Proporcional
El diputado Giorgio Jackson, gracias a su gran votación, logró arrastrar a los nuevos diputados Winter y Castillo con votación de 1,2% y 1,02%, respectivamente. El diputado que encontraba injusto el sistema binominal, hoy debe encontrar muy justo el actual.
Gerardo Rueda Rodas
Voto asistido
El voto asistido introdujo importantes reformas para facilitar el voto a las personas, especialmente a aquellas con discapacidades sensoriales. Esta asistencia comienza en la mesa de votación, omitiendo el cómo llego hasta la mesa. Las autoridades promocionan el voto asistido, pero la única recomendación sobre la etapa previa es el derecho de contar con un acceso expedito para la persona con discapacidad y/o su asistente, lo que se traduce en pedir ayuda a fuerzas del orden público para que te acarreen a la respectiva mesa de votación.
Estas votaciones 2017 no fueron la excepción y volvimos a ver en muchos lugares las peligrosas maniobras de subir a personas en sillas de ruedas por largas escaleras. Conocemos y respetamos la disposición de nuestras Fuerzas Armadas, pero no corresponde que deban levantar en andas a personas y subirlas pisos arriba y abajo. Al publicarse esas imágenes nos llama la atención la reacción de periodistas y público, que, ajenos a los derechos y dignidad de las personas con discapacidad, celebran la "vocación de servicio", "solidaridad" o "cómo le ponen el hombro" para "ayudar" a cargar estas personas. Pocos ven a "la persona" y su derecho como chileno con discapacidad para llegar en forma autónoma hasta su lugar y mesa de votación. Estas situaciones evidencian, además, la tremenda la inaccesibilidad de nuestros colegios y la mirada asistencialista que predomina en el subconsciente de la sociedad, que felicita la ayuda o asistencia por sobre el derecho de espacios accesibles que den autonomía a las personas.
Si Servel y el Estado de Chile no son capaces de asegurar el cumplimiento del derecho a la autonomía e igualdad en el acceso al voto de las personas con discapacidad, implementando locales de votación plenamente accesibles, debe avalar el llamado de exigir que el voto baje, esto es, solicitar que representantes de la mesa bajen hasta donde se encuentra la persona, emita su voto, firme el libro y que alguien de su confianza acompañe hasta que su voto sea introducido en la urna.
En estas ocasiones se manifiesta si la repetida palabra inclusión es un término político o concreto, que quede claro, sin accesibilidad no se puede hablar de inclusión.
Pamela Prett Weber
Democracia y elecciones
Después de ver los resultados del proceso eleccionario, me pregunto si el nuevo sistema electoral es realmente democrático. En una democracia no es posible que un candidato con el 2,1% de preferencias salga elegido como senador, que es el caso de la Quinta Región, por arrastre y no sea elegido un candidato que bordeó el 10%.
¿De qué democracia nos hablan?
Sergio Feliú Aguilera
Voto electrónico
La carta de Victoria Novik sobre la falta de condiciones mínimas adecuadas del colegio Winterhill para cumplir funciones de local de votación, además de ser un problema urgente que se debe solucionar antes de la segunda vuelta, es sólo un reflejo de situaciones similares en otros establecimientos.
La falta de medidas que faciliten el acceso de personas con capacidad disminuida es sólo uno de los problemas. Todo el sistema electoral es inapropiado, con votos de tamaños difíciles de operar, cabinas rudimentarias, vocales inexpertos. En pleno siglo XXI todavía no implementamos el sistema electrónico de la web, disponible con la tecnología y recursos actuales. Se reduciría la abstención, se eliminaría los locales de votación y la designación de vocales, se facilitaría el procedimiento, se aceleraría el conocimiento de los resultados, se evitaría los trastornos del tránsito y las dificultades para acceso de los votantes.
Un desafío para las nuevas autoridades. Un mérito para quienes lo implementen. Ahora.
Dr. Eduardo Bastías Guzmán
Abstención
¡Bravo! El 53% del padrón electoral 2017 se abstuvo de participar, pero ¡Pucha! que es bueno para patalear. Alega por todo y todo lo resuelve "en su metro cuadrado", ante su propia audiencia, mas llegado el momento de, queda demostrado que es "PSYP". La tonta excusa: "Y pa' qué voy a ir a votar si tengo que seguir trabajando igual", como si algún candidato le haya dicho: "¡Vota por mí! y si salgo electo, ¡Dejarás de hacerlo!" ¡Bruto!, enfermo de bruto, del verbo bruto, a más no dar.
¿La alegría? En esta autodesprestigiada clase política nuestra. Se gobierna con lo que hay y punto. ¿Volver al voto obligatorio? ¿No+AFP? ¿Pensiones dignas? ¿No más esperas ni muertes en el sistema público de Salud? ¿Un nuevo Sename? ¿Mejorar la calidad de la educación? ¿Exigirle a los estudiantes cumplir con sus deberes u obligaciones, tanto para con sus familias como para con el Estado? ¿Viviendas sociales o guetos verticales con el mínimo de metraje cuadrado?
Jorge Saavedra Moena