Julio Pineda Peña, el hombre tras la verdad en Carabineros
CRISIS. El general está a cargo de indagar la eventual manipulación de pruebas en el caso "Huracán". Exautoridades recuerdan su paso como jefe de la V Zona.
Un general, un mayor y un capitán de Carabineros, además de un civil CPR (Contratado por Resolución), son los primeros damnificados que deja por ahora la indescrifrable controversia iniciada entre la institución policial, la Fiscalía y el Gobierno a raíz del caso "Huracán", donde se investiga la supuesta adulteración de pruebas para incriminar a ocho comuneros mapuches por la quema de camiones en La Araucanía.
Marcelo Teuber, hasta el año pasado jefe de la Unidad de Inteligencia en La Araucanía; Patricio Marín, jefe de inteligencia de la Prefectura de Cautín; Leonardo Osses, miembro de la misma unidad, y Alex Smith, creador de la aplicación "Antorcha", con la que supuestamente se habrían incrustado distintos mensajes en los teléfonos de los comuneros, fueron apartados de sus funciones por orden del general director, Bruno Villalobos.
La máxima autoridad de Carabineros resolvió darlos de baja -los oficiales serán pasados a retiro- tras conocer los primeros alcances del sumario administrativo ordenado por él. Se habrían detectado errores procedimentales y una falta de rigurosidad en los peritajes que se realizaron.
Dicha conclusión es a la que habría llegado el general Julio Pineda, el subdirector de Carabineros que fue designado para liderar la investigación interna. Con pasado en la Región de Valparaíso, como jefe de la V Zona durante tres años, el oficial tiene en sus manos la responsabilidad de esclarecer lo que realmente ocurrió, independiente de las consecuencias que podría traer a su propia institución.
Pineda, con 38 años en Carabineros, llegó a la región a fines de 2012, cuando las marchas estudiantiles que un año antes alcanzaban cifras récord de participación iban en descenso. En sus primeros meses, sin embargo, no se encontró con mayores obstáculos, salvo el 21 de mayo de 2013, donde hubo cerca de 130 detenidos.
Fue recién en abril del siguiente año cuando su capacidad de liderazgo fue puesta a prueba. El megaincendio que destruyó tres mil casas y le provocó la muerte a quince personas hizo que gran parte del personal de Carabineros estuviera destinado a labores de contención. Además, el general debió supervisar el peritaje en el que participaron quince efectivos del Laboratorio de Criminalística, el OS-9 y el OS-5, quienes concluyeron que el incendio fue provocado por la electrocución de dos aves.
Quien lo recuerda en dicha función es el gobernador de entonces, José Pedro Núñez. El exjefe provincial de Valparaíso comentó que "el general Pineda tuvo una oportuna reacción justamente en las emergencias como el megaincendio". En ese entonces Carabineros llegaba incluso antes que Bomberos. Él se hacía rápidamente presente en el terreno y nos facilitó todo su apoyo. Incluso, se preocupó de conseguir refuerzos desde Santiago. Me atrevería a decir que su acción oportuna y eficaz permitió que no lamentáramos pérdidas humanas en las tareas de evacuación y contención", dijo Núñez.
Su par de ese entonces en San Antonio, Mauricio Araneda, también destacó a Pineda como "una persona siempre dispuesta a solucionar los problemas con mucha cercanía". "Como gobernador me tocó trabajar con tres generales de zona, y él fue lejos el más cercano. Nos llamaba la atención que en muchas reuniones de coordinacón en San Antonio él se hacía presente", recordó el hoy consejero regional (core).
Tiempo después del megaincendio, el 21 de mayo de 2015, la institución fue duramente cuestionada por las heridas de gravedad que un carro lanza agua le ocasionó al estudiante Rodrigo Avilés, quien estaba marchando por Valparaíso.
Si bien el dispositivo de seguridad de ese día estuvo a cargo del general Ricardo Cartagena (a fin de año fue pasado a retiro), Pineda debió enfrentar todos los cuestionamientos por el actuar de Fuerzas Especiales, reconociendo días después -tras las imágenes que proporcionó TVN- que "realmente hubo responsabilidad de Carabineros".
La labor de la institución en la zona ya había sido puesta en entredicho una semana antes, cuando los jóvenes Exequiel Borvarán y Diego Guzmán fueron asesinados en medio de una marcha estudiantil.
Ese año, en diciembre, Carabineros nuevamente fue blanco de críticas tras los graves incidentes ocurridos en el plan de Valparaíso y en Playa Ancha, previo al partido entre Santiago Wanderers y Colo Colo. Sin embargo, para entonces Pineda ya había entregado su cargo como jefe de la V Zona al general (r) Jaime Barría.
Mucho antes de que asumiera en Valparaíso, Pineda tuvo un recordado paso como jefe de la recién inaugurada 49 Comisaría de Quilicura, en Santiago. Más tarde fue trasladado a la agregaduría de Carabineros en España, donde compartió con el exsenador por Valparaíso Sergio Romero (RN), en esa época embajador.
"Su labor como agregado policial en Madrid fue muy seria y profesional. Se destacó por su especial dedicación a tener la mejor relación con la Guardia Civil. Su misión fue muy bien calificada", dijo el exparlamentario.
Ahora, ocho más tarde, el general deberá esclarecer una de las mayores dudas que rondan en la ciudadanía: si efectivamente -o no- Carabineros manipuló pruebas para inculpar a un grupo de comuneros mapuches de La Araucanía.
"Su acción oportuna y eficaz permitió que no lamentáramos pérdidas humanas en las tareas de evacuación y contención"
José Pedro Núñez, Exgobernador de Valparaíso, sobre el rol del general Pineda en el megaincendio de abril de 2014"