Lo ha dicho Ivo Basay varias veces: cuando Wanderers tiene la posibilidad de pelear algo importante, no responde. El ejemplo más cercano son los últimos dos partidos del torneo, donde la opción de entrar al grupo que jugará la liguilla estaba al alcance de la mano y se terminó perdiendo sin apelación con Unión Española y Rangers. Para explicar esto rondan varias teorías, unas más certeras que otras, y desde el plantel es Moisés Villarroel quien lanza una hipótesis. "Dentro de la cancha somos un equipo muy callado, tímido", señala el volante forestalino.
El jugador concuerda con el DT cuando dice que "el equipo tiene jerarquía, pero no la saca a relucir cuando debe". Según su opinión, puede deberse a la falta de referentes o líderes dentro de la cancha al momento de saber manejar los partidos.
"O sea, no es que falte un líder, sino que cada uno tiene que ser capaz de asumir ese rol en las diferentes posiciones. Puede ser Jorge (Ormeño) al medio, Ezequiel (Luna) o Mauricio (Prieto) en la defensa, o (Mauricio) Viana desde el arco. Tampoco importa si es uno grande o uno chico, sea quien sea, si asume el papel cuando se necesita, será bienvenido", explica.
un equipo tímido
Villarroel insiste en que "esto no es falta de actitud, no se trata de correr más o trancar con la cabeza ni nada por el estilo; es jerarquía y experiencia. Hay que transmitir eso dentro del campo de juego, hablar un poco más, ordenar el esquema cuando las cosas no están resultando. Por ahí va el tema, somos un equipo demasiado callado y debemos trabajar eso lo antes posible. Si no lo mejoramos, vamos a seguir viviendo lo mismo".
Según cuenta, esta falencia es asumida por el plantel: "todos nos damos cuenta que somos un equipo callado y en eso no tiene que ver la actitud, porque cuando hay que meter y correr, lo hemos hecho".
Para graficar sus palabras, recuerda el triunfo por 3-2 sobre Ñublense en Chillán. "En el segundo tiempo se nos fueron encima... yo no estaba, pero me imagino que alguien del plantel habló fuerte porque se pararon bien y solucionaron el tema. Y así debe ser. A veces los equipos grandes sacan las cosas adelante solo hablando y ubicándose bien. Nosotros somos muy tímidos, no hablamos mucho".
buscan más referentes
Cuando se le recuerda que esta falta de liderazgo se hace más notoria cuando no juegan él o Jorge Ormeño, Villarroel relativiza la importancia de ambos. "De hecho, Jorge tampoco habla mucho en la cancha, pero con su sola presencia en el campo de juego transmite mucho. Solo por ser él, genera respeto. Ha hecho falta en estos últimos partidos", dice.
Sin embargo, también cree que es momento que los más experimentados vayan mostrándole el camino a los jóvenes "porque el día de mañana ellos van a tener que ser los referentes dentro de la cancha. Esta situación no puede seguir igual a lo largo de los años, tenemos que irlo trabajando, entregando responsabilidades para que todos sean capaces de liderar al equipo".
"Tengo los más lindos recuerdos
del partido contra Inglaterra en 1998"
Moisés Villarroel fue titular en el partido amistoso que Chile jugó con Inglaterra en 1998 como preparación para el Mundial de Francia. "Tengo los más lindos recuerdos. No tengo recortes ni videos, pero en mi retina está todo. Lo disfrutamos bastante porque la mayoría éramos del medio nacional; ahora no sé cómo será porque muchos ya han jugado en grandes estadios de Europa. El otro día chateaba con Eugenio Mena y le decía que aproveche el momento y que disfrute", comentó.