Como todos los años, el Festival de la Canción de Viña del Mar tuvo momentos muy destacados, y otros que francamente habría que dejar en el olvido. Más allá de eso, lo cierto es que una de las críticas recurrentes que tuvo esta edición fue el alargue de cada una de las jornadas, siendo la más memorable la del miércoles 26 de febrero cuando Yandar y Yostin subieron a escena par a iniciar su presentación a las 3.58 horas, con solo unas dos mil personas ubicadas en platea y palco.

"El tema de la extensión de horario es un mito que construyen los periodistas, lo quiero decir con todas sus letras, porque la gente lo pasa muy bien. Esta es una fiesta popular, de verano, donde ayer (viernes) cerramos a las 3.30 de la mañana y con 15 mil personas en sus lugares. Entonces, ¿cuál es la preocupación que sea hasta tarde?, ¿cuál es la necesidad de cerrar más temprano?", fue la respuesta del director general del Festival, Pablo Morales, cuando se le consultó al respecto en la conferencia que ofreció con la alcaldesa Virginia Reginato para hacer un balance de la versión 2014 del evento.

Adelantar el show

Adelantar el show

Además destacó que todos los artistas de la presente versión que habían actuado tarde "salieron felices aunque estuvieran a las 3 de la mañana", añadiendo que estos "nos pueden criticar porque hacen shows más cortos, pero no por el cierre de transmisiones".

Desde este punto de vista, el hecho de que cada una de las noches tenga una duración cercana a las seis horas, parece no ser un problema para la organización. Sin embargo, esta no es la primera vez que ocurre, pues desde antes que CHV ganara la licitación para el período 2011-2014 ya se hablaba del tema; y las promesas de terminar alrededor de las 2 de la madrugada se suceden todos los años.

Por lo mismo, la propuesta de iniciar antes la transmisión del Festival ha tenido buena acogida, incluso, de parte de la jefa comunal. Si bien apoyó lo que dijo Morales de que la gente asiste a la Quinta Vergara para pasarlo bien y no le importa acostarse tarde, consideró que "lo que hay que mejorar es el horario de inicio. Creo que eso hay que hacerlo de todas formas y es un tema a evaluar".

Por su parte, el director general del Festival explicó que si bien las bases no definen a que hora comienza la emisión del evento, porque es una decisión que toma la señal que tiene a cargo la concesión, sí debería haber un cambio: " Los canales deberíamos evaluar empezar media hora antes para poder tener los shows lo más continuos posibles". En este sentido, comentó que a los pocos minutos de haber comenzado el show de Ana Gabriel ya marcaba 40 puntos, por lo que sería viable adelantar el horario; aunque eso tendrá que analizarlo el canal que organice el Festival por los próximos cuatro años.

Grandes sonrisas

Otro de los temas que se abordó fue el de la entrega de los trofeos, ya que en las seis noches que duró el certamen se repartieron cerca de 80, y muchas veces parecía más bien que era decisión de los animadores. Sin embargo, Morales descartó esta idea: "Todos los premios se han entregado escuchando a la gente, y no por criterios propios. Por lo tanto, nosotros somos democráticos a la hora de entregarlos".

También durante el encuentro con los periodistas, tanto Pablo Morales como Virginia Reginato tuvieron palabras de alabanza para la dupla de animadores compuesta por Rafael Araneda y Carolina de Moras. "Para mí la dupla de animadores estuvo estupenda" dijo la alcaldesa, añadiendo que la exmodelo "se ganó el cariño del público y de verdad lo hizo muy bien".

El director del certamen fue más allá, al manifestar que De Moras "lo hizo extraordinario. Estaba nerviosa como corresponde ante un escenario de esas características, pero en verdad creo que fue un descubrimiento como animadora. Es muy joven y tiene una carrera gigante por delante", añadiendo que tiene contrato vigente con el canal por tres años más.

También se dio el tiempo de destacar a Rafael Araneda, quien fue el rostro oficial de la cita musical durante los cuatro años. "En verdad se sacó un 7, lo hizo impecable, siempre estuvo apoyándonos en todas las instancias", comentó.

Si bien la mayor parte del balance fue positivo, Pablo Morales comentó que aún "tenemos muchas críticas internas que hacernos. Tenemos mucho que mejorar, nadie es perfecto. Pero de esta versión nos vamos con una sonrisa gigante. Sentimos que hemos dado lo mejor de nosotros por tener un buen Festival y nos vamos con el pensamiento en nuestra cabeza de misión cumplida", concluyó.