Los doce niños y su entrenador que fueron rescatados desde el interior de una cueva en Tailandia, tras permanecer atrapados por más de dos semanas, hablaron ayer por primera vez con la prensa: "Estamos fuertes, gracias por ayudarnos", dijeron desde el hospital que el jueves les dará el alta médica.
"Soy Nick, estoy fuerte y quiero dar las gracias por preocuparse y ayudarnos. Ahora estamos a salvo", señaló uno de los integrantes del equipo de fútbol que salió de paseo tras un entrenamiento cuando se desencadenó la tormenta que inundó la salida de la cueva.
"Gracias por preocuparse e ir a la cueva a salvarme", agregó uno de sus compañeros. "Ahora estoy empezando a ser como antes", concluyó otro de los menores durante una conferencia en la pieza del hospital donde se encuentran internados. El ministro de Salud de Tailandia, Piyasakol Sakolsatayadorn, señaló que los trece niños recibirán el alta médica este jueves.
"Los 13 jabalíes salvajes (como son conocidos en el país asiático) están en buena condición física y con buen ánimo", sostuvo la autoridad.
El Gobierno ha recomendado a las familias mantener la intimidad de los menores -cuyas edades fluctúan entre los once y 16 años -, debido a que la sobrexposición podría "desencadenar síntomas de estrés traumático".
Pese a esto, la agencia de noticias Efe afirmó ayer que en Hollywood ya se preparan dos películas sobre el rescate que se extendió a lo largo de tres días.
En la misma línea, uno de los marinos tailandeses que participó en la operación, el almirante Arpakorn Yuukongkaew, dijo que cuando se enteró de la situación solo albergaba "una pequeña esperanza. Al final, esa pequeña esperanza se hizo realidad. Debo decir que lo hicieron muy bien, especialmente el entrenador. Por lo que sé, el entrenador era un monje (budista), así que conoce técnicas de meditación y las utilizó para calmar a los niños".