Aula segura
Mientras los padres no asuman su deber como los primeros educadores de sus hijos, donde se moldea al futuro ciudadano, formado en valores tales como el respeto hacia los demás, la tolerancia, la verdad, la justicia, la dignidad, etc., nos veremos enfrentados a situaciones como las que hoy estamos viviendo, con violencia, agresividad y odio desenfrenado.
La educación viene desde el hogar, que es el primer formador. La escuela tiene su rol no solo de entregar conocimientos, sino que secunda la labor de los padres. Si quieres criar adultos fuertes, deja de respirar por tus hijos, deja de hacerles la tarea, deja de comprarles todo lo que quieran, enséñales a cooperar en casa, suelta el miedo al trauma y ayúdalos a crecer.
Gladys Castro Reyes
Ciberdelincuencia
El reciente ataque informático al Banco Consorcio, entidad que reconoció públicamente haber sufrido la intervención de terceros en su sistema de transferencias internacionales, es una muestra más de que el fenómeno de la ciberdelincuencia llegó para quedarse en nuestra sociedad.
A nivel global, en tanto, cifras y datos revelan, por ejemplo, que el delito cibernético resulta más redituable que el narcotráfico; que, diariamente, un millón y medio de personas en el planeta son víctimas de ataques informáticos, y que uno de los delitos que más creció en el último tiempo fue el ransomware.
Frente a ello no sólo es esencial que a nivel de país y de las organizaciones en general se adopten políticas serias y decisivas para terminar con dicho flagelo, sino que, además, hay que inculcar en toda la población hábitos tendientes a proteger su información sensible y a prevenir que sean víctimas de ese tipo de malas acciones.
Para ello es fundamental contar con profesionales de excelencia, amplios conocimientos y comprobada experiencia en el campo de la seguridad informática, que sean prolijamente seleccionados, para así asesorar a las autoridades, empresarios y altos ejecutivos, sobre las estrategias y tácticas a adoptar y las tecnologías a implementar en dicha materia.
Héctor Flores
Pensiones y vejez
Estoy preocupado, Chile está envejeciendo y las pensiones son bajas. Actualmente existen 2 millones 800 mil pensionados y de ellos más de la mitad recibe $ 107.304. Entonces, ¿quién nos garantiza una jubilación digna?
Esta semana se dieron a conocer las especificaciones de la nueva reforma a las pensiones, una iniciativa que, a diferencia de las modificaciones de la administración de Bachelet, se enfoca en los grupos más vulnerables, en las mujeres, en la clase media, y en quienes -de manera voluntaria- quieran extender su vida laboral después de la edad de jubilación. Un proyecto que premia a todas las personas que han cotizado durante toda su vida y, de igual forma, reciben jubilaciones ínfimas.
Y si bien estos beneficios no harán magia con nuestros fondos, sin duda ayudarán a mejorar la calidad de vida y la vulnerabilidad de cientos de adultos mayores y sus familias.
Jaime Garrido
Profesores
Los problemas en educación no pasan necesariamente por un sólo elemento, sino varios que se van entrelazando en el proceso de aprendizaje. Debemos tener en cuenta que no tan solo son los profesores los que hacemos la labor en el aula, sino también los directivos y sobre todo los padres en sus hogares.
Lamentablemente muchos apoderados ven a los establecimientos educacionales como "guarderías", más que centros de aprendizaje, delegando su función guiadora a profesores, muchas veces mal pagados y en condiciones lamentables. Quizás es el momento de escuchar a docentes y no tanto a los tecnócratas, que poco saben de la sala de clases.
Federico Urra
Valparaíso
No hay una receta. Una ciudad que cayó a límites increíbles de pobreza y de descrédito a lo largo de los últimos 80 años no le es fácil remontar a esa penuria. De ser un puerto principal, de tener un comercio boyante, de poseer numerosas industrias, de aglutinar capacidades innatas de sus habitantes, de ser propulsores de casi todas las iniciativas y actividades del país, llegamos a un nivel espantoso.
¿Culpables? Los propios porteños. Primeros nos mudamos a Viña del Mar para luego peregrinar a Santiago, donde mucho tiene que ver la descendencia de aquellos que hicieron grande a Valparaíso.
¿A qué podemos aspirar? No se ven muchas alternativas pero a lo menos se visualizan tres a las que el Gobierno y los porteños deberían darle impulso: Puerto, Turísmo y Universidad.
Por el momento no se ven más, así que todos juntos apoyemos las manifestaciones e iniciativas.
Renzo Follegati Ghio