El día en que Cellerino fue capitán del Decano
fútbol. Dijo sentirse 'orgulloso' de portar la jineta de Santiago Wanderers, pero reconoció que 'otros la merecen más'.
gustavo alvarado
No fue un partido más para Gastón Cellerino. El delantero de Santiago Wanderers nunca olvidará la jornada del 6 de agosto de 2014 en Playa Ancha, más allá que el resultado ante Barnechea no fuera el esperado y el partido correspondiera a una Copa Chile cada vez más despreciada por el medio. Fue el día en que el argentino asumió la responsabilidad de ser el capitán del Decano en Playa Ancha, tal como en su momento lo hicieron Jorge Dubost, Raúl Sánchez, Luis 'Pochoco' Acevedo, Héctor Robles y, más recientemente, Moisés Villarroel y Jorge Ormeño.
El hecho de ser extranjero y haber llegado hace poco tiempo a Valparaíso provocan que las sensaciones del ex Livorno italiano sean especiales.
'Es la primera vez en mi carrera que asumo la responsabilidad de ser capitán, y que fuera en Santiago Wanderers es una doble satisfacción', admite Cellerino, sin olvidar los factores externos que hace un año marcaron su incorporación al camarín porteño.
'Venía de todo lo que había sucedido con Mauricio (Viana), pero poco a poco me he ganado el cariño de los hinchas', admite con humildad y volviendo a insistir en que 'tener la oportunidad de ser capitán de esta institución, aunque sea por 45 minutos, me hace asumir una enorme responsabilidad', la misma que reconoce le habían hecho desistir con anterioridad de ponerse la jinete en sus anteriores clubes: 'Había sido segundo capitán de Unión La Calera y nada más... el líder debe serlo tanto dentro como fuera de la cancha y quizás, por ahí, no encontraba que fuera el momento para asumirlo'.
De todas formas, el ariete transandino se toma las cosas con calma y admite que hay otros miembros del plantel que en el torneo oficial son quienes asumen el rol.
'Ante Barnechea se dio, pero claramente hay jugadores que por trayectoria e identificación son los reales símbolos del actual plantel de Santiago Wanderers', añade el atacante, que mañana arrancará como titular ante Deportes Iquique.
Santiago Wanderers vivió una semana convulsionada tanto dentro como fuera de la cancha. Al despido de Ignacio Eguiguren se sumaron las consecutivas derrotas ante la 'U' por el Apertura y Barnechea por Copa Chile.
Mañana la visita será Deportes Iquique, un equipo que arriba a Playa Ancha (20.30 horas) con un registro negativo. Hace diez partidos oficiales que los nortinos no ganan: la última fecha del torneo de Clausura, seis encuentros por Copa Chile y las tres primeras jornadas del Apertura.
La última celebración celeste se produjo ante un equipo dirigido por Emiliano Astorga. Fue el pasado 19 de abril, en La Cisterna, cuando los Dragones vencieron por la cuenta mínima a Palestino.
Para el compromiso ante los nortinos, el entrenador prepara una modificación en el once del Decano. Y será justamente Gastón Cellerino quien deberá reemplazar al lesionado Roberto Gutiérrez, conformando dupla de ataque con Matías Mier.
'Las ganas de jugar juntos siempre están', admite Cellerino respecto de la tarea que tendrá junto al uruguayo, mientras respecto de la ausencia de goles en esta segunda parte del año, el argentino advierte que 'he estado en momentos más complicados y he salido adelante... no me vuelvo loco por marcar, porque la ansiedad te lleva a cometer errores, lo que quiero es ayudar con mi entrega para que Wanderers retome el camino de las victorias en el torneo', concluyó.
¿El once caturro? Castellón; Parra, Luna y Prieto; Abarca, Ormeño, Medel, Barriga y Luna; Cellerino y Mier.