"Me niego a asumir que la DC atraviesa una crisis terminal, pero hay que rectificar prácticas"
"Creo en una democracia de las instituciones donde los partidos son importantes", advierte el exdiputado y candidato a presidente del PDC, Fuad Chahin, al explicar por qué decidió competir. En esta lógica, agrega, "es fundamental que los liderazgos estén a disposición en los momentos difíciles".
A su juicio, la crisis de la DC se ha profundizado, pero cree que es un buen momento para hacer las rectificaciones y correcciones que requiere la tienda. "No estamos en el gobierno y no tenemos elecciones en los próximos dos años. Tenemos un momento histórico para dedicarnos a la DC y tomar definiciones programáticas que permitan modernizar sus propuestas, resintonizar con el Chile de hoy y ser capaz de cuidar y renovar sus liderazgos", agrega.
- ¿Por qué no se logró una lista común?
- Nunca para nosotros fue una definición que hubiera una lista de consenso. Nosotros no le tenemos miedo a la democracia y a la participación. Lo que queríamos es una lista que tuviese una amplitud, que garantizara una adecuada integración de las distintas visiones del partido, o sea, una mesa diversa, pero que tuviese cohesión. Cohesión en lo que hay que hacer, cohesión en la propuesta, cohesión en la tesis política y que, de alguna manera, fuera un acuerdo respecto del diagnóstico y de lo que hay que hacer en el partido desde distintas visiones. Eso fue lo que hicimos y nuestra lista es integradora y cohesionada. No es producto de la improvisación. A diferencia de la otra lista, la nuestra no se levantó horas antes de la inscripción como una suerte de reacción; el partido ya no puede resistir más improvisación. Justamente lo que queremos cambiar nosotros es aquello. Queremos ser un partido que toma decisiones planificadas de acuerdo a una estrategia.
- ¿Cuál es la principal diferencia entre Fuad Chahin y Humberto Burotto?
- No lo sé porque hace más de un mes y medio que sacamos una propuesta programática por escrito que da cuenta de lo que nosotros le planteamos al partido, y yo todavía no conozco una propuesta de la otra lista. La lista de Humberto -a quien conozco mucho y fue un dirigente de los 80 muy importante- es monocolor, representa una sola sensibilidad del partido y la nuestra representa mayor diversidad.
- La crítica de Burotto apuntaba a modificar la estructura de funcionamiento respecto a la conducción vertical que ha tenido la tienda por otra más horizontal sustentada en las bases...
- Yo no me voy a dedicar a criticar a otros ni hacer de esta gestión una gestión en contra de otros. Creo que en el partido nos necesitamos todos, necesitamos tener una buena coordinación con cada uno de los parlamentarios, con nuestros alcaldes y concejales, con nuestros profesionales y nuestros jóvenes, con nuestros dirigentes de los trabajadores y dirigentes sociales. Lo que me va a caracterizar es que la mesa va a tener una fuerza política que va a poder impulsar esa tarea, modernizar nuestro partido respecto a descentralizar más nuestras decisiones, con equipos desde el punto de vista electoral, de comunicación estratégica y de estudios que estén generando insumos para poder tomar mejores decisiones políticas. Creemos que eso es fundamental. Tener un equipo más dinámico, más profesional y más descentralizado. No sólo renovar el mensaje, renovar el partido, renovar los mensajeros, sino que renovar la manera con que nos comunicamos y que el partido vuelva a tener un partido ético y épico. Y épico porque la DC no está sólo para administrar el poder o administrar cuotas de poder. La DC tiene un sentido de trascendencia y eso tiene que ver con una propuesta que se haga cargo de una revolución de la dignidad de la persona y volver a tener al ser humano como principio, centro y fin de nuestro esfuerzo. La economía y el Estado tienen que estar al servicio de la persona y fortalecer la comunidad y tener un país que no le dé la espalda a las regiones. Es ahí donde la DC tiene que tener una propuesta. Hay que ir cambiando los paradigmas. La descentralización no tiene que ver sólo con la elección del gobernador regional, sino que tiene que ver también con el modelo de sociedad y el desarrollo de país que queremos. Necesitamos tener una propuesta vigente para hoy día y para los próximos 20 años de la DC.
- Es efectivo que en la DC se ha producido una división silenciosa. Al parecer los sectores más conservadores han decidido partir, algo que algunos han llamado "derecha democratacristiana". ¿Es así?
- Es evidente que ha habido renuncias de varios sectores. Hubo renuncias de personas que de alguna manera fueron más críticas desde el punto de vista de la pérdida de la identidad, de la pérdida de la convivencia, críticos con las políticas de alianza, pero hay otros que se fueron por motivos distintos. No considero que haya que hacer caricaturas de los democratacristianos. Eso es poco fraterno y poco realista. Andar colgándole carteles a los camaradas de que estos son los derechistas y estos los izquierdistas no contribuye al ánimo que queremos cambiar en el partido.
- Se habla de una división silenciosa...
- Hemos tenido diferencias, pero las diferencias tienen complejidades más difíciles de definir que las que se plantean de derecha e izquierda. Hay diferencias como siempre han existido y el problema es que hemos tenido una debilidad institucional para procesar esas diferencias, para tomar decisiones institucionales y para ser capaces de sostener aquellas por todos los militantes. Ese el problema que tenemos hoy a diferencia de otros momentos de nuestra historia. Aquí cada uno se siente con derecho a opinar, hacer y decir lo que se le antoje. Y eso es impune hoy en la DC. Por eso tenemos que tener procesos claros de toma de decisión participativa. Y una vez que se toma una decisión estar en condiciones de respaldarla.
- ¿Han entrado nuevos militantes?
- A la DC ha entrado el doble de la gente que se ha ido, es decir, por cada uno que se va, entraron dos y la mayoría jóvenes. Y eso da cuenta de un partido que todavía tiene futuro. Me niego a asumir que ésta es una crisis terminal, pero sí tenemos que rectificar nuestras prácticas internas y dejar de ver al enemigo al interior del partido.
- ¿Cómo se insertan en la oposición?
- Creo que hay que dejar de poner la carreta delante de los bueyes. Primero las definiciones programáticas, después la política de acuerdos y al final la política de alianzas. Algunos pretenden que la política de alianzas defina la política de la DC. A mí me parece que tiene que ser al revés. La política de alianzas debe ser una consecuencia de las definiciones políticas de la DC. Y en eso yo no voy a transar porque los errores nos han costado caros como partido; por eso, desde la oposición vamos a actuar con independencia buscando nuestra propia forma de hacer oposición. En diálogo con las otras fuerzas de oposición, pero también con el Gobierno. Seremos una oposición fiscalizadora pero también propositiva.
"El partido ya no puede resistir más improvisación. Justamente lo que queremos cambiar nosotros es aquello. Queremos ser un partido que toma decisiones planificadas de acuerdo a una estrategia" "La lista de Humberto (Burotto) -a quien conozco y quien fue un dirigente de los 80 muy importante- es monocolor, representa una sola sensibilidad del partido y la nuestra representa mayor diversidad""
"Hay que dejar de poner la carreta delante de los bueyes. Primero las definiciones programáticas, después la política de acuerdos y al final la política de alianzas""