"La orden que hay del alcalde (Jorge Castro) es que cualquier dinero extra que ingrese este año a la Corporación (Municipal) sea para pagar deuda de profesores y asistentes educacionales, nada de comprar computadores ni buses. A ellos les debíamos 8 mil millones y bajamos a 5 mil. Son 2 mil 500 personas. Y este año la idea es ojalá poder pagar 3 mil millones más".
Así de claro es el gerente de la Corporación Municipal de Valparaíso, Gustavo Mortara, quien se mostró conforme con el ritmo con el cual avanzan las finanzas de esa organización.
De hecho, prosiguió, en los últimos días la CMV pagó la deuda existente con Coopeuch, que ascendía a 150 millones -correspondiente a los últimos dos meses- y también quedó al día la Caja 18 de Septiembre, sobre quienes la CMV tenía un mes de desfase.
Además, junto con ello, Gustavo Mortara valoró el hecho que, tras 10 años de caída, finalmente lograron reducir la cantidad de alumnos que año a año dejan la educación municipal. "(Un total de) 26 mil millones es la deuda de la CMV que nace hace 20 años y que con intereses y multas fue creciendo. Y esa deuda se agrava estos últimos 6 años cuando la matrícula cae violentamente. De hecho, nosotros veníamos con la misma caída del promedio nacional, perdiendo entre un 5% y 10%, cada año, en los últimos 10 años. Pero este año, por primera vez, hemos tenido una caída menor y hemos logrado retener más alumnos".
Al respecto, Mortara señaló que cerraron el año 2013 con 20 mil 700 alumnos e iniciamos el 2014 con 20 mil 200. "Es la menor caída de los últimos 10 años, en los 55 colegios municipales".
venta de bienes
Consultado respecto de la posibilidad que el municipio de Valparaíso tenga que desprenderse de bienes para pagar dichas compromisos económicos, que sumado a los 9 mil millones de pesos de deuda municipal llegan a un total de 35 mil millones, lo calificó de "lamentable", aunque destacó que no hay perjuicio para la ciudad.
"Es lamentable que la Municipalidad tenga que desprenderse de bienes municipales para pagar deudas, pero los dos bienes municipales que se están vendiendo al Estado no perjudican a la ciudad: el cuartel San Francisco de la PDI, que ellos lo usan hace 11 años y por fin van a poder ser dueños. Y el Palacio Lyon, donde funciona el Museo de Historia Natural. Ese edificio es de la Municipalidad, pero está en comodato a la Dibam".
Mortara insistió en el hecho de que porque no existía perjuicio para la ciudad y no había fines inmobiliarios de por medio, el Concejo Municipal estuvo de acuerdo en la venta. Mientras el cuartel cuesta 550 millones, el palacio tiene un valor aproximado de 2 mil 500 millones de pesos.
"Todos estos dineros son para pagar deudas, fundamentalmente previsional, que la hemos bajado de 8 mil millones a 5 mil millones en los últimos 6 meses", aclaró Mortara.
En tanto, sobre la posibilidad de desprenderse de bienes, la concejala Paula Quintana manifestó que vender bienes "es tremendo, lo peor que puede ocurrir. Lo que pasa es que vamos a perder patrimonio y, al poco tiempo, vamos a estar con la misma deuda. La Municipalidad ya ha recurrido a esa estrategia, sin embargo, nuestra deuda no ha disminuido".
Como fórmula, la concejala planteó la posibilidad de rentabilizar algunos bienes, como arrendar, a fin de evitar desprenderse de ellos.
Problemas de gestión
Junto con manifestar su disconformidad con la venta de bienes, Quintana aseguró que se va a "oponer" a las iniciativas que impliquen enajenar patrimonio municipal. Del mismo modo, reconoció además que hay problemas de gestión importantes. En tal sentido, señaló que "hace poco tiempo se externalizó el servicio de cobranza para mejorar nuestros ingresos, pero por lo que nos estamos informando el servicio de cobranza no ha dejado ningún ingreso más de lo que venía haciendo la Municipalidad directamente con sus funcionarios".