Alegría y satisfacción por el triunfo, fueron las dos principales emociones que mostraron los seleccionados nacionales al regresar al complejo Toca da Raposa II de Belo Horizonte tras haber vencido por 3 goles a 1 a Australia en el debut de la Roja en Brasil 2014. Y es que un partido que en el papel debía presentarse fácil, finalmente terminó incomodando de sobremanera a los dirigidos de Jorge Sampaoli, por ende, la felicidad fue absoluta al bajar del avión que los trasladó desde Cuiabá.

Ante este escenario, la selección nacional ya comenzó a trabajar pensando en su próximo rival: España, actual campeón del mundo que viene golpeado tras haber sido goleado por 5 a 1 a manos de una sorprendente Holanda.

Comandados por el capitán, Claudio Bravo, uno a uno fueron bajando del avión los seleccionados chilenos. En sus caras se podía apreciar la satisfacción de haber comenzado con el pie derecho la cita mundialera, pensando principalmente en la categoría de los próximos rivales con los cuales Chile comparte el Grupo B.

En este ámbito, el próximo escollo de la selección será España, elenco que en su debut en Brasil debió sufrir una goleada de Holanda, por lo que se presume que los pupilos de Vicente del Bosque se jugarán todas sus cartas frente a los nacionales si quieren seguir con chances de clasificar a octavos de final.

De los últimos tres enfrentamientos entre Chile y España, los ibéricos han conseguido dos triunfos y un empate, estadísticas que son completamente desfavorables para nuestra selección, pero que tienen una particularidad, pues en los dos últimos partidos fue la escuadra nacional quien abrió el marcador.

Al mismo tiempo, Eduardo Vargas, es el delantero chileno que más goles les ha convertido a España, con tres anotaciones en los últimos dos partidos, siendo el más recordado el último doblete que le propinó el pasado 10 de septiembre del año 2013. Arista que llena de ilusión a los compatriotas, quienes se esperanzan en revertir la negativa estadística con una magnífica actuación de 'Turboman' en tierras brasileras.

Chile buscará seguir la senda ganadora cuando se mida con los hispanos el próximo miércoles a las 15 horas en el mítico estadio Maracaná de Río de Janeiro, en lo que significará el segundo partido de la escuadra nacional en Brasil.

En tanto, el otro encuentro del Grupo B será entre el líder Holanda y Australia (12 horas), en Porto Alegre.

La selección holandesa rebosa de felicidad tras la histórica goleada que le propinó a España en Salvador por 5 goles a 1, en su primer partido de Brasil 2014 que fue la perfecta revancha de la final del Mundial de Sudáfrica 2010.

Louis Van Gaal, uno de los grandes triunfadores de la histórica gesta ante España, dirigió ayer una suave práctica en el campo del Flamengo, en la que los titulares hicieron un pequeño entrenamiento de recuperación y estiramientos. Algunos, como Daley Blind y Arjen Robben, también hicieron algo de bicicleta estática. Mientras que los jugadores que no vieron minutos frente a los españoles, realizaron un entrenamiento más convencional con pases en transición y disparos a portería.

Héroe de la victoria frente España, tras anotar un doblete con un bello gol de cabeza y aprovechar el error del meta español, Iker Casillas, el delantero, Robin Van Persie apenas llegó al entrenamiento holandés recibió una ovación por una veintena de pequeños recogepelotas, a quienes saludó uno por uno antes de firmarles unos autógrafos.

Pero la alegría del artillero del Manchester United no terminó ahí, pues el técnico holandés permitió que los hijos de los jugadores saltaran al campo de juego y pudieran jugar un rato sobre el césped con los seleccionados holandeses. Instancia en donde Van Persie jugó junto a su pequeña hija, mientras que otros niños hicieron lo mismo e improvisaron un pequeño partido, todo esto mientras el entrenamiento seguía en el otro lado del terreno de juego.

Ante este escenario, Van Gaal ya había advertido sobre la importancia de la proximidad de las familias de los futbolistas durante el Mundial, ya que considera que les da más fuerza a sus pupilos.

El próximo partido de Holanda contra Australia en Porto Alegre les podría asegurar su paso a octavos de final.