Entre las diversas variables de la oferta turística de Viña del Mar y en general de nuestra zona, se encuentra el rubro de la hotelería. Y por ello es muy positivo que se sumen nuevos establecimientos a los ya existentes, como es el caso del nuevo hotel cuatro estrellas que se proyecta para la Ciudad Jardín, y que será levantado en la avenida Libertad esquina de 6 Norte. Del mismo modo, a estas nuevas habitaciones se suman las del Hotel O'Higgins, que serán refaccionadas y remodeladas, para adecuarlas a las necesidades actuales.

En los últimos años se han sumado diversos establecimientos hoteleros de primer nivel, tanto en Viña del Mar como en Concón y Valparaíso, fuera de los apart hotel y los mas pequeños bed and breakfest, haciéndose cargo de una carencia que era una de las mayores debilidades de la zona, que dispone de una completa gama de alternativas, entre ellas los atractivos naturales, espectáculos, gastronomía y actividades variadas.

Si bien es cierto que el nuevo establecimiento, de la cadena internacional Novotel, ha sido concebido como un centro de reuniones para concretar negocios, estimando que el 70 por ciento de su público objetivo estará compuesto por ejecutivos, es también un nuevo aporte para el turismo.

El proyecto considera la construcción de una torre de 25 pisos, 16 de los cuales serán para el hotel con sus diversas dependencias, como salas de reuniones y salones para eventos, además de un bar y restaurante. El resto de la torre será destinado a oficinas y contará con 299 estacionamientos. El proyecto tiene aprobado el Estudio de Impacto Sobre el Sistema de Transporte Urbano y solo deben cumplir con algunas observaciones formuladas en la Dirección de Obras Municipales, para comenzar a materializar la obra, la que debería estar terminada en el año 2017.

En relación con el Hotel O'Higgins, la Municipalidad viñamarina le extendió a la Hotelera Panamericana, la concesión hasta el año 2018, con la condición de que se realicen una serie de modernizaciones tanto al interior como en la fachada del establecimiento, para adecuarlo a las necesidades de delegaciones que participarán en la Copa América y el Campeonato Mundial de Fútbol Sub-17, y que son parte de las exigencias que hace la FIFA a las ciudades que serán sede de estos eventos.