Secciones

Con ola de protestas Egipto aprueba una nueva Constitución

política. La policía además arrestó a los que hacían campaña por el "No".
E-mail Compartir

El 98,1% de los votantes egipcios aprobó una nueva constitución, respaldada por los militares. Así informó ayer la comisión electoral de Egipto, en lo que constituyó la primera votación realizada en el país desde el golpe que derrocó al ex presidente islamista Mohammed Morsi.

El referendo de dos días era considerado clave para legitimar al actual gobierno interno, comandado por los militares, y el resultado no fue una sorpresa porque las autoridades lo promocionaron ampliamente. Pero la participación de los votantes, apenas un poco mayor que en una votación realizada el año pasado con el apoyo del gobierno del destituido Morsi, sugiere que Egipto sigue profundamente dividido.

La Suprema Comisión Electoral de Egipto informó también que 38,6% de los más de 53 millones de ciudadanos con capacidad de voto en la nación participó en la consulta de dos días, el miércoles y jueves. El juez Nabil Salib, presidente de la comisión, dijo que esto equivale a 20,6 millones de personas que depositaron su voto y a 20,3 millones de sufragios contados después de eliminar los anulados.

Por otro lado, activistas y grupos observadores han manifestado su preocupación por la atmósfera que rodeó la votación. El grupo estadounidense Democracy Internacional dijo que hubo "arrestos y detención de voces disidentes" antes de la votación. "Una transición democrática debe caracterizarse por una expansión de las libertades, pero los egipcios están viendo sustanciales restricciones al ejercicio de sus derechos democráticos", dijo Eric Bjornlund, presidente de Democracy International y jefe de la misión de observación.

Cabe destacar que antes de la votación, la policía egipcia arrestó a los que hacían campaña a favor del "no" en el referendo, dejando poco espacio para cuestionar el documento.