Everton traslada el Clásico Porteño al estadio Santa Laura de Santiago
fútbol. Medida obedece al repunte futbolístico que el equipo ha vivido jugando en canchas de pasto natural. Hoy la Intendencia Metropolitana resuelve si aprueba el compromiso.
Ayer comenzó unas de las semanas más importantes del año tanto para los hinchas evertorianos como para los wanderinos. Y es que el próximo domingo (17 horas) se jugará la versión 160 del tradicional Clásico Porteño, válido por la novena fecha del torneo de Clausura.
En la previa, una de las aristas que más ha suscitado la atención es el recinto en donde se llevará a cabo el trascendental partido. Ni el remozado "Elías Figueroa Brander" de Playa Ancha, ni el "Lucio Fariña Fernández" de Quillota o el "Nicolás Chahuán" de La Calera serán utilizados por Everton para ejercer su localía, sino que el clásico entre los equipos de Viña del Mar y Valparaíso se trasladará al estadio Santa Laura de Santiago, en una medida inédita en la historia de partidos oficiales entre ambas escuadras.
"El estadio debiera quedar confirmado mañana (hoy) a las 16:30 horas, ya que tendremos una reunión con la Intendencia Metropolitana, ahí también se definirá el aforo y los detalles de la venta de entradas", informó el presidente de Everton, Juan Pablo Salgado.
ventaja deportiva
Desde que Nelson Acosta regresó como director técnico a Everton dejó en claro que el pasto sintético no era de su agrado, es más, en su afán por jugar en una superficie natural, visitó las dependencias del estadio de Quintero para eventualmente utilizarlo para partidos de local de baja convocatoria. Esto sumado a la gran cantidad de lesionados que el equipo tuvo producto de los partidos en Quillota, hicieron que la dirigencia oro y cielo optara por Santa Laura para jugar el tradicional partido.
"Lo que estamos haciendo es privilegiar el aspecto deportivo, nosotros somos conscientes de la incomodidad que representa transportar el partido a Santiago, pero queremos privilegiar jugar en cancha de pasto natural", agregó Salgado.
Eso a pesar que en cuanto a presupuesto se refiere, arrendar el estadio Santa Laura representaría un desembolso aproximado de 15 millones de pesos, casi tres veces más de lo que cuesta jugar en el "Lucio Fariña Fernández" de Quillota.
Quien también reconoció esta denominada ventaja deportiva, fue el capitán y referente oro y cielo, Gustavo Dalsasso, quien expresó que "producto de los últimos problemas que hemos tenido en superficie sintética, en cuanto a las lesiones, al jugar en pasto natural se está privilegiando lo deportivo". Pero además del tema de las lesiones, Dalsasso reconoce que el equipo ha vivido un repunte futbolístico en el recinto santiaguino, donde ya enfrentó a Universidad de Chile (caída ajustada) y recientemente a Unión Española (triunfo).
"Santa Laura es un escenario donde pudimos recuperar el andamiaje del equipo y donde hemos mostrado un repunte futbolístico, esperamos hacer una buena presentación y sumar de a tres", añadió el capitán.
los hinchas
Si bien los principales perjudicados con el traslado del partido a Santiago serán los hinchas, los fanáticos oro y cielo no ven con malos ojos jugar el clásico en la capital, principalmente por el buen juego que ha mostrado el equipo jugando las últimas fechas en el recinto de Plaza Chacabuco.
"Si bien no estoy de acuerdo que se juegue en Santiago, la cancha de pasto sintético es muy dura y ha habido mucho lesionado. El Everton, por la situación en que está, necesita de los puntos y si van a jugar a Santiago uno tiene que apoyar por el bien del club. En todo caso el sacrificio de los hinchas por ver al equipo en cualquier lugar de Chile siempre estará presente y ahora más que nunca hay que apoyar al equipo", expuso Ernesto Rives, octogenario hincha evertoniano.
Apesar de tener que jugar en Santiago, hay algo en lo que los hinchas oro y cielo son enfáticos: "la localía no se transa". Así lo expuso Gustavo Heresman, integrante de Los Ruleteros, quien declaró que "el pasto sintético es una superficie complicada para Everton, donde no se han logrado resultados positivos, ahora, tampoco me gustaría jugar en el estadio de Playa Ancha, porque no podemos estar regalando la localía a Wanderers, eso no se transa".
En tanto, en la vereda wanderina, el ánimo de los hinchas con respecto al cambio del partido a un reducto capitalino es más bien pesimista, principalmente por el esfuerzo económico que implicará viajar a Santiago, lo que según Gonzalo Cortés, hincha caturro y fundador del sitio web "Awante", "limitará la cantidad de personas que asistirán al estadio".
Y es que para Cortés, este será "un clásico "penoso", ya que lo van a poder disfrutar solamente algunos hinchas y esos serán quienes tengan la plata para viajar a un partido que históricamente se ha jugado en la V Región. Con este cambio lo único que se logra es que la gente no vaya al estadio y lo termine viendo por la televisión".
Juan Pablo Salgado
Presidente Everton.
Club viñamarino tienen un opositor
Pese a los esfuerzos de Everton por realizar el Clásico Porteño frente a Santiago Wanderers en el estadio Santa Laura, el club viñamarino ya tiene en Cristián Barra, Coordinador del plan Estadio Seguro, a su primer opositor. "Hace un mes atrás le pedimos a la ANFP reprogramar esta fecha y así ayudar a Carabineros, quienes este fin de semana tienen una mayor carga de trabajo y hoy (ayer) aparece programado Wanderers-Everton en Santa Laura el día domingo, para colapsar aún más la ruta 68, y todo porque el club (organizador) no quiere jugar en cancha sintética", declaró Barra.