Secciones

Justicia declara que madre de bebé sacrificado es imputable

quilpué. Tribunal no acogió petición de sobreseer causa contra Natalia Guerra, quien ahora cumplirá en su casa arresto domiciliario, a 12 días del término de la investigación.
E-mail Compartir

El Tribunal de Garantía de Quilpué rechazó la solicitud de la defensa de Natalia Guerra, madre del lactante sacrificado en una hoguera, que buscaba su sobreseimiento definitivo apelando a su inimputabilidad por los severos trastornos psiquiátricos que padecía durante el parricidio perpetrado durante un rito de la secta de Colliguay.

Sin embargo, el juez Milenko Grbic, aceptó modificar las medidas cautelares que pesaban sobre la joven, autorizando el término de su internación provisional en el Hospital Psiquiátrico Philippe Pinel de Putaendo, e iniciar así un arresto domiciliario total en su casa de Pirque, con autorizaciones para salir de su hogar y continuar su tratamiento médico. También se le decretó arraigo nacional.

ENAJENADA MENTAL

En la audiencia, el abogado defensor, Claudio Pérez, citó la serie de peritajes psiquiátricos practicados a la joven de 27 años, con el objetivo de acogerse al "artículo 10, número 1 del Código Penal, en el entendido de que están exentas de responsabilidad el loco demente y el que por cualquier causa, independiente de su voluntad, se haya privado totalmente de razón", expuso.

Según Pérez, los diagnósticos realizados señalaban que Natalia Guerra, al momento de los hechos, padecía un "trastorno delirante compartido y un trastorno de personalidad limítrofe, con rasgos histéricos y narcisistas. (...) Se encontraba psicótica, lo que corresponde a la categoría de enajenación mental", indicó.

SECTA DE PIRQUE

El abogado defensor también señaló que la situación de Guerra era equiparable a la de Paola Olcese, sindicada como líder de una secta que operaba en Pirque y a la que se buscó responsabilizar de la muerte de una profesora. En ese caso "finalmente el juez de garantía (...) decretó el sobreseimiento definitivo de doña Paola Olcese", agregó el jurista.

A su vez, Claudio Pérez, expuso los resultados de un examen (HCR-20) que buscaba determinar el grado de peligrosidad por violencia de la expareja del fallecido Ramón Castillo, conocido como "Antares de la Luz". La evaluación hecha en el hospital de Putaendo arrojó un nivel de 8 puntos, cuando el promedio de los usuarios de ese centro asistencial es de 21 puntos y el nivel de corte de la escala de medición es de 28 puntos.

Sin embargo, el fiscal a cargo de la investigación, Juan Emilio Gatica, en su intervención basó su oposición al sobreseimiento ya que "para el caso de un imputado enajenado mental, el código procesal penal establece un procedimiento especial (...) y establece un momento procesal específico para decretar el sobreseimiento definitivo, que es al momento del cierre de la investigación", argumentó citando la legislación.

Además, apuntó a contradicciones en las respuestas que ha entregado Guerra durante el proceso, respecto a la lucidez que habría tenido durante el rito de noviembre de 2012, cuando se sacrificó al recién nacido.

Tras un receso, el juez Grbic, explicó las razones por las que rechazó la solicitud de sobreseimiento. Junto con considerar que se trata de una situación especial la de la acusada, sostuvo que "no existen antecedentes concluyentes en orden a que la imputada pueda constituir un peligro para sí o para terceros", además de existir ciertas contradicciones en los informes resultantes de los exámenes practicados a la exmiembro de la secta de Colliguay.

plazo de investigación

Una vez conocida la resolución del tribunal, que liberó a Natalia Guerra de la custodia de Gendarmería, los abogados de la causa entregaron sus visiones respecto a este nuevo escenario.

Respecto a las posibilidades de sobreseimiento futuro de Guerra, el fiscal Gatica sostuvo que "todavía queda plazo para investigar, hay un informe que fue emanado el día de ayer (lunes) por el hospital Philippe Pinel de Putaendo, vamos a hacer nuevas pericias si así lo requieren y, por lo tanto, es una decisión que se va a tomar una vez que contemos con todos los antecedentes".

El plazo para concluir la investigación se cumple el próximo 31 de marzo y, aunque ya fue extendido, el persecutor no descartó solicitar más tiempo para las indagatorias.

RECURRIR A LA CORTE

Por su parte, el abogado defensor, Claudio Pérez, valoró que se le haya cambiado la medida cautelar a arresto domiciliario total. "Desde esa perspectiva, nos sentimos conformes", expresó.

Respecto a las contradicciones que existirían en los informes psiquiátricos, el jurista desestimó tales interpretaciones. "Creemos que son planos distintos sobre los cuales discurren unos informes y otros", dijo.

Pérez comentó que la imputada se encuentra muy afectada por lo ocurrido. "Desde noviembre de 2012, ella ha recuperado la lucidez. Recuerden que justamente estamos en esta situación porque es la propia Natalia Guerra, la que se acerca a la Policía de Investigaciones de Chile a denunciar los hechos", señaló el abogado.

Pérez señaló que revisarán la resolución judicial y así evaluarán la posibilidad de apelar al fallo que rechazó el sobreseimiento de la imputada.

"Nosotros, independiente de lo que se haya resuelto ahora, tenemos que analizar y estudiar si recurrimos, porque está la posibilidad de recurrir a la Corte de Apelaciones de Valparaíso, nuevamente discutiendo la posibilidad de que se sobresea en esta etapa del caso o, por el contrario, esperamos a ver qué es lo que va a hacer el Ministerio Público", señaló el defensor.

Al término de la audiencia, los familiares de Natalia Guerra evitaron a la prensa y su madre solo exclamó "¡felices, felices, felices!", al ser consultada por su opinión. "Ella fue víctima de toda esta situación", complementó una acompañante.

"Está la posibilidad de recurrir a la Corte de Apelaciones de Valparaíso, nuevamente discutiendo la posibilidad de que se sobresea"

Claudio Pérez

Defensor de Natalia Guerra

"(el sobreseimiento) es una decisión que se va a tomar una vez que contemos con todos los antecedentes"

Juan Emilio Gatica

Fiscal del caso

SECTA DE ANTARES

Antares de la Luz se hacía llamar Ramón Castillo (35), líder de la secta de Colliguay, quien era considerado por su seguidores como un ser divino. Tras ser intensamente buscado por la policía, apareció ahorcado en una antigua casona de la ciudad de Cusco, en Perú.

Cinco años operó la secta, antes de realizar su último rito. En la ocasión se sacrificó al recién nacido hijo de Castillo y Natalia Guerra por ser considerado como el anticristo.

12 eran los miembros de la secta. Recibían apremios cuando experimentaban "vibraciones positivas de un nivel bajo".

La madre del lactante fallecido arriesga 15 años de presidio perpetuo calificado por el delito de parricidio en grado de autora. Por tener irreprochable conducta anterior y haber colaborado con la investigación podría generarle una rebaja de la pena a 10 años.