Las horas posteriores a la derrota en el Clásico Porteño han sido duras para el plantel del Santiago Wanderers. La decepción en el rostro de los dirigentes del Decano el pasado domingo en las tribunas del Santa Laura ahorraba mayores comentarios, instalando una vez más las dudas respecto del futuro de Ivo Basay como entrenador del Decano.

Sin embargo, lo cierto es que el DT se quedará en el Puerto hasta el fin del Clausura.

"Perdió (Ivo Basay) una enorme oportunidad para cambiar su imagen", asumió un directivo de la sociedad anónima caturra, adelantando que "estamos viviendo un instante crítico... tenemos un plantel de 90 millones de pesos, con jugadores de categoría, y las cosas no salen... es muy decepcionante".

Si bien es cierto que en la mesa que lidera Jorge Lafrentz se opta por el silencio o las conversaciones de pasillo, ya para nadie es un misterio que el futuro del exdelantero de la Selección Chilena está lejos de calle Independencia.

¿Sus mayores pecados? No lograr convencer a sus jugadores del supuesto estilo frontal y ganador que ha pregonado desde su venida a fines del 2012, quizás el único momento en que logró entusiasmar con un equipo con un carácter que lamentablemente luego perdió en el camino.

Basay tampoco ha dado con el nombre de los "refuerzos. Los jugadores que han venido, supuestamente a potenciar el Decano, no han cumplido con las expectativas y las exigencias de un club que requiere con urgencia volver a ser protagonista en la Primera División.

Y si en algo claramente el DT ha tenido razón es en que lamentablemente Santiago Wanderers hace bastante tiempo se acostumbró a la mediocridad de sus campañas, situación que el estratega tampoco ha logrado revertir con buenos resultados.

Hasta el momento solo han sido explicaciones. Sin embargo, aparentemente el tiempo de ellas ya terminó y el plazo definido es junio.

"A no ser que pase algo muy extraño, creo que el futuro está definido", se sostiene desde la dirigencia del verde.

Cabe recordar que Santiago Wanderers vuelve el jueves a las canchas. Desde las 18.15 horas, el Decano recibe a Ñublense en el estadio "Elías Figueroa Brander", en Playa Ancha, en un compromiso que a esta alturas pocos se atreven a asegurar pueda servir para cambiar una decisión que ya está tomada.

FUERA DEL CLAUSURA

Pero las malas noticias se instalaron en el Complejo Mantagua. A primera hora, Ivo Basay supo que Mauricio Viana se perderá todo lo que resta del torneo de Clausura debido a la lesión en los meniscos que sufrió ante Unión La Calera en Playa Ancha.

El arquero del Decano necesitará entre tres y cuatro meses para volver a realizar fútbol competitivo con lo que toda la responsabilidad para concluir la actual campaña recaerá en José Lafrentz.

Junto a Lafrentz, en la banca se mantendrá el joven Gabriel Castellón, quien en la temporada pasada obtuvo un histórico título junto al equipo sub-19.

VENTA DE ENTRADAS

Desde calle Independencia se confirmaron los valores de las entradas para el partido del próximo jueves entre Santiago Wanderers y Ñublense en el nuevo estadio "Elías Figueroa Brander", en un duelo válido por la décima fecha del torneo de Clausura.

Los precios de los boletos son los siguientes: Galerías (Norte y Sur), $ 3.000; Andes, $ 6.500; Pacífico, $ 11.000, y Tribuna Visita, $ 5.000.

Las entradas pueden ser adquiridas en la página web de Ticket-express, comprar un E-ticket e imprimirlo para presentarlo el jueves en el coloso de Playa Ancha.

Presencialmente, los hinchas también pueden comprar sus boletos en las oficinas de Chilexpress (en sus oficinas de avenida Brasil, calles Esmeralda y Victoria en Valparaíso, además de 14 Norte y Simón Bolívar en Viña del Mar), confirmándose que no habrá venta en la sede de calle Independencia.

También se podrá hacer el jueves en las mismas boleterías del estadio, desde las 16.30 horas.

Cabe recordar que el duelo ante los chillanejos será el segundo oficial que los hombres de Ivo Basay jugarán en el nuevo recinto deportivo, porque tras el debut ante el Inter de Porto Alegre, los verdes vencieron por 2-0 a Unión La Calera.