El año pasado, el diseñador viñamarino Miguel Ángel Guzmán decidió instalar su estudio en la ciudad que lo vio nacer. "Como toda nueva reinvención toma tiempo, y generar industria es tiempo. Y a ratos puede ser complejo, pero sin duda yo creo que se está abriendo un nicho importante en Viña del Mar", comenta; agregando que este tiempo también ha sido de introspección laboral con el fin de "reconstruirme como diseñador, porque la finalidad de uno es generar un nuevo lenguaje visual y eso toma tiempo".
Es así como han ido naciendo las nuevas colecciones. La última vez que exhibió su trabajo masivamente fue cuando vistió a Katty Kowaleczko para la avant premier de la película "Mamá ya crecí". "Ella sigue siendo mi gran musa", sostiene Guzmán que desde hace 20 años mantiene una amistad con la actriz.
EL gran impulso
En la última década, Miguel Ángel Guzmán ha sido comentarista de modas en programas de televisión y este Diario para cada Festival de la Canción de Viña del Mar. Y ha sido bastante crítico con los looks de las animadoras. "Es cierto que a ratos he sido un carajo con mis comentarios en relación a otros años anteriores", reconoce. En el caso de Tonka Tomicic, por ejemplo, le criticaba que utilizara diseños foráneos; mientras que nunca le gustó cómo se veía Eva Gómez, de la cual dice no tiene nada personal en contra, pero "hay tallas que lamentablemente la pantalla es my cruda, y no todos tenemos la suerte de vernos bien en televisión".
Por eso las expectativas que tiene con respecto a lo que será Carolina de Moras son altísimas. "Creo que es lo mejor que vamos a ver en mucho tiempo", pues "una cosa es que una persona sea bonita y otra que tenga buena facha, lo que no siempre va tomado de la misma mano. Pero ella reúne todas las condiciones", afirma.
Guzmán, quien ha tenido la posibilidad de trabajar con la exmodelo en sus colecciones o en las fotografías de revistas, la describe como "una mujer guapísima, con calce extraordinario, una modelo de talla internacional. Pocos saben que ella ha modelado en desfiles por mucho rato en Europa y es una chica que tiene un manejo de pasarela, y de escenario extraordinario", alaba.
"Estoy muy contento que a ella le toque esta bendición de ser la animadora del Festival de Viña del Mar", agrega Guzmán, quien se manifiesta muy feliz también de que haya elegido diseñadores nacionales para vestirse durante las seis noches del certamen y la Gala. Pero no solo porque haya privilegiado a la industria chilena, sino también porque optó por los jóvenes. "Con su trayectoria podría haber llamado a los faraones de la moda nacional, pero se la juega por las nuevas generaciones. Ese es un tremendo espaldarazo a los nuevos creadores y a la moda chilena", comenta y termina diciendo que esto "es un gesto muy generoso por parte de ella".
la gala
Variados colores Miguel Ángel Guzmán cree que la mujer chilena se está atreviendo con el color, y eso se reflejará en la Gala.
Crimen de la moda Una mujer que llegue con vestido a la rodilla, o con el pelo suelto no estaría a la altura del evento.
El esmoquin Los hombres también han aprendido a vestirse para el evento, y ya no se ven los que ocupan el traje con el que estuvo en la oficina.
Sin disfraces El diseñador espera que en esta Gala nadie ocupe algún disfraz, como ha sucedido con algunos humoristas.