En medio de las dilatadas tratativas de la Universidad del Mar (UDM) por zanjar la reubicación de sus estudiantes en la Universidad de Playa Ancha (UPLA), un nuevo problema se le ha venido encima.

La casa de estudios podría perder parte importante de su sede de Recreo, ahora que el Tercer Juzgado Civil de Valparaíso fijó para el 23 de abril el remate del edificio que albergaba a la escuela de Derecho.

La acción es parte de la demanda impulsada por el Banco de Crédito e Inversiones (BCI) por compromisos financieros no resueltos.

Según la resolución judicial, el remate afecta al inmueble de la calle Amunátegui N° 1810 de Viña del Mar, que cubre el ala oriente de la sede de Recreo y su precio mínimo de subasta fue cifrado en $966.596.086. Sin embargo, aunque la otra parte del edificio cuenta con otra numeración, ambas están estructuralmente unidas.

Las características del remate obligan a los interesados a presentar una garantía del 10% del mínimo fijado y el pago que tendrá que hacer el mejor postor deberá ser al contado.

LA SOLUCIÓN

Mario Ahumada, rector subrogante de la sede Viña del Mar de la UDM, espera que, en caso que la propiedad sea adjudicada en la subasta, puedan seguir utilizándola por el resto del año.

"Si realmente se llegara a rematar, pretendemos hacer lo mismo que hicimos con la casa que teníamos en ese mismo sector. Le solicitamos a quien lo remate que nos permita terminar por lo menos hasta fin de año, nuestras actividades. Ahora, buscaremos alternativas, si es que nos quedamos sin edificio y todavía tenemos estudiantes, buscaremos alternativas y si no es posible conseguir en el ministerio (de Educación), tendremos que arrendar", manifestó la autoridad universitaria.

Por su parte, Roberto Tobar, presidente del sindicato de trabajadores de las sedes Quillota y Viña del Mar de la UDM, indicó que la situación por la que pasa la casa de estudios, que ahora también merma su escasa infraestructura, "la hemos visto complicada desde hace mucho tiempo. Acá el antiguo Gobierno se preocupó solo de las situaciones de los alumnos y no de los trabajadores. Ahora yo estoy siendo invitado, junto con mis compañeros de la directiva del sindicato, a una entrevista con la senadora, Adriana Muñoz, que es la presidenta de la comisión de Trabajo, para exponerle nuestra situación laboral".

Tobar expresó que debe ser el Estado de Chile el que se haga cargo de sus derechos laborales, que además ya suman deudas de imposiciones para muchos. A raíz de esto último, señaló, existen demandas de algunas isapres contra la corporación propietaria del plantel. "Si bien, los controladores o los dueños de la universidad hicieron mal uso de los dineros que dio el Estado, fue el Estado el que tomó la decisión con el Ministerio de Educación de cerrar la universidad y no se preocupó de la situación", añadió.

RESCATE EN REÑACA

Poco antes del mediodía de ayer, el notario público Juan José Veloso, junto a Ahumada y Tobar, realizaron un levantamiento fotográfico de la exsede Reñaca de la UDM.

Según comentaron hacía casi un año que no ingresaban al inmueble, por lo que su asombro fue mayor. La infraestructura interior está casi completamente destruida. Prácticamente saqueada. Así quedó la sede tras el abandono que los estudiantes concretaron hace algunas semanas, luego de cerca de 12 meses en toma.

Ventanales rotos, libros en el suelo, decenas de computadores desaparecidos, puertas forzadas y documentos de cobranza regados por diferentes lugares, son solo parte de los daños y robos al interior del edificio. "Lamentable, porque en definitiva, independiente de lo que haya sucedido, aquí hay mucha información, mucho material, la misma biblioteca que está totalmente destruida, no son cosas que se construyan de la noche a la mañana. (...) Yo no entiendo cuál ha sido la lógica de destrucción", señaló el rector (s) Mario Ahumada.

El objetivo de la visita fue hacer un catastro de la documentación y elementos que serán rescatados, trasladándolos tanto a la sede de Recreo, como a bodegas del alquiler. "La universidad tiene problemas de embargos, entonces nos llevan una cantidad (de mobiliario) y recuperamos con lo que tenemos almacenado", explicó la autoridad universitaria.

Como el edificio ahora pertenece a la empresa Penta Security, "nosotros pedimos autorización para que nos permitan retirar todo lo que hay aquí", precisó Ahumada.

Mientras tanto, con el objetivo de proteger el mobiliario, equipamiento y documentación que aún queda en el lugar, "vamos a colocar guardias para que no permitan, en la noche, el ingreso de personas extraña a los edificios", concluyó el rector subrogante.

Los responsables de la destrucción

El rector subrogante de la sede Viña del Mar de la UDM, Mario Ahumada, aseguro que no suponían que la sede de Reñaca sería tan severamente dañada y que por eso declinaron decretar un desalojo una vez que se quebró el diálogo entre los funcionarios y los alumnos. Consternado, en medio de su recorrido por las dependencias del edificio, dijo que "para establecer responsables, lo primero es que el notario constate la situación en que encontramos la universidad".