Ultiman detalles para la llegada de refugiados sirios a la región
INMIGRACIÓN. Municipio de Villa Alemana buscará capacitar a funcionarios por tema idiomático. Colegio Árabe de Viña del Mar colaborará con profesores para que aprendan español.
Afinando los últimos detalles se encuentra la Municipalidad de Villa Alemana para recibir a siete de las 15 familias sirias que arribarán al país este jueves 12 de octubre, como parte del Programa de Reasentamiento de Refugiados Sirios, organizado por el Estado de Chile.
En concreto arribarán 70 personas: 36 adultos (19 hombres y 17 mujeres) y 34 niños (18 hombres y 16 mujeres) las que llegarán al país, con el objetivo de iniciar una nueva vida en las comunas de Macul y Villa Alemana, alejadas de la guerra que desde hace años afecta al país (ver recuadro infográfico).
En ese sentido, desde el Departamento de Extranjería y Migración del Ministerio del Interior indicaron que ya están definidas las viviendas que acogerán a los refugiados, las cuales están siendo equipadas. Asimismo, se informó que tras la llegada de estas personas el Servicio de Registro Civil e Identificación, así como la Policía de Investigaciones (PDI), realizarán un operativo a fin de agilizar los trámites para la obtención de la cédula de identidad, lo cual les permitirá tener acceso a todos los servicios sociales del Estado, como escuelas para los niños y consultorios de atención primaria de salud.
A Villa Alemana las familias llegarán el mismo 12. Según confesó el alcalde de la comuna, José Sabat, tenía pensado darle una gran bienvenida, pero ésta no se desarrollará durante los primeros días de su estadía, ya que "no queremos exponerlos a situaciones que podrían afectarlos".
"Vamos a tenerlos por algunos días sin ningún tipo de eventos, porque queremos que se sientan cómodos y seguros. Queremos que se ambienten de mejor forma al entorno y a la ciudad. Hay que tener en cuenta que acá van a comenzar una nueva vida muy diferente a la que tenían en su país", sostuvo el jefe comunal.
Y agregó: "Lo único que nosotros queremos y necesitamos es hacer que ellos se sientan bien en nuestra ciudad, entregarles el amor, el cariño y el afecto que necesitan. Estamos absolutamente claros sobre qué es lo que debemos hacer. Pese a esto, la ciudadanía completa se ha acercado al municipio para consultar en qué pueden colaborar con los refugiados".
Por otro lado, pese a no confirmar exactamente dónde serán destinadas las siete familias que lleguen a la ciudad, ni tampoco si las viviendas serán departamentos o casas, el alcalde Sabat aseguró que los refugiados sirios estarán acompañados en todo momento por la comunidad árabe de la ciudad.
"Hay aproximadamente seis o siete traductores. Cada uno de ellos, seguramente, tendrá asignado una familia en particular para que éstas no se sientan desprotegidas", aseguró, acotando que "el objetivo es darles a entender que estamos trabajando para que se sientan de la mejor manera en nuestra comuna".
Asimismo, detalló que la ayuda "más próxima" que tendrán como municipio será en materias de educación y salud. "Los arriendos de las viviendas donde vivirán los refugiados ya están cancelados, por el lapso de un año, por el Ministerio del Interior. Mientras tanto, nosotros tenemos los distintos departamentos municipales que van a hacer todo lo posible para entregarle la mejor ayuda posible".
En ese sentido, el jefe comunal explicó que "ellos van a llegar con toda la documentación ya hecha. Va a ser como si tuviesen residencia, no definitiva, pero sí temporal lo que les va a permitir acceder a todos los beneficios municipales".
Sabat ejemplificó con el tema laboral: "Existe el fomento productivo que vamos a ir realizando por el período de un año. Es un período de ambientación para conocer la forma de ser de los chilenos, las ubicaciones, etc. Si quieren emprender algún negocio, saber dónde comprar, dónde poder vender. Nosotros pensamos que por aquí viene la oportunidad de trabajo para los refugiados, tanto por su gestión propia, como por sus habilidades. Tenemos las armas para que ellos puedan ser felices en nuestra ciudad".
En cuanto al tema de educación, el alcalde de Villa Alemana aseguró que los niños sirios serán recibidos en los establecimientos municipales de la ciudad, a fin de integrarlos lo más rápido posible. No obstante ello, indicó que el Colegio Árabe de Viña del Mar colaborará "con profesores, quienes enseñarán el idioma español, tanto a los adultos, como a los más jóvenes. Además, tratarán de enseñar y capacitar a los funcionarios municipales en la lengua árabe, para que estos puedan atender a los inmigrantes sirios en cualquier necesidad".
Al respecto el rector del establecimiento viñamarino, Juan Sakalha, puntualizó que la colaboración que el colegio prestará a los refugiados estará orientada en dos sentidos.
"Primero es hacer clases en idioma español al grupo en general (adolescentes y adultos). Eso son, aproximadamente, 240 a 280 horas pedagógicas, por los próximos tres meses", explicó, detallando que las clases se realizarán por medio de un programa preparado especialmente para la ocasión "a fin de entregar los conocimientos mínimos del idioma y el conocimiento del diario vivir, manejándose en distintos aspectos".
En segundo término, "si entre los refugiados que llegarán hay niños en edad escolar, el colegio los recibiría para, también, entregarles una inserción dentro de lo que significa la inclusión educacional en el colegio", manifestó.
En este último aspecto, el rector del Colegio Árabe explicó que se les asigna un profesor especializado que tendrá la particularidad de adentrarlos en el idioma y sistema educativo en un periodo que abarca de octubre de este año a febrero del 2018.
"Ellos van a llegar como oyentes y a partir de marzo del próximo año se ingresaría; una vez que se haga el proceso de ubicación académica que la secretaría ministerial de educación va a determinar, dependiendo de la edad, del conocimiento y estudios que ellos puedan traer desde su país", dijo.
No obstante ello, en el caso de que los menores sirios no vengan con escolaridad, Sakalha indicó que el Ministerio de Educación (Mineduc) permite adecuarse para que estos inmigrantes puedan entrar al sistema educacional chileno "con todas las de la ley".
"Esto significa que hay que prepararlos y se entrega una evaluación al ministerio y éste los ubica, de acuerdo a sus conocimientos, en el curso que corresponde. Para ello, el colegio va a colaborar en los próximos cuatro meses con ellos, para más adelante proceder a la inserción definitiva", comentó Sakalha.
Añadió que "estamos muy contentos con que este gobierno haya abierto las puertas a la llegada de estos refugiados que han sufrido tanto en su país y que se merecen vivir en un ambiente más tranquilo y de paz".
Las familias que arribarán a Chile no sólo vienen de una cultura diferente, sino también de un conflicto armado que los obligó a vivir en campamentos en los países vecinos. De allí que la primera recomendación sobre cómo tratarlos es "respetarlos", como aseguró el director de la Sociedad de Beneficencia Siria, Adolfo Numi, quien explicó que esto implica "no acosarlos, sino que dejarlos que hagan sus vidas tranquilos. No discriminarlos, ni favorable, ni perjudicialmente. Es decir, tratarlos como iguales".
Numi comentó que los que llegan a Villa Alemana y Macul "vienen de un campamento de refugiados, por lo tanto, es gente que viene, claramente, con una forma distinta a la de acá. O sea, los sirios que conocí antes de la guerra era gente feliz, contenta y observadora. Pese a esto, ellos conocen cómo es la vida en occidente y tienen perfecto conocimiento de cuáles son las costumbres de acá. Creo que no se van a encontrar con ninguna sorpresa. En el Líbano se les explicó cómo eran los temas culturales en este país".
Pese a lo anterior, el director de la SBS sostuvo que se debe estar preparado en caso de que los refugiados no se logren aclimatar del todo a la ciudad que los albergará. "Ellos vienen de una rutina diaria normal a otra rutina diaria normal. Vienen de una vida en campamento o de condiciones de mucho hacinamiento. Por ello, es que digo que hay que estar tranquilos y expectantes a cómo van a reaccionar. Puede que algunos vengan un poco estresados y no les guste las casas donde se quedarán, o no les guste el barrio, el clima, el país, etcétera. Estas son personas que llevan casi cuatro años en esta misma situación, por tanto, es un poco difícil saber cómo vienen. Sin embargo, creo que el tema religioso no va a ser un problema", finalizó.
"Vamos a tenerlos por algunos días sin ningún tipo de eventos, porque queremos que se sientan cómodos y seguros. Queremos que se ambienten de la mejor forma al entorno y la ciudad".
José Sabat Alcalde de Villa Alemana"
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