Después de la derrota sufrida ayer por Everton ante Ñublense, se confirma la principal carencia que hace unas semanas detectó el técnico Omar Labruna: la absoluta falta de finiquito.

Y es que ante los chillanejos los viñamarinos pudieron tener mejor suerte si hubiesen aprovechado alguna de todas las ocasiones que se generaron, sobre todo durante la primera mitad del compromiso que terminó a favor de los "Diablos rojos" por 1-0.

Esto también justifica el afán del estratega argentino por reforzar para la próxima temporada la ofensiva, ya que tres de los cuatro refuerzos que podrán incorporar serán atacantes.

Números que inquietan, porque los oro y cielo, en 16 partidos, han podido marcar 14 tantos, lo que los hace tener la peor diferencia de goles del certamen (-12), junto al colista Huachipato, precisamente los rivales que enfrentarán el próximo viernes en Quillota en el cierre de la temporada 2013.

TRÁMITE DEL COTEJO

En Chillán también se mostraron problemas en defensa (a los locales se les anuló un penal por posición de adelanto a los 3"), pero sólo en el arranque, porque paulatinamente los viñamarinos fueron controlando el nerviosismo que los llevó a cometer una serie de faltas en los primeros minutos.

Esta confianza también permitió que Everton se fuera atreviendo y descubriendo que sus contendores también evidenciaban fisuras en retaguardia cuando eran presionados.

Así, se planteaba un compromiso equilibrado, porque luego de cada llegada del equipo de Pablo Abraham los auriazules repondían con una contra. Moisés Vásquez remataba desviado a los 29" y dos minutos más tarde Benjamín Ruiz exigía a una buena contención de Gustavo Dalsasso.

Luego, a los 33", Romero gestaba una jugada por el centro del campo de juego que no lograba terminar de buena manera Nicolás Peñailillo, que remataba muy suave ante la salida de Lucas Giovini. En la contra de esa misma chance, Ñublense se lo volvía a perder, con un cabezazo de Matías Riquero que daba en el palo.

Pero las últimas ocasiones de la primera fracción serían para la visita. Un desborde a los 39" de Moisés Vásquez terminó en un cabezazo de Luis Vila que contenía a medias Giovini, porque le dejó el balón a un Romero que en la entrada del área chica elevó de forma inexplicable.

Y a los 40" y 45" Ángel Rojas aportaría con remates de distancia que inquietaron a los dueños de casa.

El expediente del remate al arco no era casualidad, ya que se trataba del recurso que estaba más a mano cuando escaseaban las ideas para entrar de manera colectiva al área de Ñublense.

Pero todo lo bueno de lo realizado por los viñamarinos se diluyó en el complemento, porque las aproximaciones comenzaron a hacerse más esporádicas. El ingreso de Tomás Lanzini le dio mayor movilidad ofensiva a los chillanejos y al poco rato de haber ingresado su equipo pudo anotar la única cifra del partido.

Boris Sandoval desbordó por izquierda y envió un centro que fue recepcionado de cabeza por Benjamín Ruiz, quien ponía a los 62" el 1-0 ante la débil y atrasada marca de Moisés Vásquez.

Pese al golpe, el cuadro de Labruna intentó reaccionar, cuando a los 70" un centro de Rojas no pudo ser conectado ni por Vila ni por Romero, que incómodos no lograron definir la jugada.

Ya con 10 hombres, por la expulsión de Fernando Saavedra, las cosas se hicieron mucho más complicadas y Everton terminó sumando su décima derrota del campeonato. La despedida en Quillota ante Huachipato seguramente hablará de la necesidad de decir adiós de la manera más digna a una temporada demasiado irregular.

Plantel reconoce escaso poder de fuego

Tras la derrota ante Ñublense, el volante Ángel Rojas dijo que uno de los factores que les impidieron sumar ayer en Chillán fue la falta de finiquito. "Fue un partido ingrato, en el primer tiempo nos creamos ocasiones, pero nos faltó el último toque para definir...faltan muchas cosas por mejorar, como tener más consistencia arriba", analizó el mediocampista, mientras que Emiliano Romero comentó que "quedamos "calientes" porque no merecíamos perder, la diferencia estuvo ahí; ellos hicieron el gol y nada más. Pueda ser que terminemos ganando el último partido".