Informe I
La ONU confirma muertes, torturas y violencia sexual en Chile, pero le faltó consignar desobediencia civil, incendios, saqueos, delincuencia a rostro cubierto, marchas sociales sin responsabilidad de organizadores e incitación a la violencia partidista, todas acciones que también son una violación a los derechos humanos. Se debiera exigir a la ONU que haga un trabajo completo y no se refiera solamente a DD.HH. vulnerados a quienes "pacíficamente" se manifiestan día a día en el país.
Leopoldo Vásquez Morales
Informe II
El informe de la Oficina del Alto Comisionado para los Derechos Humanos (ACNUDH) sobre Chile debe ser analizado con justica, altura de miras y objetividad, alejando posiciones políticas y aunando criterios frente a lo ocurrido. Por eso, es de vital importancia que la Justicia, en cuyas manos está la indagación de estos hechos, sea rigurosa en la investigación y arroje resultados concretos, tanto para corroborar denuncias como también para desmentir aquellas sin fundamento.
Bajo mi punto de vista, hay casos donde sin duda se produjeron abusos, pero también hay otros en los cuales se está criminalizando una legítima represión del Estado ante hechos vandálicos que deben ser enfrentados con la fuerza y herramientas que otorga nuestra legislación vigente.
El orden público debe primar para que en una sociedad se respeten los derechos de todos. Mirar con un sólo lente lo que ha pasado en Chile es caer en una acción irresponsable y dañina para la convivencia nacional.
Aquí se deben condenar todos los hechos de violencia, provengan de donde provengan.
Eduardo Gutiérrez
Consulta ciudadana
La consulta ciudadana, como ejercicio participativo, es un acierto, pero el plebiscito de abril será la verdadera voz de Chile frente a la disyuntiva constitucional.
Fernando Jofré L.
Reelección
Uno de los reclamos que surgieron tras el estallido social fue el abuso que se ha venido haciendo de los cargos públicos gracias a una reelección ilimitada. Existe pleno consenso en la ciudadanía que no es correcto ni le hace bien a la democracia que las autoridades se eternicen en sus puestos. No se ve bien. Habla mal de los partidos y de la política en general el que no haya renovación cada cierto tiempo.
Estábamos todos bastante contentos con los anuncios que no se podría mantener esta reelección y que serían considerados los periodos anteriores a esta fecha, para el cálculo de las repeticiones en el cargo. En el fragor de las manifestaciones, todos estuvieron de acuerdo. Pero ahora que el ambiente está más calmo, algunos políticos han comenzado a distorsionar el concepto, arguyendo que la ley no puede ser retroactiva. Es decir, que las limitaciones a la reelección sólo podrían aplicar de hoy en adelante.
De esta forma, si alguien ha sido alcalde cuatro veces, por ejemplo, podría ser alcalde dos veces más a partir de ahora (o sea, seis veces en total), que es justamente el escenario que la ciudadanía repudia. Nos damos cuenta, entonces, que esos políticos no han entendido lo que ha ocurrido en Chile y vuelven a recurrir a artimañas, letras chicas y argucias leguleyas para torcerle la mano al deseo popular. Los ciudadanos tenemos que estar atentos para decirle no a estos mañosos y, por supuesto, castigarlos en las próximas elecciones.
Daniel Green
La Moneda
Tras una semana intensa en la arena política, en que se temió inclusive lo peor, La Moneda sigue de pie. Algunos intentaron, mediante afirmaciones vagas, infundadas, malintencionadas, utilizando juicios aún inconclusos, dar la estocada final.
Tomar como punta de lanza las violaciones de DD.HH. cometidas por agentes del Estado -que de paso, hay que reiterar que deben ser investigadas y sancionadas con firmeza a sus responsables- para endosar aquello al jefe de Estado, sea por acción u omisión, es una afirmación gravísima e irresponsable.
Urge recordar una cuestión que parece ser solapada en los tiempos que corren. El actual gobierno fue electo con más de 3 millones de votos, un 54% del electorado. Intentar una acusación constitucional con afán de generar un vacío de poder ante un gobierno electo democráticamente, no es ser un defensor de la democracia, es poner en la mesa mi agenda y utilizar todos los mecanismos posibles para golpear el tablero y girarlo a mi conveniencia, sea como sea.
Jose Luis Trevia Fundación para el Progreso
Líderes
Después de la penosa exhibición de la Sra. Pamela Jiles en el Congreso protestando contra la ley de encapuchados y otras intervenciones del Sr. Florcita Motuda, creo que perdí la fe en la modernización del Estado, y creo que vamos exactamente en la dirección contraria. Para mejorar Chile se requiere de un trabajo duro y de líderes serios. Lamentablemente, hoy escasean ambos.
Sergio Sánchez R.