Las autoridades federales de Estados Unidos buscarán la pena de muerte para Dzhokhar Tsarnaev, uno de los dos hermanos inmigrantes chechenos acusados de colocar las bombas en la maratón de Boston en abril del año pasado.
La decisión del secretario de Justicia Eric Holder era algo esperado. Las dos explosiones dejaron tres muertos y más de 260 heridos. Además, 17 de los 30 cargos federales que pesan sobre Tsarnaev -incluido el uso de un arma de destrucción masiva con fines letales- conllevan la posibilidad de la pena capital. "El carácter de la conducta mencionada y los daños causados nos obligan a tomar esta decisión", dijo Holder en un comunicado.
Tsarnaev se ha declarado inocente. Aun no se ha fijado fecha para el juicio. Las autoridades sostienen que Tsarnaev, que entonces tenía 19 años, y su hermano de 26, ambos inmigrantes chechenos que llevaban una década en el área de Boston, construyeron e instalaron dos bombas en ollas de presión cerca de la meta del maratón del 2013, en represalia contra Estados Unidos por sus acciones militares en naciones islámicas.
Su hermano, Tamerlan Tsarnaev, murió en un enfrentamiento armado con policías días después del ataque.
Dzhokhar Tsarnaev quedó herido, pero huyó a pie. Fue hallado tratando de esconderse en un bote al lado de una casa en un suburbio de Boston. Las autoridades sostienen que dejó consignas escritas en el bote en las que justificaba sus acciones. Tsarnaev también está acusado por la muerte de un guardia de seguridad del Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT, en inglés) y el intento de robarse un automóvil en su intento de fuga.
Desde que la pena de muerte fue reinstaurada en EE.UU. en 1988, se han impuesto 70 penas de muerte, y sólo tres personas han sido ejecutadas.