Con el Gobierno de la Presidenta Michelle Bachelet, la Agenda Laboral ha avanzado a la fecha en más de 30 leyes que promueven condiciones laborales más justas para las y los trabajadores chilenos. Entre ellas, el diálogo social y relaciones laborales más sólidas y efectivas para un escenario más justo para la negociación colectiva, sentido de la Reforma Laboral que ha disminuido la conflictividad a menos de un 5% en la región y posibilitando los acuerdos y el entendimiento. Asimismo, la nueva Política de Seguridad y Salud en el Trabajo pone al centro el derecho a la protección física y mental del trabajador y promueve la Cultura de Prevención y la efectiva disminución de riesgos en el trabajo, siendo la protección de la vida del trabajador una prioridad.

La Ley de Inclusión Laboral (21015) desde el 2018 en su estreno garantizará un cupo de reserva de puestos trabajo para las personas con capacidades diferentes en todas las empresas con más de cien trabajadores (sector público y privado, e instituciones castrenses), estableciendo además el derecho al trabajo para todas y todos en igualdad de condiciones, terminando con las brechas salariales en detrimento de las personas en situación de discapacidad. En otro aspecto, más de 200 mil personas han accedido al Programa Capaz, dirigido especialmente a mujeres, jóvenes y personas en situación de discapacidad desempleadas, para promover el acceso a la capacitación en oficio, como a la vez sostener importantes logros en materia de intermediación laboral y contratación.

La desaceleración económica impactaba ya al gobierno pasado, que promedió una tasa de desempleo de 6,9 por ciento al fin de su mandato. El sueldo mínimo cerró en 210 mil pesos, reajustándose entre 2010 y 2014 en 38 mil pesos. Por su parte, un acuerdo con la CPC y la CUT que lideró el actual gobierno garantizó que en abril de 2014 se aprobara por ley un reajuste semestral del sueldo mínimo, el que en enero de 2018 se fijará en 276 mil pesos, habiendo aumentado en cuatro años este monto en 66 mil pesos, a pesar de la desaceleración económica.

En ese mismo contexto, la tasa de desempleo regional promedió un 6,1% (JAS, INE). Son muestras claras de que con la Presidenta Bachelet el desempleo comienza a revertirse, quien incluso cerrará su gobierno con un 6,4% de cesantía. El último informe trimestral de empleo del INE señala, asimismo, un aumento del empleo asalariado en un 3,8%, siendo un gran factor para este nuevo escenario la política pública de inversión y apoyo al emprendimiento, productividad e innovación, en favor de la creación de nuevos empleos, estables y de calidad.

Karen Medina E.

Seremi del Trabajo y Previsión Social

150 años | 4 de noviembre de 1867

Atraso de FF.CC. causa problemas a pasajeros

El tren de Santiago llegó con algunas horas de atraso a la estación Puerto de Valparaíso, causando problemas a los pasajeros, en especial a aquellos que debían embarcarse en la tarde de este lunes. Además, la correspondencia también quedó en tierra. Según nos dicen, la locomotora tuvo una falla por escape del vapor en el recorrido.

100 años | 4 de noviembre de 1917

Monseñor Gimpert viajará a Limache

Esta tarde llegará en tren a Limache monseñor Gimpert, Gobernador Eclesiástico de la provincia, quien será recibido en la estación por una comisión de caballeros. Desde allí se dirigirá al templo parroquial de San Francisco para celebrar misa y administrar el sacramento de la Confirmación. Además, visitará la escuela Normal y el hospital.

50 años | 4 de noviembre 1967

Alessandri no será candidato a senador

El ex Presidente de la República, Jorge Alessandri Rodríguez, declinó ayer aceptar la candidatura a senador por Bío Bío, Malleco y Cautín, en una declaración pública entregada en momentos que se desarrollaba una concentración en su honor, calculada en 5.000 personas, frente a su residencia, en la Plaza de Armas de la capital.

El jueves pasado todo Chile viajó y se asombró con la modernidad de la Línea 6 del Metro de Santiago. En esa alfombra mágica digital que es la televisión se pudo compartir a lo largo de todo el territorio la parafernalia del recorrido inaugural, encabezado por la Presidenta Michelle Bachelet, que alegremente cargó en una máquina electrónica su tarjeta BIP, la que abre la entrada a los andenes de las 10 flamantes estaciones de la nueva red. Luminosas y elegantes, cuentan con puertas de seguridad junto a las vías para evitar accidentes. La modernidad también está en los cómodos convoyes, sin maquinistas.

Por la tarde la televisión mostró a todos los chilenos la curiosidad y regocijo de miles de capitalinos que hicieron uso del nuevo servicio. Por cierto, en la noche los noticieros, por largos minutos, reiteraron las imágenes y experiencias del primer día de recorrido por la nueva extensión de la red de Metro que suma ya 120,6 kilómetros.

Esta prolongación, que une Cerrillos con la comuna de Providencia tuvo retrasos y rectificaciones, y un costo final de US$1.036 millones. Pero los proyectos no se detienen ahí. Se habla de alargar la flamante vía y de acometer la Línea 7. El costo sería de US$ 100 millones de dólares por kilómetro.

Lo anterior es conocido, pero es bueno repasarlo y esgrimirlo cuando tenemos tareas pendientes en nuestro propio metro: la extensión hasta La Calera, pues actualmente sólo llega hasta Limache, pese a que desde 1863 los trenes alcanzaban a esa comuna. Por muy buenas razones, sin duda, el recorrido encogió y quedó en 43 kilómetros, pero se promete la recuperación de los 26 kilómetros desaparecidos. Y también está pendiente un detallito, la Estación Valencia, en Quilpué, prometida en 2010 para el año 2012.

Todo esto puede sonar a envidia o resentimiento ante la ostentosa inauguración en días electorales y de disputada paternidad de una obra ciertamente beneficiosa para muchos chilenos. ¡Felicitaciones!

Pero no es así. En este caso, como en muchos, enfrentamos el tema de la equidad, reiteradamente recurrido, esgrimiendo los acusadores números de la OCDE. Aparece aquí inequidad en la inversión en transporte público, cuestión que toca directamente la calidad de vida de la población, de las personas y de su seguridad. Frente al despliegue escénico del jueves estas reflexiones puntuales de la Región de Valparaíso pueden replicarse a lo largo del territorio donde la inversión pública, incluso en lo básico, es escasa y de larga tramitación.

Y profundizando más llegamos al efecto del reiterado despliegue y gasto capitalino: una atracción fatal que muestra como destino ideal la gran ciudad, alimentando así su anormal y costoso crecimiento.