Francisco Meneses V.
Con un clima ideal para la práctica del running, una masiva presencia de participantes y la pulverización de los récords en los 42 kilómetros, se desarrolló la sexta edición de la Maratón Internacional de Viña del Mar. Desde las 8 de la mañana, fueron más de 11 mil corredores los que inundaron las calles de Reñaca de color naranja, en una prueba que aspira a lograr la categoría Bronce de la Federación Internacional de Atletismo y que fue transmitida a todo el país por señal abierta.
Nuevos récords
En lo deportivo, lo más significativo fueron los tiempos logrados por los ganadores en la prueba de los 42 kilómetros, los atletas de Kenia Nicholas Chelimo Kipkorir y Beatrice Toroitich.
Kipkorir, con su marca de 2 horas, 13 minutos y 48 segundos, batió el anterior registro del fondista nacional Leslie Encina. En tanto, su compatriota llegó a la meta con una marca de 2 horas, 35 minutos y 58 segundos.
"Me sentí bien en la carrera", dijo el keniano una vez terminada la carrera, destacando además que "fue muy agradable correr en al lado del mar, estuvo bien". Por su parte, Toroitich aseguró estar feliz por la victoria, valorando que "la gente es muy agradable y me estuvo apoyando mucho".
Los mejores chilenos en esta especialidad fueron Francisco Méndez y Giselle Álvarez, ambos llegando en el tercer lugar en sus respectivas competencias. "Correr con dos africanos es bastante complejo para un chileno que no tiene el tiempo suficiente para entrenar, pero igual estoy feliz con el resultado", señaló Méndez.
Por su parte Álvarez, oriunda de Puerto Montt, se mostró contenta y destacando que "siempre corro así con este clima, el circuito es muy duro y la marca es muy buena, porque no es para hacer marcas tan bajas".
Más vencedores
Mientras tanto en la categoría de 21 kilómetros, el ganador masculino fue Mauricio Flandez, cabo 1° de Carabineros, con un tiempo de 1 hora, 25 minutos y 29 segundos. "Jugué con un poco de estrategia, porque el cuerpo se recupera al tercer día y uno puede lograr una mejor capacidad para competir", explicó el ganador acerca de su entrenamiento.
En la prueba femenina, Margarita Masías se llevó el primer lugar con un registro de 1 hora, 19 minutos y 28 segundos. La deportista valoró el respaldo de las personas que se congregaron en el trayecto al estimar que "como soy del sur, una cree que acá no va a haber tanto apoyo, pero la gente está enterada que en el sur se corre fondo".
En la carrera de 10 kilómetros, el corredor de medio fondo Carlos Díaz se llevó el triunfo. "Es un circuito muy bueno, muy rápido, que a nosotros nos conviene mucho para batir nuestras marcas", aseveró el atleta que corrió representando al Ejército de Chile, en su calidad de monitor de atletismo.
Por su parte Stephanie Paradis, ganadora de los 21 kilómetros en 2017, se llevó la prueba de 10k femenina en esta oportunidad. "Es la primera vez que corro 10k acá en Viña y me gustó, se sintió más cortito", dijo la atleta mexicana que superó una lesión meses atrás.
Gran apoyo
La masiva presencia, tanto de corredores como de asistentes, fue elogiado por los participantes, en especial por la diputada Érika Olivera, histórica referente del fondismo nacional que participó en la prueba de 10 kilómetros. "Hoy (ayer) vine a pasarlo bien, estuvo muy lindo el recorrido, la gente es muy cariñosa, estuvo apoyando en la calle y eso se agradece, porque sabemos que esta es una fiesta deportiva que no es sólo para los que corremos", dijo la legisladora.
Respecto de la proyección de la prueba a nivel nacional y su aporte a la actividad física, Olivera planteó que "este evento ha ido en progresión y ha ido creciendo año a año".
El desafío aparte de Cristián Valenzuela
Uno de los momentos más significativos de la jornada fue la participación del atleta paralímpico Cristián Valenzuela, junto al periodista de TVN Gustavo Huerta, en la prueba de 10 kilómetros. Para Valenzuela, medallista de oro en Londres 2012, que Huerta aceptara el desafío de correr con los ojos vendados, "fue una linda forma de vivir lo que yo vivo, de mostrar la discapacidad visual, que es una de las más invisibles del mundo". En tanto, el comentarista destacó "la labor de los guías, porque es confiar en ellos nomás. Fue enriquecedora esta experiencia y tiene mucho que ver con la inclusión".