Prieto dice que la espera por jugar se les ha hecho larga
fútbol. El defensor uruguayo reconoce que hay ansiedad al interior del plantel de cara al duelo con la "U".
Han pasado algo más de dos meses desde que Santiago Wanderers jugó su último partido por los tres puntos. Dicho duelo fue ante Unión La Calera en el estadio Elías Figueroa, en Playa Ancha (14 de noviembre), y que terminó con un triunfo 2 a 0 a favor del Decano, lo que le permitió mantenerse en Primera. De ahí en adelante la exigente pretemporada y la larga espera tiene ansiosos a los integrantes del plantel.
Así lo reconoce uno de los pilares del repunte de Wanderers en la última parte de 2012 y que de hecho anotó uno de los goles en el último partido en Playa Ancha, el defensor uruguayo Mauricio Prieto.
"Se nos hizo un poco larga la espera porque empezamos a entrenar el 12 de diciembre, la verdad es que tenemos muchas ganas de empezar el torneo", es lo primero que sostuvo el defensor charrúa.
Y esa larga espera tiene su final este sábado ante un rival de peso como la Universidad de Chile. Por eso el zaguero expresó que "la verdad es que estamos ilusionados con el arranque del campeonato, sobretodo porque vamos a jugar con la Universidad de Chile, lo cual da una motivación extra".
Los azules siendo el equipo sensación de las dos últimas temporadas en el fútbol nacional bajo el mando del ahora DT de la "Roja", Jorge Sampaoli, ahora viven una etapa de transición con el argentino Darío Franco en la banca.
Pero eso no es algo que pueda disminuir el nivel futbolístico de los azules según lo entiende Mauricio Prieto. "Han venido muchos jugadores a la Universidad de Chile, jugadores muy importantes así como también se han ido otros, pero es un equipo grande y que si bien se ha ido el entrenador ya se conocen de memoria".
De cara al comienzo de la temporada 2013, el exjugador de River Plate de Montevideo argumentó que el hecho de haber mantenido la base del plantel de 2012 será fundamental. "Es importante ya empezar con una base, años anteriores venían muchos jugadores y no se conocían y el adaptarse les costaba tiempo", dijo.