Con señalización Braille estudiantes de la PUCV ayudaron a que no videntes se acerquen más a la naturaleza en Mantagua
Integración. La Escuela de Educación Física logró que varias personas conocieran distintas especies arbóreas nativas de la zona.
Tener contacto sensorial con especies arbóreas nativas de Chile, como por ejemplo la araucaria y el laurel, por parte de personas no videntes, junto con poder conocer el nombre de cada una de ellas ahora es posible gracias a un proyecto liderado por la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso (PUCV), a través de su Escuela de Educación Física, y que permitió implementar señalizaciones Braille en la "Posada del Parque" de Mantagua.
En la actividad de presentación de estas plantillas participaron alumnos del Instituto Antonio Vicente Mosquete de Viña del Mar, el cual está integrado por personas no videntes, y del Colegio Los Robles de Villa Alemana. Además, los jóvenes tuvieron la oportunidad de adentrarse en la naturaleza, realizar ejercicios y conocer más de ella a través de un recorrido entre humedales y el mar, algo que fue apoyado por estudiantes de la PUCV.
Educación física
Esta actividad se enmarca en la permanente preocupación que muestra la Escuela de Educación Física por realizar actividades de extensión que sean significativas para la comunidad y con un marcado acento en la integración.
Así lo aclara el académico Jorge Gálvez, quien agrega que la PUCV se involucra a través de distintos frentes, como por ejemplo la organización de actividades educativas de encuentro e integración. Asimismo, señala que se logra avanzar en esta materia, "evaluando cómo varían el autoconcepto físico en estos niños, sus habilidades motoras y sus capacidades de autonomía, entre otras".
APOYO DEL APRENDIZAJE
El director de la Escuela de Educación Física de la Católica de Valparaíso, Luis Espinoza, junto con destacar la asociatividad que se ha generado con esta actividad, señaló que también involucra un concepto de responsabilidad social, ya que les abre la oportunidad para desarrollar encuentros con niños a los que se les hace más difícil el aprendizaje.
"Hemos levantado una investigación que intenta disminuir las barreras que afectan a los jóvenes utilizando una variable psicológica, que es el autoconcepto físico", añadió.
Por su parte, María Ester Mejías, directora del Instituto Antonio Vicente Mosquete, manifestó que "la inclusión de los jóvenes en la naturaleza es muy importante, ya que este contacto les da una formación distinta. La idea, ahora, es que puedan venir con sus familias".