En prisión preventiva hasta mañana quedó el principal sospechoso del asesinato de las dos mujeres, que fueron halladas el viernes enterradas bajo el suelo de una vivienda en el Cerro Ramaditas. El hombre fue identificado como Jonathan Canales González, un comerciante ambulante de 34 años conocido como "El Flaco", que tiene antecedentes policiales por el delito de robo con sorpresa e infracción a la Ley 20.000.
Este le arrendaba en su domicilio de la población Sor Teresa del sector de Cuesta Colorada, una habitación a las víctimas -cuyas presuntas indentidades serían Cecilia Concha Iturra de 50 años y Rocío Zúñiga Concha de 12-, siendo el único vínculo entre ambos, según las primeras investigaciones realizadas por la Brigada de Homicidios (BH) de la PDI.
La BH pudo establecer, además, que ambas mujeresllegaron al inmueble en marzo pasado, y a los pocos días el individuo "habría abusado de la menor de edad, provocando este hecho la muerte de ambas, con una data aproximada a los 30 días", según comentó el subprefecto José Ortiz, jefe de la brigada.
Posible causa de muerte
Los primeros peritajes en el sitio del suceso arrojaron que Canales, un vez efectuado el delito, intentó ocultar los cadáveres en una excavación que realizó en una de las habitaciones de la casa. "Para evitar los malos olores que implica el proceso de descomposición de los cuerpos, y de este modo evitar esclarecer que estos se encontraran, el imputado los roció con cal", aseveró el fiscal a cargo del caso, José Miguel Subiabre Tapia.
Y agregó que el hombre, eventualmente, les habría quitado la vida a las mujeres a través de "asfixia mediante ahorcamiento". El Servicio Médico Legal de Valparaíso (SML), en tanto, se encuentra realizando las pesquisas pertinentes para determinar si esta fue la causa final de la muerte de ambas mujeres.
El hallazgo de los cadáveres se inicio luego de una denuncia de presunta desgracia, interpuesta por la mayor de las hijas de la víctima el pasado 20 de marzo.
Según comentó el fiscal Subiabre durante la formalización, a través de Facebook se recibieron antecedentes de una persona cercana a la mayor de las fallecidas -sin querer revelar su nombre-, los cuales "permitieron dar cuenta que esta mujer había arrendado precisamente esta propiedad en el Cerro Ramaditas". A ello se sumaron las denuncias de mal olor que hicieron algunos de los vecinos.
Pruebas fundamentales
Tras conseguir una orden de allanamiento de la morada, emitida por el Tribunal de Garantía, la PDI llegó al lugar el viernes en la tarde, encontrando los cadáveres en avanzado estado de putrefacción. Inmediatamente se dio paso a la búsqueda del dueño de casa, el cual fue detenido ayer a las cuatro de la madrugada. En sus bolsillos se hallaron la cédula de identidad y tarjetas bancarias de la mayor de las víctimas.
Estas dos pruebas fueron fundamentales para su detención y posterior formalización. El Fiscal aseveró que peritos bioquímicos provenientes de Santiago están ayudando a la PDI a rescatar muestras biológicas del imputado para poder establecer o descartar la posibilidad de otros delitos.
En tanto, la defensa señaló que autorizaba la extracción de muestras biológicas "siempre y cuando no se hiciera menoscabo para la salud y dignidad del imputado".