Chile envía nota de protesta a Bolivia por polémico reloj
Diplomacia. El titular de la Comisión de RR.EE. de la Cámara, Jorge Tarud, calificó como un 'acto de provocación' el regalo entregado por La Paz en la cumbre del G-77.
UPI/Sebastián Beltrán
El Ministerio de Relaciones Exteriores entregó ayer una nota de protesta a la cónsul general de Bolivia en Chile, Magdalena Cajías, por un reloj que entregó ese país a los asistentes a la cumbre del G-77 con la forma de su territorio, al que se le anexó una porción de territorio chileno y una salida al mar.
El reloj, instalado sobre un mapa de Bolivia que incluye la Región de Antofagasta, fue el regalo del Gobierno de Evo Morales a los asistentes de la pasada cumbre del Grupo de los 77, en Santa Cruz, en referencia a su aspiración marítima, que el año pasado llevó al tribunal de La Haya.
La nota de protesta fue entregada por el director general de política exterior de la Cancillería, Alfredo Labbé, y recibida por Cajías, quien fue personalmente a buscarla a la sede de la Cancillería, en el centro de Santiago, pero que no quiso realizar declaraciones tras retirarse del edificio.
La acción había sido anunciada el miércoles por el canciller Heraldo Muñoz, quien rechazó abiertamente el souvenir del país vecino.
'El Gobierno de Chile considera que esta sorprendente representación cartográfica constituye un gesto inamistoso hacia nuestro país', sostuvo.
El canciller Muñoz enfatizó que 'a ningún observador se le escapa que con este mapa se alientan irredentismos superados por la historia'.
El controvertido obsequio fue presentado por el canciller boliviano, David Choquehuanca, quien sostuvo que 'este reloj tiene además un mapa con nuestro mar, nuestro litoral, que nos tiene que recordar que nuestro mar es irrenunciable.