela Básica La Chocota y Escuela de Pucalán.

Tras una consulta de Andrés León y Hernán Ramírez, el órgano contralor local investigó la situación y descubrió, informando en un oficio del 20 de junio, que "si bien la Seremi de Salud, en sus fiscalizaciones a los citados establecimientos educacionales, detectó situaciones que podían incidir en materias de la competencia de otras entidades públicas, no remitió los antecedentes a quienes correspondía" y que "esa entidad debió haber arbitrado las acciones pertinentes para subsanar el problema detectado, en virtud de sus atribuciones y responsabilidades indicadas en la normativa previamente citada y atendida la urgencia de dichas medidas".

Asimismo, dijo que "no se advierte en qué medida los proyectos informados por la Seremi de Educación permitirían mitigar los efectos indicados en ese documento, relativos a la exposición de los alumnos a metales pesados y polvo".

Por esto, solicitó a ambas reparticiones actuar coordinadamente para reevaluar las acciones recomendadas en el oficio citado, "de ser necesario, incluir a otros organismos en dicho proceso", e informarles del avance en un plazo de 60 días.

La Seremi de Salud explicó que sus acciones "en el trabajo de fiscalización en los establecimientos educacionales de Puchuncaví han sido sistemáticas en la labor de controlar el funcionamiento de acuerdo a las normas sanitarias de estos recintos".

En relación a los avances logrados en términos de infraestructura para los establecimientos educacionales, se confirmará si sirven para minimizar el riesgo ambiental "o se podrán exigir otros, a través de fiscalizaciones que realizaremos en nuestro plan de acción", dijeron, y afirmaron que se coordinarán con la Seremi de Educación, que no respondió a nuestras consultas.

Cristián Rojas / Paolo Navia

Luego de la polémica generada por el paso del "Bus de la Libertad" por Santiago, que incluso llegó a los enfrentamientos en las calles entre partidarios y detractores, mañana éste llegará a Valparaíso con la consigna "Con mis hijos no se metan", en alusión a una supuesta orientación anti heteroparental en textos educativos y en proyectos de ley.

Así lo confirmó la vocera de la organización que trajo a este bus a Chile, Marcela Aranda, quien detalló que "el bus en Valparaíso estará el miércoles entre las 10 y las 11 y media de la mañana, pero no vamos a dar ninguna información más que esa, por un tema de seguridad", teniendo en cuenta lo que sucedió en Santiago.

Por otra parte, precisó que el bus estará sólo en Valparaíso y no en otra comuna de la región, aunque tampoco quiso confirmar detalles sobre su traslado desde Santiago ni dónde estará situado el bus durante su estadía en la ciudad.

Consultada sobre si solicitarán alguna medida de seguridad para resguardar la integridad de quienes vengan en la máquina, dijo que hasta ahora no lo han hecho, mientras que el gobernador provincial, Jorge Dip, tampoco se refirió al tema.

En referencia a lo que ocurrió en Santiago, Aranda indicó que "aquellos que hoy día (ayer) manifestaron violencia, agresividad, discriminación, intolerancia y odio no fuimos nosotros, fueron otros grupos", y agregó que "Carabineros nos paró el bus, se lo llevó, mientras el bus que llevó el Movilh estuvo antes que nosotros frente a La Moneda y tuvo libertad para poder actuar, y eso es discriminación arbitraria, suponemos que por indicación desde el Estado de Chile".

Banderas de diversidad

Por su parte, el alcalde de Valparaíso, Jorge Sharp, sostuvo que "es un bus que no representa el tipo de ciudad que deseamos construir desde este proyecto colectivo, básicamente porque es un bus que expresa la intolerancia, que no reconoce a la no discriminación como un valor universal y fundamental entre seres humanos, pero además, expresa un tipo de sociedad violenta al negar a otro ser humano".

Considerando aquello, indicó que "vamos a generar un conjunto de medidas que manifiesten nuestro rechazo a este contenido que el bus entrega, y una de esas acciones será el izamiento de la bandera de la diversidad sexual tanto en el edificio de avenida Argentina como en el de calle Condell, para expresar nuestro compromiso con un tipo de sociedad diversa y tolerante".

Por otra parte, detalló que "a propósito de lo sucedido en Santiago, el equipo jurídico de la municipalidad está analizando todas las posibilidades que tenemos para no permitir en ingreso del bus, pues entrega una mala señal porque al final genera confrontación y eso es lo que menos queremos en Valparaíso".

Posturas en el congreso

Para el senador Francisco Chahuán (RN), recalcó que "es propio de una sociedad democrática que todas las posturas se puedan expresar libremente".

Una visión similar tiene la diputada María José Hoffmann (UDI), quien sostuvo que "me parece absolutamente legítimo que quienes no comparten la ideología de género puedan expresarse. Este bus va a dejar al descubierto la hipocresía de la intolerancia".

Por su parte, el diputado Marcelo Schilling (PS) cree que la llegada del bus a Valparaíso "se trata de una provocación que la reacción indignada de algunos chilenos le hace precisamente el juego a la provocación, porque ellos, para salir en los medios lo que necesitan es que se hable, se haga escándalo, es lo que han buscado en todos los países donde han actuado y aquí no es la excepción. Yo los dejaría que circulen".

A juicio del diputado Christian Urízar (PS), "esto le genera un desafío al Gobierno y a nuestro país, el desafío de las libertades, donde en definitiva tenemos que entender que hay posiciones diferentes a las que nosotros quisiéramos. Yo creo que esto enriquece el debate. A mí no me gusta que se enfrenten en las calles de Santiago ni que pueda ocurrir en Valparaíso, pero sí me gusta que esto esté en la prensa como un debate interesante".

"Acá estamos frente a la paradoja de hasta dónde aquellos que se dicen tolerantes, toleran aquellas manifestaciones de voluntad distintas a las que son sus convicciones"

Francisco Chahuán, Senador RN"

"La reacción indignada de algunos chilenos le hace el juego a la provocación (...) porque ellos para salir en los medios necesitan que se haga escándalo"

Marcelo Schilling, Diputado PS"