Era una de las grandes críticas y deudas que la sociedad anónima que concesiona desde el 2008 a Santiago Wanderers mantenía con los hinchas. Y es que su restringida inversión al momento de conformar los planteles para cada temporada desembocaba, tarde o temprano, en campañas mediocres para una institución que hace una década dejó de ser protagonista de la competencia en Primera División.
Sin embargo, hoy parece haber un cambio. Disputadas las primeras cinco fechas del torneo de Apertura, el panorama parece mejorar en Valparaíso. Instalados en el segundo lugar de la tabla de posiciones y con la real opción de alcanzar lo más alto si mañana los dirigidos por Emiliano Astorga derrotan a Audax Italiano en Playa Ancha, desde calle Independencia se confirma que la actual planilla, incluyendo a jugadores y cuerpo técnico, es de 115 millones de pesos, un 20 por ciento más alta que la del primer semestre.
'Sí, claramente es más alta', reconoce Roberto Carrasco, presidente de la Comisión Fútbol de los verdes y uno de quienes se la jugó por convencer al resto de la mesa que preside Jorge Lafrentz para incrementar los dineros para la reestructuración del primer equipo tras el enorme fracaso que significó la era de Ivo Basay en el Puerto.
Para Carrasco la inversión es directamente proporcional al lugar que finalmente se logra en el torneo. 'Hasta el Clausura nosotros teníamos un presupuesto que nos ubicaba alrededor del lugar 12, y hoy creo que estamos en el séptimo lugar', advierte, reconociendo que alcanzar las platas que se inyectan en los planteles de Colo Colo, las universidades, O'Higgins, Unión Española o Deportes Iquique es 'imposible'.
'Para este torneo trajimos poco, pero bueno, y para ello había que poner más plata', asume el también accionista de la sociedad anónima, aunque explicando que en millones el incremento se controla porque en su momento también partieron sueldos importantes, como los de Sebastián Pol, Boris Sagredo o el mismo Fernando de La Fuente.
'Acá no hay mucha ciencia. Cuando Audax Italiano, Huachipato o Cobreloa dejaron de meter la plata que ponían, rápidamente se vio reflejado en el tema deportivo', sostiene el mandamás de la comisión fútbol porteña, asumiendo que 'no podíamos seguir esperando, porque los buenos resultados definitivamente nunca llegaron... había que darle una vuelta al tema y asumir que si queríamos jugadores de la calidad de un Roberto Gutiérrez o de un Jorge Luna había que estar a la altura de sus requerimientos'.
'Esta es la planilla más cara desde que asumimos la dirección de la institución, es un esfuerzo del directorio que no asegura el éxito, pero que nos da más opciones de recuperar el protagonismo en el torneo y luchar por los objetivos planteados', explicó.
Para Roberto Carrasco decir que un jugador o un entrenador es caro 'es muy relativo'.
'El actual cuerpo técnico no es barato, pero con los resultados termina justificando los dineros, a lo que se suma la alegría que semana a semana se le entrega a los hinchas... lo mismo con los futbolistas', sostiene, destacando también que 'a todo lo anterior también se suma que hoy tenemos un grupo consolidado... muchos que antes no rindieron hoy lo hacen de mejor forma. Cambiarle la cara a un equipo no es sencillo y requiere de tiempo', agrega el regente.
Tres futbolistas terminan en diciembre su vínculo con Santiago Wanderers: Gabriel Castellón, Agustín Parra y Matías Mier, quien debe volver a Universidad Católica.
'Con Gabriel (Castellón) estamos negociando y las conversaciones se han extendido más allá de lo que esperamos, pero queremos que se quede', advierte Roberto Carrasco, reconociendo que en el caso del defensa han tenido 'solo conversaciones' y que ya llegará el momento de hablar, mientras que sobre el uruguayo explica que 'ese es un asunto que se tendrá que tratar con Católica'.
Juan Carlos Moreno A.
115
20