Violentos disturbios durante Halloween en Isla de Pascua
policial. Jóvenes apedrearon un carro policial y lanzaron bombas molotov.
Serios enfrentamientos con Carabineros protagonizó un grupo de jóvenes en pleno centro de Hanga Roa, en Isla de Pascua, durante las celebraciones de Halloween. Disfrazados con atuendos propios de la popular fiesta, intentaron cortar la energía eléctrica, atacaron con bombas molotov a personal de la Sexta Comisaría del territorio insular y provocaron daños a un local comercial y a unidades móviles de la policía uniformada.
Los inéditos incidentes se desencadenaron cerca de las 2 de la madrugada, cuando unos 20 muchachos, todos disfrazados, causaron destrozos a una caja de distribución eléctrica con la finalidad de cortar el suministro del sector central.
serios inconvenientes
Según explicó el jefe de la Sexta Comisaría de Carabineros de Isla de Pascua, mayor Andrés Arenas, de haberse concretado este hecho habría ocasionado serios inconvenientes por un corte generalizado de energía eléctrica, poniendo en riesgo además la salud de numerosas personas que deben dializarse producto de enfermedades crónicas.
Personal de servicio de la policía se constituyó en la intersección de las calle Tepito o Te Henua con Avareipua, siendo interceptados por los antisociales, quienes lanzaron piedras a los vehículos de Carabineros para luego darse a la fuga en dirección al centro.
inusual violencia
Posteriormente, un grupo de 40 jóvenes se congregó frente a la Gobernación Provincial, donde levantaron barricadas. Al constituirse personal policial lanzaron bombas molotov a los vehículos, mientras el resto y provistos de palos, utilizaron tarros de spray como lanzallamas para dañar locales comerciales, uno de los cuales quedó con sus vitrinas destruidas.
El jefe policial debió utilizar una escopeta antimotines para disolver a los exaltados, sin que registraran detenidos.
"Al ver a Carabineros inmediatamente comenzaron a lanzar objetos incendiarios tipo molotov, por lo que se utilizaron técnicas institucionales para poder disolverlos. El grado de violencia que mostraron es bastante llamativo, ya que no hay ningún otro motivo que llamar la atención por medio de la violencia. Por eso el llamado es a los padres de estos jóvenes, que no tienen más de 16 o 18 años. Incluso hubo riesgo que se quemaran por la manipulación de objetos incendiarios", precisó el oficial.