"Yo creo que están soñando demasiado. Están hablando de construir un hotel y eso es imposible"
Virginia Reginato
Alcaldesa de Viña del Mar, por proyectos en el paño de la sucesión Vergara
"Estamos muy comprometidos en sacar adelante este terminal"
Gonzalo Davagnino
Gerente general de EPV, por T2
El cónsul de Chile en Liverpool, Inglaterra, dio cuenta de que ascendió a más de 70 pesos el producto líquido de sacas de lanas enviadas por nuestro gobierno en el vapor "Panamá". Estas son producidas de las razas de carneros Rambouillet, Negretti y Lincoln que existen en la Quinta Normal de Agricultura, en Santiago.
Un león del Circo Cubano que está en Limache, aprovechando un descuido de los vigilantes a la hora de su alimentación, huyó de la jaula llegando hasta la estación de ferrocarriles de esta ciudad. Los pasajeros que aguardaban el servicio huyeron en distintas direcciones ante el felino, que luego fue recuperado sin causar víctimas.
CENTRO ESPACIAL, Houston, 15 (AP).-Los astronautas del Apolo 9 iniciaron hoy largas y tediosas sesiones de informes del vuelo de 10 días que dejó a Estados Unidos a un paso de llegar a la Luna. "Les digo que no hay nada como nuestro hogar", dijo el jefe de la Apolo 9, James Mc Divitt, al público que llegó a recibirlos en Houston.
La promesa es que el mejoramiento del tan criticado sistema de transporte público de la capital será replicado en regiones, entre ellas Valparaíso. Así, el modelo RED, que en la capital reemplazará al Transantiago, alcanzará en forma gradual a todo el país. Saludable intención.
En cuanto a Valparaíso, el subsecretario de Transportes, José Luis Domínguez, informó que una de las primeras mejoras será la incorporación de buses "más amigables con el medio ambiente", los Euro IV, eléctricos, que ya corren por algunas calles de Santiago. Estas máquinas ofrecen varias comodidades para los usuarios como aire acondicionado, wifi y conexiones USB.
Pero más allá de adornos digitales, destaca un aspecto señalado por Domínguez: nuevas integraciones de los diversos tipos de transporte que definen la identidad de la zona, aludiendo a nuevos recorridos de buses con Metro Valparaíso, troles o ascensores, de manera acotada a través de un sistema de pago único con tarjeta.
Propósito importante es el plan "Renueva tu micro", que mediante incentivo estatal permitiría a los empresarios reponer sus máquinas incorporando unidades con estándares fijados para RED.
Pero junto a estos buenos propósitos se debe recordar que existe una gran tarea pendiente desde 2012 en el transporte público del Gran Valparaíso, la licitación del sistema. La licitación busca, justamente, mejorar el actual servicio que está en deuda con los usuarios.
Paralelamente, es necesario aclarar cómo convivirán los actuales operadores con los que eventualmente se hagan cargo de los nuevos buses, pertinente duda que plantea el consejero regional Manuel Millones. Confusión y desorden ahogarían las buenas intenciones afectando a los usuarios.
También el modelo de mejoramiento del servicio debe asumir la condición territorial del Gran Valparaíso que exige la atención de puntos lejanos y una topografía por lo general complicada, muy diferente a la que presenta la capital.
Y la renovación de la flota y la incorporación de nuevos operadores deben resolver de partida aspectos críticos presentes hoy, como la frecuencia de los buses y el incumplimiento de horarios y recorridos. Hay que insistir además en la calidad de los terminales y en un efectivo avance en el uso de tarjetas como medio de pago, evitando así el manejo de dinero a los conductores. En cuanto a información oportuna para el público y fiscalización, es fundamental la tecnología monitoreando cumplimiento de recorridos y frecuencias y permitiendo a la autoridad de Transportes sancionar irregularidades. Finalmente, el mejoramiento no puede dejar de lado el tema tarifario, punto que debe ajustarse a la realidad del bolsillo de los usuarios.
Partamos de consideraciones obvias y ampliamente consensuadas: todas queremos igualdad, dejar de ser objetos sexuales, respeto por nuestras libertades y autonomía económica. Eso implica cambios concretos y ya: que no nos cobren más en la AFP, no necesitar de la firma de nuestros cónyuges para vender alguna propiedad, que a la madre que ha criado sola a sus hijos no se le imponga la absurda autorización del desaparecido padre biológico, etc., etc.
Falta mucho, lo tenemos claro. Y sin embargo, pareciera, a la luz del reciente rechazo de dos diputadas de la cajita de chocolates del colega, que estamos frente a un cambio mucho, pero muchísimo más complejo.
Los gestos están profundamente arraigados en una sociedad: regalar flores, modos de saludar, inclinaciones de cabeza. Los gestos salen en nuestra ayuda en situaciones sociales en las que no sabemos qué hacer: un funeral, un encuentro casual, una despedida. Frases hechas que calzan y que todos entendemos.
Las diputadas rechazaron el gesto de regalar chocolates aduciendo que "este día no es una celebración". Se entiende perfectamente que las mujeres necesitamos algo más o algo radicalmente distinto a un chocolatito. Pero sigo pensando en lo que hay en juego en este hecho, en este gesto.
La lucha de las feministas pasa por una revisión total y radical que incluye también a los gestos que son parte de un entramado cultural. ¿Es ofensivo regalarle chocolates a una mujer en su día? ¿Por qué podría serlo? Busco ayuda en David Le Bretón, quien en su estudio "La sociología del cuerpo" afirma de estos: "Codificados para obtener una eficacia práctica o simbólica, se trata de modalidades de acción, de secuencias de gestos, de sincronías musculares que se suceden para obtener una finalidad precisa".
¿Cuál sería la finalidad precisa de regalar chocolates? ¿Cuál es la eficacia práctica o simbólica implícita en el gesto de un hombre que le regala chocolates a una mujer? Tanteo algunas posibilidades: seducir, galantear, una mera muestra de afecto, sometimiento. La verdad es que es complejo, se me hace compleja la revisión radical y constante de una serie de gestos de nuestro entramado cultural.
La cantante Camila Gallardo señalaba, a raíz del repudiable intento de un alcalde de besarla en la boca, que son tiempos difíciles para las mujeres. Yo diría que no son fáciles para nadie. Son tiempos difíciles si debemos acudir a "listas" sobre qué hacer o no hacer.
¿Qué gestos perduraran finalmente? ¿Cuáles quedarán en el olvido? No lo sé, pero creo que, al borde de los 50 y confusa con algunos cambios, yo personalmente me habría quedado con los chocolatitos.
Mary Mac-Millan
Profesora Facultad de Artes Liberales, UAI