Cartas al Director
Bellavista
Hago un llamado a los porteños de verdad a defender sus espacios públicos, puesto que hemos permitido que por años personas se tomen el sector de Bellavista y dejen basura como también malas actitudes y agresivas.
Ahora, vemos que las autoridades ponen orden para proteger un área verde. Por ello, la tarea es seguir cuidándola y no dejar que salgan los mismos de siempre a criticar. Ya estaba bueno que se tomaran medidas, pero si aceptamos que por cada medida salgan críticas politiqueras, que no nos representan a los que verdaderamente vivimos acá no vamos a avanzar mucho.
Si creen que no nos damos cuenta, están equivocados. De paso, también pido orden con otros jóvenes que se ponen al frente del supermercado Líder, donde está la pileta, porque ahí hay gente que se dice del Wanderers y que también molesta pidiendo plata y molestando a los transeúntes. Ojo que no son personas de escasos recursos, a quienes apoyo sin condiciones, sino que son lolos que pueden trabajar.
María Virginia Pérez
Bellavista II
Trabajo en Viña del Mar y debo transitar diariamente por el sector de Bellavista: Cuando voy a mi trabajo y cuando regreso. En ambas ocasiones, que son o muy temprano o muy tarde, debía enfrentar el feo escenario de jóvenes pidiendo dinero con perros que irradian rabia. Con esta medida de proteger la plazuela que tiene el lugar, por fin, se ordenará la situación y se podrá erradicar esta malísima costumbre. Lamento mucho que Carabineros, que veía a diario esta situación, poco y nada hiciera, puesto que si estas personas hacían esto con tanta soltura era porque el personal de esta institución nada hizo.
Leopoldo Barriga Pérez.
Molestias en el barrio
Cuando los vecinos de la Población Vergara Oriente ya nos congratulábamos de haber despertado la sensatez en las autoridades del Sporting y la Municipalidad, porque parecían haberse descartado los eventos vociferantes, el sábado 15/02 volvió a rugir el repulsivo monstruo. ¡Es grotesco!
¿Qué podemos hacer los vecinos para resolver el abuso incalificable del Sporting, que ha convertido este encantador barrio en un lugar de bulla y borracheras? El odioso vecino, movido por su afán de lucro, ha dejado de ser el pintoresco recinto hípico que conocíamos para transformarse en una feria de eventos que contamina el barrio, al igual que lo haría una industria de emanaciones perniciosas para la salud, que sin duda no podría coexistir con nuestro entorno familiar.
Una vez más apelo a la inteligencia de la autoridad edilicia y a la sensibilidad de los directores del Sporting. También llamo a los constructores de las mega edificaciones que se levantan en el barrio, ya que sus clientes potenciales serán las nuevas victimas de esta incivilizada realidad.
Enrique del Campo Morán
Larraguibel
Como todos los veranos, y este verano ha sido aún peor, el monumento al Capitán Larragibel y su caballo Huaso, simbolos de un gran suceso ecuestre, han pasado al trajín de gente indolente que usa la pileta para sacarse la arena y da rienda suelta a los chicos para que suban al caballo con el riesgo de caer con graves conscuencias. Se consultó a un carabinero que ocasionalmente controla esta situación y encogiéndose de hombros manifestó no poder hacer nada. Esto es parte de la negligencia y falta de cultura de nuestro pueblo que deja por el suelo la suavidad con que la Alcaldesa manifiesta inocentemente que Viña es un ciudad Bella.
Joaquín F. Vallejo
Venezuela
Ya apareció un diputado electo del PC, apoyando con toda fuerza a Maduro de Venezuela.
Ya verá la señora Bachelet cuando la empiecen a criticar. Mientras tanto los inocentes de la DC todavía creen en el Viejito Pascuero, tal como creyeron cuando aceptaron las Garantías de Allende
Jorge Baeza Concha
Ciudad Bella
Estando muy de acuerdo con la carta del señor Miguel A. Vergara Villalobos, publicada en ese Diario el Sábado 15 del presente, me permito hacer presente lo siguiente: ¿Quién puede apreciar que esta ciudad es linda?
Los peatones, entre los que me encuentro yo, debemos caminar mirando el suelo para evitar tropezar con cuanto desnivel hay en las veredas y hacer el quite a los ciclistas y muchachos en patinetas que transitan por las mismas. En cuanto se refiere a los automovilistas, tampoco pueden apreciar nada ya que deben hacer el quite a tantos hoyos que hay en las calles.
Por otro lado ¿qué tiene de bello ver las murallas rayadas y los paraderos de micros llenos de afiches pegados en los mismos?
Inés Frederick Petersen