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"BDAT" se suma a las críticas de la familia Camiroaga

TV. El equipo cuestionó que se ventile su vida íntima en libros y en la televisión.
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Con un video en el que personas del círculo más íntimo de Felipe Camiroaga compartieron sus experiencias junto a él partió el homenaje que "Buenos días a todos" (TVN) realizó ayer a las 21 víctimas de la Tragedia de Juan Fernández, de la cuales cinco eran parte del programa.

"Es el recuerdo de sus amigos, esos verdaderos amigos que han sido discretos con su vida privada y lo recuerdan con amor y alegría", dijo Julián Elfenbein, quien apoyó las palabras que la familia Camiroaga publicó en una carta enviada a "El Mercurio", criticando que se ventile la vida íntima del "Halcón de Chicureo" y el oportunismo de las biografías.

Al respecto, agregó que "en la familia están orgullosos de los recuerdos que se puedan hacer de Felipe, de sus momentos televisivos, pero cuando eso se distorsiona y se lleva a otro plano, es ahí cuando saltan los buitres", refiriéndose especialmente a lo que ha sucedido últimamente con las "viudas" que han salido hablando en programas de televisión, como Kenita Larraín.

"No tengo idea si esas historias son verdad o no. Lo que yo sé es que había una mujer (Fernanda Hansen) que se sentó al lado de la familia, que Felipe adoraba y que en los momentos finales estuvo con él", dijo Elfenbein. No fue el único en mostrar su malestar en pantalla, ya que también se hizo presente en el periodista José Antonio Neme y Juan Carlos "Tata" Díaz, productor del espacio, que se encuentra recuperándose de un transplante.

Egon Wolff gana Premio de las Artes de la Representación

Teatro. El dramaturgo es autor de una veitena de obras, lo que le hicieron merecedor del reconocimiento anunciado ayer por la ministra de Educación.
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Títulos como "Flores de Papel", "Háblame de Laura", "Cicatrices", "Tras una puerta cerrada" y "Los invasores" han salido de la pluma de Egon Wolff, considerado el dramaturgo más social de la "Generación del "50". Fue precisamente su dedicación al teatro que lo hizo merecedor del Premio Nacional de las Artes de la Representación 2013, según anunció ayer en la tarde la ministra de Educación, Carolina Schmidt, sucediendo a su colega Juan Radrigán.

La secretaria de Estado destacó que la elección del ingeniero químico de profesión se debió a que el jurado consideró "el aporte de su obra a la dramaturgia nacional y su repercusión en el ámbito internacional, en la cual se rescatan los problemas del ser contemporáneo".

Su par de Cultura, Roberto Ampuero, en tanto, dijo que "felicitamos a este gran maestro del teatro nacional, que ha dedicado su enorme talento e importantes años de su vida a la formación de generaciones de actores, no sólo desde la dramaturgia misma, sino en torno al ser humano y sus complejidades. Gran ser humano y dramaturgo convencido de que el buen teatro se hace a partir de un buen texto, hoy tenemos el honor de rendirle el más grande homenaje que el país le puede ofrecer".

Amor por el teatro

Aunque Egon Wolff nació en Santiago, fue en Quilpué donde se acercó al teatro. En esa ciudad se radicó por la tuberculosis que sufrió mientras hacía un estudio de algas marinas chilenas para su profesión, y conoció al actor Eugenio Guzmán, quien en los "40 protagonizaba la obra de Arthur Miller "La muerte de un vendedor".

Sin embargo, su carrera de dramaturgo comenzaría a tomar forma en los "50 cuando se unió al Teatro Experimental de la Universidad de Chile y al Teatro del Ensayo de la Universidad Católica, donde desarrolló un estilo muy original, con giros argumentales y donde usó una constante en varias obras: repetir la escena al inicio y final, lo que daba un sentido especial a los textos.

Su debut fue en 1957 con "Mansión de lechuzas", y le siguió una prolífera carrera donde destacó por montajes que abordan temas sociales, de política contingente y con componentes existencialistas, que dicen relación con la época que le tocó vivir, aunque luego cambió el tono. Tras el estreno de "Encrucijada" en 2000, se recluyó en su casa de Calera de Tango para dedicarse a la pintura.

El premio obtenido por Egon Wolff consiste en un monto de $18.125.000 y una pensión vitalicia de 20 UTM, aproximadamente $800 mil mensuales. El galardón fue recibido por el propio escritor teatral, quien junto con agradecerlo, criticó la falta de meditación y reflexión en los jóvenes dramaturgos.