"Si el TC declarara la inconstitucionalidad de las causales, no implica que Chile sea retrógrado"
"Lo que decida el Tribunal Constitucional sentará jurisprudencia en esta materia", explica el director del Departamento de Derecho Público de la PUCV, Eduardo Cordero, al sopesar los efectos del fallo que emita el organismo que deberá dirimir la constitucionalidad o inconstitucionalidad del proyecto que establece la despenalización del aborto en tres causales: inviabilidad fetal, peligro de la vida de la madre y violación.
- ¿Es o no inconstitucional el proyecto?
- La pregunta es compleja. Aquí hay dos ideas que son claves. Lo primero es que la Constitución establece una serie de ideas que son básicas para la sociedad, pero muchas veces te das cuenta que las normas constitucionales tienen preceptos abiertos que dan lugar a varias posibles interpretaciones acerca de su alcance. Y una justamente ocurre con el tema de la garantía del derecho a la vida y la protección de la vida que está por nacer, porque claramente existe una visión de cuando se entiende que una persona existe. Y desde el momento en que tú entiendes que esa persona existe, puedes establecer interpretaciones radicalmente distintas sobre la constitucionalidad o no de un proyecto...
- El artículo 19 de la Constitución asegura la vida de las personas y en el 1 se asegura la integridad psíquica y física de la persona, y luego protege la vida que está por nacer. O sea, ambas vidas están cubiertas.
- Históricamente se sostuvo que la existencia de las personas se iniciaba con el nacimiento, lo que llamábamos la existencia legal, pero el Código Civil protege la vida del que está por nacer dando a entender que había vida, pero no existencia jurídica. Esa concepción se enfrenta a otra que fija la existencia constitucional de la persona desde la concepción y, por lo tanto, el ser humano tiene existencia jurídica desde que es concebida y, por lo tanto, cualquier atentado a la vida del que está por nacer implicaría un atentado no tolerado por la Constitución.
- Esas son las posturas que debe revisar el TC.
- El TC tuvo que analizar esta materia en el caso de la píldora del día después. Y ahí el TC tendió a entender que la época de la concepción determinaba la existencia de la persona. Pero ahora, con las causales para la interrupción del embarazo viene a plantearse por segunda vez un tema que no está cerrado por varias razones. Entre ellas, la integración de los miembros del TC y que han cambiado. Esto lleva a que el alcance de la norma constitucional sea determinado por este tribunal y muchas veces está entregado a concepciones de carácter moral o políticas de cada miembro. Y como consecuencia de aquello seguir una u otra concepción puede ser determinante para la constitucionalidad de esta ley. Si prevalece la tesis de que el nacimiento determina la existencia de la vida el proyecto será declarado constitucional, pero si prevalece la tesis de que la vida se genera en la concepción será inconstitucional. Quiero dejar claro que es un tema que se discute en el ámbito jurídico, constitucional y médico, y es un tema esencial al momento de discutir en la sociedad cómo se van a resolver temas tan fundamentales como el inicio de la existencia de una persona.
- ¿Cuál será el efecto de este fallo?
- Con esta sentencia se va a tomar una decisión que es política, o sea, determinar -a la luz de la Constitución- cuándo se entiende la existencia de una persona. El tema está abierto, hay muchas cosas que han ido cambiando; en este tema existen muchas discusiones y, a veces, hay que tomar posiciones y aquí la sentencia del TC va a ser fundamental.
- ¿Sentará jurisprudencia?
- Exacto. Lo que también llamamos interpretación constitucional. Esto ocurre en Chile y en el derecho comparado. La Constitución no puede ser un tema pétreo en el tiempo; la Constitución tiene que ir avanzando; por eso tiene cláusulas generales. Así se entiende que haya constituciones que tienen más de 200 años como la de EE.UU. y que se estableció en una época agraria, pero sigue estando vigente. Por lo tanto, uno no puede esperar que la Constitución marque la rueda de la historia, sino que va evolucionando. Y lo que ocurre muchas veces con estos tribunales constitucionales es que establecen precedentes, pero también avanzan. Y lo más probable es que acá se planteé un problema acerca de cómo entender esto, lo que para muchos puede significar un avance y para otros un retroceso, porque las personas tienen visiones acerca de la vida que no necesariamente son compartidas.
- Entre los parlamentarios oficialistas está el propósito de acudir a la Corte Interamericana de DD.HH. si el proyecto se declara inconstitucional. ¿Chile está obligado a cumplir un fallo internacional?
- El tema de llevarlo a una corte me parece complejo porque aquí se está discutiendo una regulación. Cuando se recurre a la Corte Interamericana es por situaciones que afectan a personas que han sido vulneradas en sus derechos, como ocurrió con el caso Atala. No es un tema de regulación, salvo que se tratara de una persona que se hizo un aborto y va a ser condenada y pudiera llevar ese tema a la corte. En el caso de este eventual requerimiento de parlamentarios oficialistas, primero esto debe ser llevado ante la Comisión Interamericana de DD.HH. para ver si es plausible o no el caso. Y luego de eso debe ir a la Corte Interamericana. Pero la dinámica es bien particular porque el Estado de Chile tiene la obligación de cumplir esos dos fallos, pero para cumplir esos fallos tiene que adoptar las medidas internas para dejar sin efecto una sentencia. Tendría que modificar la Constitución porque de lo contrario caería en el incumplimiento de una obligación internacional.
- O sea, ¿a su juicio no está claro si procede o no llevar este caso a esa instancia?
- ¿La verdad? Yo veo que no es viable. Si es una persona natural tiene que haber agotado todas las instancias jurisdiccionales en Chile para ir a la comisión interamericana. Por lo tanto, la posibilidad de armar un caso ante la Corte lo veo difícil. Tendrían que armarlo de otra manera.
- Ayer salió en la prensa el caso de una niña de 10 años que fue madre después de haber sido violada. No se le permitió abortar porque tenía más de 20 semanas, que es el límite aceptado en la India para hacerse un aborto por esa causal. En Turquía también existe aborto. Son países que uno piensa que podrían ser más fundamentalistas. ¿Chile puede convertirse en un país retrógrado si se rechaza el aborto en estas tres causales?
- En Europa la media son tres meses. La verdad es que siempre la discusión puede estar abierta para uno u otro sector. Yo podría decir que en principio el proyecto tal como está formulado plantea temas que son generalmente aceptados, como el conflicto de la vida de la madre, temas que se pueden discutir, pero que dependen mucho de las concepciones que se tengan. Entonces, no creo que sea retrógrado, menos retrógrado, tener despenalización en estas tres causales. Lo que sí creo es que hay personas, y yo me coloco dentro de ellas, que tenemos objeciones de conciencia que son personales y que muchas veces no tenemos por qué imponerlas a otras personas. Pero no creo que estemos frente a un tema de tener una sociedad más o menos avanzada si tenemos reglas más o menos avanzadas. Estamos frente a un proyecto de interrupción del embarazo en causas taxativas, no ante el derecho al aborto.
- Entre quienes critican que el TC opere en la práctica como una tercera cámara proponen reestructurarlo, poner resguardos.
- La existencia del tribunal siempre ha sido objeto de discusión y también la integración, pero esto no ocurre sólo en nuestro país, sino que también en Europa y EE.UU. En este último país se sabe cómo piensan, en lo valórico y político, cada miembro, pero también se sabe que son competentes, serios y responsables. En el caso de Chile este tema se ha discutido desde el inicio, lo que ha llevado a distintas formas de integración. Hoy tenemos una fórmula en la que intervienen los tres poderes del Estado. Y no se puede obviar que estas personas tienen sus posiciones y creencias, pero cualquiera sea su integración es un tema que nunca se va a poder superar. Entonces, a lo único que se puede apelar es a que el TC escuche a todos, discuta con profundidad y establezca una sentencia razonada.
- Fernando Atria señalaba que en otros países hay resguardos para evitar que se convierta en una tercera cámara...
- No, eso no es efectivo. Conozco bien lo que pasa con el TC alemán, el español, y todos tienen tendencias políticas, creencias, hay mayorías. Hay temas que son delicados y que requieren consensos, y si requieren grandes consensos, requieren reforma constitucional.
- ¿Podría ser, por ejemplo, un tribunal apelable?
- En Europa agotas todas las instancias judiciales, llegan al TC y luego a la Corte de Estatutos de DD.HH. Son juicios que nunca terminan. Creo que acá hay que llegar al momento en que debes tomar una decisión y sancionar.
"Lo que sancione el TC para muchos puede significar un avance y para otros un retroceso, porque las personas tienen visiones acerca de la vida que no necesariamente son compartidas" "Cualquiera sea la integración del TC, es un tema que nunca se va a poder superar. Entonces, a lo único que se puede apelar es a que el TC escuche a todos, discuta con profundidad y establezca una sentencia razonada""