El ministro de Hacienda, Felipe Larraín, salió a defender ayer las medidas anunciadas el miércoles por la Superintendencia de Pensiones para atenuar el impacto en el mercado del alza de los traspasos de los fondos de AFP que se ha producido en el último tiempo, y descartó que estas acciones coarten la libertad que tienen los afiliados. "No limita la libertad, sino entrega información", indicó.
Larraín explicó que cuando una persona se va a cambiar de fondo debe saber lo que va a ocurrir con su cambio, ya que el usuario debe reconocer "si está detrás de una quimera o detrás de una realidad".
"Que el cambio sea entre las personas que notifican en un mismo día parece razonable y no sea un sistema como el FIFO, en el que primero anuncia es el primero que sale, porque dentro del día pueden ocurrir cambios importantes", agregó.
También valoró la modificación que busca darle más liquidez al Fondo E. "Los tres (puntos adoptados por la Superintendencia) van en la dirección sin limitar las libertades de las personas", sentenció.
El miércoles, la superintendenta de Pensiones, Solange Berstein, informó de la implementación de tres medidas "dentro del marco legal vigente" para evitar inconvenientes con el traspaso masivo de cotizantes entre multifondos del sistema de pensiones, las que no incluyen una restricción a la cantidad de cambios en un período determinado y/o el cobro por la realización de los mismos, como se había especulado con anterioridad.
El diputado DC Gabriel Silber dijo que solicitará, junto a la bancada de su colectividad, que la Contraloría fiscalice a la Superintendencia de Pensiones tras los anuncios para amortiguar los efectos del masivo cambio de cotizantes entre multifondos de las AFP. Señaló que las regulaciones anunciadas "exceden" el ámbito de la competencia de la entidad.