Secciones

La música electrónica tendrá una nueva forma de difusión

Música. Para mañana está fijada la primera versión de Microfestlabel, la fiesta de los sellos digitales.
E-mail Compartir

Con el fin de potenciar y difundir las publicaciones de músicos electrónicos que tienen una producción importante en netlabels nacionales e internacionales, mañana (21 horas) en el Deck 00, Muelle Barón se desarrollará la primera versión de Microfestlabel (MFL), la fiesta de lo sellos digitales.

Uno de los invitados estrellas del evento es el danés Lars Graugaard (Lars from Mars), músico, investigador y organizador con un master en música y un doctorado sobre los desafíos tecnológicos y artísticos de la música interactiva. Para él lo fundamental no es el estilo de música que se hace, sino lo que produce en el oyente: "Hacer música no es lo mismo que tocar música, el fenómeno de la música se produce en un ecosistema, ese ecosistema es el local, el público, el intérprete, el compositor", dijo hace poco en una entrevista a "The Clinic".

Entre los otros invitados que darán vida a esta fiesta se encuentra Frank Benkho, el nuevo proyecto solista de Mika Martini (Hugo Espinosa Chellew). Fundador del sello Pueblo Nuevo, su nuevo trabajo se caracteriza por utilizar principalmente la voz, sintetizadores análogos y el ruido procesados en tiempo real con pedales de efectos, generadores de ondas y máquinas de loop para crear atmósferas y estados melódicos cercanos al "noise", al "gospel".

A ellos se unen los representantes porteños, entre los que destaca Alisu -proyecto individual de Jessica Campos de la Paz, diseñadora gráfica y músico electrónica experimental-, y cuyo último trabajo "Un azar diseñado por mi" fue publicado en el sello alemán Tropic netlabel. A ella se suma Hans Carstens, ingeniero en informática, DJ y músico; Basstk (Miguel Jáuregui) creador del sello Epasonidos, y en las visuales Vj Anto (Evelyn Morales). Completa la lista de participantes el quilpueíno Gozne (Eduardo Yáñez) finalizando con una fiesta a cargo de dj Ronnie Flores.

Todos ellos tienen distintos estilos, y para quienes asistan la idea no es solo escuchar música, sino también conocer los nuevos movimientos que se están desarrollando en este ámbito, además de bailar y contemplar el mar. El evento tiene un valor único de $3.000, y se puede adquirir en la misma puerta. Está proyectado que dure hasta las 04.45 horas.