Dormido
Profundamente dormido fue sorprendido el diputado comunista Hugo Gutiérrez. Vergonzoso. Qué fácil se ganan la plata los honorables, por eso la política está tan desprestigiada. Me irrita, son 12 millones de pesos mensuales por ir a dormir al Congreso. Esto no tiene nombre.
¿A lo mejor le afectó el cambio de hora? Y eso que el sueldo se lo hacemos todos los chilenos.
Es por eso que el domingo 17 de noviembre debemos pensar bien en la pega legislativa que hacen los honorables.
Américo Ahumada Martínez
Largo sueño
Acabo de despertar después de un largo letargo. Pido perdón por haberme dormido durante varias décadas y solo ahora, a raíz de los sucesivos, abundantes y variados programas de TV, como asimismo cartas y entrevistas publicadas en diversos medios, he comprendido que lo que yo creí haber vivido hace más de cuarenta años, era felizmente solo un mal sueño, una pesadilla.
En consecuencia, no fue efectivo el fracaso de la llamada revolución en libertad llevada a cabo por Eduardo Frei Montalva, por quien yo voté; como tampoco lo fue que durante su gobierno se gestó el nacimiento de los grupos subversivos que buscaban la destrucción del estado burgués, respaldado por el acuerdo del Congreso del Partido Socialista en Chillán, en 1967.
También creí haber soñado que el famoso Estatuto de Garantías que permitió al Congreso chileno elegir a Salvador Allende como Presidente de la República fue solo una medida táctica para llegar al poder, que luego echaría por tierra.
Ahora estoy claro, los militares despertamos un día y dijimos ya: ¡Tomémonos el poder! Y luego salimos a matar a diestra y siniestra a la población indefensa. No existían grupos armados ni mucho menos cubanos ¿Por dónde? ¡Si no tenían armas! Todo ello fue un embuste para justificar nuestra deplorable actuación.
Fernando Hormazábal Díaz General de Brigada (r)
40 años
Después de escuchar a tantos personajes (muchos de los cuales no habían nacido) opinar sobre acontecimientos de hace 40 años, solo falta solicitar al Vaticano que inicie la causa de canonización de Allende. Las violaciones a los derechos humanos son reprobables, como también lo es llevar a un país al borde de la guerra civil, baste ver lo que ocurre en Siria.
Hay que tener presente que quien promueve la violencia es tanto o más culpable que quien la practica, no basta con lavarse las manos.
Mario Soto Real
Conmemoración
Me parece bien que se conmemore el 11 de septiembre, pero no debería ser de forma violenta. Ojalá en el futuro se llegue a hacer un homenaje pacífico.
Hugo Botto Hormaechea
Eduardo "Hualo" Herrera
Felicitaciones a Gino Henríquez por la nota a Eduardo "Hualo" Herrera sobre lo que vivió el 11 de septiembre de 1973. Muy interesante. Sería bueno hacer más reportajes de este tipo, por ejemplo, sobre cuándo se volvió a jugar el campeonato, sobre familiares de jugadores desaparecidos, etc.
Gonzalo Serrano
Ingenuidad
En la zona sur del país, un marido le encaró una infidelidad a su esposa y para "reparar el daño moral" le exigió $ 24.000.000, en 24 cheques de $ 1.000.000. Ella, inocentemente aceptó girar los cheques para evitar la vergüenza de un divorcio culposo y tener que pagar esa misma cifra, pero ordenada por algún tribunal, en castigo por haber sido infiel.
La ingenuidad de la mujer partió por el hecho que él no tenía cómo acreditar el adulterio, además le creyó a ciegas en todo lo que le decía, sin informarse que definitivamente no corresponde solicitar ni conceder reparación de un aparente daño moral provocado por infidelidades.
El adulterio no es un hecho ilícito civil dado que los delitos se caracterizan por el dolo y los cuasidelitos por la culpa, y no resulta en absoluto razonable pensar que el adulterio se haya cometido con el propósito único y deliberado de causar daño. El adulterio no puede encuadrarse bajo los parámetros de la responsabilidad civil extracontractual.
El marido alcanzó a cobrar 5 cheques y los restantes tenían orden de no pago. La demandó, pero ella ganó el juicio. Al final, pagó 5 millones, por ingenua, no por infiel.
Ricardo Viteri Prado Director Separadosdechile.cl